capítulo 8

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querida Lusix

Hola... he...

La verdad no se como iniciar, es un poco raro, pero tu lo hacias así que debe de ayudar un poco y pues yo te dije que lo hicieras así que es algo contradictoriamente relevante.

Bueno ya...

Esta es mi primera carta hacia ti, ya han pasado cuatro meses desde que estas muerta, te extraño y mucho.

Nunca pude comprenderte bien o lo suficiente para poder ayudarte y me siento mal por no haberlo logrado, yo se que ese es mi trabajo, ayudar a la gente como tú. No es que no me aya gustado como eras, tu eras la rarita que más amaba, amaba tu rareza, pero esa rareza que amaba se volvió locura, locura hacia algo o alguien que no se explicar. Y todo por el maldito día. y se, que fue por ti que me hice psicologo pero muy aparte fue porque yo necesitaba serlo para porder recuperarte, para que volvieras a mi, para aunque sea recuperar algo de mi risueña lusix, con una sonrisa me bastaba, desde el día que inició todo no te vi reír, no te vi con el tink, ese tink que le ponías a todo lo que hacías, tu hacías que todo a tu alrededor se vea alegre, único, especial, todo y únicamente por tu tink. Creo que la palabra tink ya no está en tu vocabulario. ¿es posible olvidarse de algo que hace feliz a más de una persona, en especial si tu lo inventaste?, lo olvidaste y tu dijiste que todo es posible pero no específicaste si era bueno o malo.
Lo olvidaste, olvidaste tu tink y eso es malo. Eras otra, no eras tu, despues de aquel dia tu no fuiste la misma.

He leido todas tus cartas, todas las cartas que tu escribias a esa persona a la cual pensabas que se encontraba muerta, pues al fin han llegado a su destino.

te ama,

Bratt.

querido tuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora