Capítulo 21

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Capítulo 21

-¡Mi princesa, nos atacan...!- Escuché la voz detrás de la puerta, era claramente la voz del hijo de Horus.

Sentí como Nico me tomó de la mano, no recuerdo nada más que ver oscuridad completamente. Cerré los ojos con fuerza, un vació se formó en mi interior, no era capaz de mirar nada, sin embargo solo fueron cuestión de minutos para que todo parará, al abrir lentamente los ojos, mis hordas se abrieron violentamente.

-¿Dónde estamos?...-fue la primera pregunta que logró pronunciar mis labios, dirigí mi mirada al peculiar hijo de Hades.

Este estaba más pálido de lo normal, supongo que eso se debe a las consecuencias que trae hacer un viaje sombra, trague saliva lentamente. El lugar era una clara sala antigua y empolvada, los muebles estaban cubiertos con unas sábanas blancas, parece una casa o algo así.

-Te traje aquí... para...-se quedó pensando en sus siguientes palabras, ya se veía mucho mejor que antes-Bueno... Esta es mi antigua casa... - Nico cada vez que hablaba tartamudeaba más.

Suspiré profundo, examinando el lugar con la vista, sin embargo mis ojos pararon en una tijera, me acerque corriendo hasta ella. Las tome para cortar la larga cola del vestido, al hacerlo me sentí más libre que antes, ya no iba a creer pues estaba fuera de los límites de ese "palacio".

-¿Dónde se supone que estamos?- le pregunté, volteando a mirarlo fijamente a esos ojos oscuros que tanto me gustan, me acerque a paso lento a él.

-Estamos en mi vieja casa...-Murmuro.

Pasé mis brazos por el cuello del chico, estaba a punto de plantearle un beso, cuando una luz en la casa nos cegó.

-¡Vamos, siempre los encuentro en situaciones así!...-Exclamó, una voz que reconocí de inmediato.

-¡No, otra vez!...-exclamé, sintiendo como jalaron mi oreja fuerte.

Voltea a mirar a los dos rubios que acababan de llegar, uno de ellos era "el Superman rubio" y el otro el primo de Annabeth, claramente, suspire resignada al igual que Nico, nunca íbamos a tener un momento privado sin que nadie llegará a molestar, pero eso era pedir mucho. Solo fueron cuestión de minutos para ambos nos sentarán en un mueble para empezar con el regaño habitual de Jason.

-No es momento de andar como Romeo y Julietta, tenemos que buscar a Rachel, los chicos se encargarán de defender pero nosotros tenemos que encontrar al oráculo, ella debe decirnos algo importante- el rubio nos explicó, mientras que nosotros teníamos la cabeza abajo.

-Solo quería protegerla...-fueron las únicas palabras del hijo de Hades, este se paró de golpe para irse de la sala.

-¡Pareces una vieja!- exclamé a Jason para irme detrás de Nico, no lo iba a dejar solo, además es absurdo que estén buscando algo que yo no tengo.

-¡Nico, espera un momento!- lo tomé del brazo, pero este se soltó rápidamente para voltear a verme, estaba molesto eso lo podía ver.

-Solo me traes problemas, ojalá no te hubiera conocido, déjame solo...-escupió aquellas palabras, que tanto me dolieron.

Empecé a retroceder lentamente, cerrando mis ojos para que no viera como mis lágrimas amenazaban con salir, al darme cuenta que choque con la pared solo me quede inmóvil, escuché como la puerta se cerró.

-¡Quiero irme de aquí, sácame Padre!...-susurré, sintiendo como caían mis lágrimas, de la nada empezó a faltarme el aire, se me había olvidado que sufría de estados de crisis, mis pulmones se estrujaron en el pecho, caí al suelo sin saber nada. Solo sentía que la vida se me va...


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Hola, ¿Qué tal le pareció? Hacía mucho que no le ponía drama a uno de los capítulos de la novela, lo sé, lo sé... ¿Alguna sugerencia para el próximo capítulo? ¿Quieren que haga otro capítulo narrado por Nico?


Ladrona de mi corazón (Nico Di Angelo) © ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora