High For This ||H. S||

👀One👀

Narrador POV_

Eran apenas las 6:00 am en punto cuando la chica abre sus ojos, más no logra ver los hermosos rayos de sol que entran por su ventana iluminando su habitación color blanco o las pequeñas gotas de agua que están en su ventana por el sistema de riego.

Estira sus brazos hasta que escucha ese pequeño truene entre huesos, su madre le ha dicho que no haga eso, que es malo para la salud, bla bla, pero a ella le gusta esa sensación que da al final, un cosquilleo.

La chica se sienta en su cama bajando los pies y riendo al sentir el piso frío sobre ellos, esa sensación le da una descarga por el cuerpo, como un escalofrío. La puerta se abre de golpe haciendo que la chica salte del susto, el chico detrás de la puerta al ver la reacción de la chica sonríe avergonzado, no quería ser rudo al entrar.

-Tranquila soy yo - ríe un chico castaño, es alto para ella, pero también ella sabe que no es la chica más alta, mide apenas 1,68 cm de altura - ¿nerviosa?

Siente como la cama se hunde a su lado cuando su hermano se sienta junto a ella - Emocionada más bien - ríe.

Su hermano sonríe - ¿Por qué emocionada?

Alza una ceja - ¿Y porque debería estar nerviosa? - sonríe sabiendo aun sin ver, que su hermano la mira con una sonrisa tierna.

-Es tu primer día de preparatoria, deberías estar dormida y no despertar diciendo que ya eres mayor y que la escuela no sirve para nada, así yo pudiera venir con un balde de agua y tener una excusa para poder tirarlo sobre ti como toda chica normal de 17 años - ríe.

La chica se queda pensado en que responder - A lo mejor no soy una chica normal y debes entregarme a las autoridades, así te puedes deshacer de mi.

Su hermano se queda pensativo, sus ojos se le llenan de lagrimas, las quita rápido a pesar de que sabe que ella no puede verlo - A lo mejor si, tal vez lo haga - pasa un brazo por sus hombros - Aunque no se que haré con tu cuarto, tal vez lo convierta en un gym.

La chica suelta una enorme carcajada - Idiota - con su hombro lo empuja tiernamente.

Liam besa su cabeza - Jamás podría hacer eso, nunca, eres mi pequeña butterfly* lo sabias ¿cierto?

Ella se acurruca en su pecho - Lo se y tu eres mi hero - suspira.

- Ahora empieza a vestirte que se te hace tarde - Se levanta, revuelve su pelo como perro, ella le da un manotazo.

-Anda vete - el en respuesta suelta una carcajada, escucha como la puerta se cierra segundos después.

La chica se levanta, con sus pies descalzos empieza a buscar sus zapatillas de baño, sonríe al sentir como la suavidad del piso le roza en las puntas de los dedos.

Choca contra algo, sus zapatillas, se las pone y con una mano empieza a buscar a tientas, hasta que topan contra la pared. Camina aun con sus dedos rozando el muro, hasta que estos caen a otro muro, la chica toca escuchando lo hueco de la puerta.

La abre y se adentra a ella, la cierra dejando una pequeña abertura, empieza a hacer la misma rutina que siempre hace desde que su mamá le enseñó por primera vez.

Abre las llaves del agua y se desviste, entra a la bañera con ayuda de dos barras de metal pegadas en cada lado de la pared, se sienta con cuidado hasta que sus brazos topan con el inicio de la bañera, abre las llaves de la regadera, arquea la cabeza para que las gotas de agua le caigan en el rostro.

Las cierra al sentir en nivel del agua llegarle al pecho, empieza a aplicarse shampoo en su largo pelo, que según su madre es castaño rojizo, con sus manos hace peinados graciosos, ríe al imaginarse con ellos, sumerge la cabeza en el agua para enjuagar, ella ama esa sensación, el sentir estar bajo agua y que tu cuerpo pierda todo peso porque estará flotando, nunca a nadado en un río o en el mar, ni siquiera una alberca, pero ella se imagina estar acostada con un bikini en medio de un lago, sintiendo como cada poro de su piel se moja y absorbiendo cada rayo de luz que el sol daría...