Dark Sadness

Parte 15

Amaba tanto a Ian que dejarlo ir ya no era una opción, habíamos sufrido tanto que era tiempo de ser felices, aunque no sabia si esa palabra existía en mi vida.  

-Tengo miedo Ian.

-Nadie nos hará nada, juntos podemos vencer a quien sea ¿Si? 

-Ian, no estamos hablando de cualquier persona, estamos hablando de alguien que mata gente, tenemos que tener cuidado. 

-No es tiempo de pensar en eso Megan, por favor. Ahora tengo una sorpresa para ti, necesito que te pongas esto en los ojos.-me entrego una venda y me la amarre en la cabeza.- Ahora confia en mi, subiremos en mi auto y te llevare a un lugar. 

Me imaginaba millones de lugares a los que el me podría llevar, pero no estaba segura aveces podia ser una caja de sorpresas... El camino duro una hora y yo empezaba a aburrirme, le pregunte unas mil veces cuanto faltaba y el respondía siempre lo mismo "Poco" me estaba empezando a desesperar.

Hasta que llegamos, me hizo caminar unos 10 minutos y luego me dijo que podía sacarme la venda, al hacerlo me di con una hermosa sorpresa, era un picnic, todo estaba perfectamente hecho, todo bien decorado y yo pensaba que estaba en un sueño. Habían luces y fotos colgando de tres arboles, en el piso habían manta, Ian saco de una canasta una botella de vino y yo no podía evitar llorar de alegría. 

-¿Te gusta? 

-Me encanta Ian, no puedo creer que hayas hecho todo esto por mi. Te amo.-Le di un beso.

-Te amo mas pequeña! Eres la mejor, te mereces esto y mas. 

Ian y yo pasamos la noche juntos ahí, en medio de la nada... aveces sentía que alguien vendría y nos mataría como en las películas de terror pero no paso nada, estábamos seguros y esto fue lo mas romántico que alguien hizo por mi. 

No dejaba de pensar en un futuro con el, ver crecer a nuestros hijos, tener una familia feliz, todo era tan perfecto con el... Pero yo sabia que eso no duraría mucho, yo volvería a mi vicio y empezarían los problemas nuevamente. El no lo soportaría pues el intentaba dejarlo pero yo lo necesitaba conmigo, como el lo dije una vez, aveces solo funcionábamos cuando estábamos drogados. 

Tenia tanto miedo que no sabia si salir corriendo antes que el despierte o quedarme ahí a enfrentar mis problemas, sabia que si me iba no solucionaría nada, debía dejar de escapar de mis problemas o ellos me alcanzarían. Yo ya había decidido quedarme junto a Ian a pesar del peligro que corríamos juntos pero seguía pensando que la relación era demasiado toxica para los dos, aunque mis ganas de formar eran mas fuertes. 

Nos queríamos ¿Si estábamos juntos que podía salir mal? El único peligro era Austin y sus hombres.  

-¿En que piensas Meg?-Dijo mientras me ponía la mano en la cara suavemente. 

-En ti, como siempre. - En realidad si pensaba en el, solo que no de la manera en que el pensaba. 

-¿Y que piensas? ¿Piensas en como te hago mía una y otra vez? ¿Sin parar?-Puso una mirada picara. 

-¿Y si dejo de pensarlo y lo hacemos? ¿Una y otra vez? 

-Me parece una excelente idea. El se puso sobre mi y me comenzó a besar todo el cuerpo

Poco a poco la ropa que nos separaba iba desapareciendo, cada vez que hacia esto con el parecía un sueño. El me llevaba a las nueves una y otra vez, no importaba cuantas veces lo hagamos, siempre me hacia sentir bien. 

Cuando desperté, Ian estaba dormido, se le veía tan tierno mientras dormía, tenia la cara de un ángel y eso me enamoraba mas. Vi como se movía queriendo despertar y me pareció aun mas tierno.

-Buenos Dias.-Dijo con una voz gruesa. 

-Dormilon -Reí

-¿Alguna vez te habia dicho que tus nalgas son perfectas?

- No y me gustaría que lo digas mas seguido -Dije con una voz seductora

-No hagas eso Megan-Hizo haciendo un puchero 

-Eso, esa sonrisa que me mata y que luego hace que reviva otra vez, no sonrías así. 

-En el fondo se que te gusta.

-Nunca dije que no. 

Estar con el, era perfecto. No quería cambiar eso, pero mi pasado amenazaba con acabar con toda esa felicidad.