Pide Que Me Quede

Esos ojos.

Gracias a Dios es domingo, son las 12pm cuando mi madre entra un poco histeríca a mi habitación abriendo las cortinas con brusquedad.
Abro los ojos de golpe por el ruido y enseguida los vuelvo a cerrar por tanta claridad entrado.

-Mamá por Dios, en serio era necesario eso?

-Elizabeth son las 12pm, que esperas? A que cante el gallo otra vez?

Rodeo los ojos y comienzo a salir de la cama.

-Vístete, quiero que me acompañes al súper y por otras compras.

-Mamá es domingo, por favor no!

- 5 minutos Elizabet, apresurate.

- Genial- digo para mis adentros.

Decido irme en unos jeans de mezclilla, mis zapatillas negras y el sudadero que le robe a Tomas hace años, me talla grande pero es tan genial que no me importó.

En el auto mi madre empieza a hablar sobre el porque debería llamar a mi padre de vez en cuando, me limito a negar con la cabeza e intentar cambiar el tema.

-Ellie, los problemas con tu padre son únicamente entre el y yo, no tiene porque afectar en su relación como padre e hija.

-Madre, no puedo hacer caso omiso a lo patán que se comportó contigo durante muchos años, entiéndelo.

-Es tu padre Elizabet, y eso no lo vas a cambiar.

Frunzo los labios - Lo llamaré pronto mamá, pero solo para hacerte feliz.

Llegando al súper tomo una carretilla y empezamos el recorrido de pasillo en pasillo.
Mi madre no tiene la mejor de las experiencias en las compras para la casa y siempre debo hacerle una lista de las cosas que necesitamos para que no se le olvide nada.
SORPRESA! se le olvido la lista.

Mientras intento recordar lo que necesitamos giro mi vista a la sección de utensilios de uso personal y lo veo, casi no puedo creer que sea el porque se ve distinto.

-hola gruñona- alcanzo a leer en los labios de August seguido de su sonrisa de idiota

Bajo la vista y enseguida lo vuelvo a ver con el seño fruncido.
El ríe y se acerca a donde estamos mi madre y yo.

-Buenas tardes jóven- dice mi mamá apresurandose a darle la mano

August le responde el gesto y me guiña el ojo mientras suelta la mano de mi madre.

Mi ojos arden en llamas al ver el gesto y me apresuro a tomar la carretilla y continuar, hasta que...

-Elizabet no seas mal educada por Dios, te comportas como una niña.

Sip. Mi madre y su frase favorita.

-Si Elizabet, pensé que el descórtes era yo, o no?- levanta la ceja.

-Para nada, es solo que llevamos prisa, y si no te molesta vamos a continuar.- empujo la carretilla y a mi madre no le queda mas que seguirme, no sin antes despedirse de August.

-Es lindo, ¿de donde lo conoces?
Creo haberlo visto antes..

Freno en seco, y algo apresurada le pregunto
-¿De donde lo conoces madre?

mi madre levanta los hombros y continua su camino...
-Creí que no te agradaba

-No me agrada mamá, pero es curioso que tu le hayas visto antes y yo no.

Giro la vista al sitio en donde estaba el, el giro su mirada hacia a mi, como un imán.
Vi sus ojos, nunca antes me di la oportunidad de verlos, eran grandes, color avellana delineados por el negro de sus pestañas gruesas... Sentí un cosquilleo en el estomago que me hizo apartar la mirada de golpe. Me sacudí su imagen de la mente y continué con las compras.

***
Después de las compras quedó de juntarme con Cata y Tamara para ir por un café y ponernos al día sobre la escapada de Cata con Richard.

Catalina siempre ha sido enamoradiza, he conocido cada una de sus relaciones y nunca son nada serio, no por ella sino, por los chicos que la pretenden, Cata es realmente guapa, tiene una cabellera rizada pelirroja, su tez es blanca y tiene los ojos verdes, que realmente le resaltan. Los chicos la ven mas como un trofeo que como una novia, a pesar de tanto Cata siempre ha conservado su buen corazón, aunque a veces quiera aparentar lo contrario.

- Richard es realmente lindo, creo que es el indicado- Dice con tono emocionado, mientras achina los ojos al sonreír.

Tamara y yo rodeamos los ojos y nos miramos una a la otra con cara <<aquí vamos>>

-Cata, amiga, no es por matar tu tierna emoción, pero eso dijiste la última vez, cuando estuviste con Josh- dice Tami con tono sereno.

-Si, pero Josh siempre fue un idiota- Dice Cata mientras fusila a Tami con la mirada.
Pero cambiando de tema, Ellie, tienes que contarme que te traes tu y ese chico misterioso de la playa.

Tomo un sorbo de mi café y digo -Se llama August y es un tonto, no nos traemos nada, solo dice conocerme, según Tomas el estaba en la fiesta de Amy.

Ambas sonríen de forma pícara, yo las fusilo con la mirada.

-Tienen que contarme de que rayo hablan- dice Tami un poco ansiosa.

-Es simple mi querida Tamara - Dice Cata 
Elizabeth y ese tal August, sufrieron del amor a primera vista.

-Estas loca si piensas que estoy enamorada de el, y ¿amor a primera vista?, Por favor Cata ya no estamos en secundaria para creer en esas tonterías- Digo un poco exasperada

Siempre me siento extraña cuando me lo mencionan, me invaden los pocos ratos en que he estado con el y ese maldito cosquilleo aparece. 

-Hola, Ellie? ¿estas aquí?- veo a Tami mover su mano frente a mi cara.

-¿Ves lo que digo? la trae loca. - Cata y su sonrisa pícara de nuevo.

-Hablo en serio chicas, no me interesa en lo absoluto.

Ambas asienten con la cabeza de forma sarcástica, me limito a seguir bebiendo de mi café porque realmente no quiero seguir hablando de el.