No Llores Más || Springle

~Capítulo 12~

"No importa si yo...

•Narración•

Un chico ojiperla se encontraba caminando pensativo por las calles con su adorable mascota. Y tal vez se preguntarán ¿Qué piensa él? La respuesta puede que sea muy obvia, pero no paraba de pensar en ello. Ese pensamiento lo había mantenido en largas noches de insomnio, pues sólo pensaba en la forma de volver a tener cerca a esa chica de voz angelical y Albina, sentia tantas ganas de tenerla a su lado y poder sentir el dulce resonar de su voz; pero había un pequeño detalle, ese pequeño detalle era Deuz.

-¡Vamos! no puedo dejar que solo con algunas palabritas ese zoquete logre mantenerme lejos de ella -Decía el chico ojiperla a si mismo- debe haber alguna forma de que yo- oh, oh, ¡El lavaplatos!

Springtrap se dirigía de nuevo casi corriendo a su "trabajo"; él solo guardaba la esperanza de que en la casa de la señora encontrará alguna forma o plan de acercarse a Meg.

-¡Llegue! -el chico de cabellos rubios estaba agitado de tanto correr hacia ese lugar. Toco la puerta y espero una respuesta-

-Voy -La anciana entre abrió la puerta lentamente- Ay, Mijo, eres tú; mira como estás! Ven pasa -abrió totalmente la puerta para que el joven pudiera pasar-. ¿Estás bien? ¿Necesitas algo? ¿Algo de agua? -La señora exclamaba una y otra vez-

-No, no se preocupe, yo estoy bien!. Ese lavaplatos no esta bien -Señaló sonriente al objeto-. Ahora... -Springtrap se dedicó a arreglar el artefacto-.

La señora miraba con dulcura al chico tan modesto, que apesar de ya haber venido más de 2 veces a su hogar y deberle tanto dinero aún seguía siendo muy amable y con esa sonrisa tan radiante que siempre adornaba su rostro.

Pasaron algunas horas y ya Springtrap había terminado. Esa tarde paso algo un poco inusual, la señora le había pagado a Springtrap, pero fue sólo un poco de lo que le debía; pero al fin y al cabo... Algo es algo, ¿No lo creen?. 

•Narra Springtrap•

Salí de la casa de la señora con una sonrisa. Pero algo me detuvo, mire unas flores que estaban en el jardín de su casa, y ahí donde menos lo esperaba  fluyo la idea...

-Señora -...Algo inesperada y parecia ser una locura...- Tengo una pregunta -...Pero eso no importa; yo solo quiero...- ¿Puedo coger algunas de sus flores?, es para... Algui- D-digo, es para plantarlas en mi... ¿jardín? -...¡Volver a estar junto a ti!- Por favor

-Claro, no hay problema -La señora respondió riendo un poco.- (¿Para quien serán?, este muchachito ya anda en esas. Debe ser una muy buena chica la que este con él)

¡Son muy bellas!, Espero y le gusten. Se que todo va a salir bien, y si no lo hace, ¡que mas da!, seguiré intentando. No dejaré de intentarlo, ya se que quiero, ya se que yo... no quiero sólo una simple relación de Brother entre nosotros; esa barrera... ¿Cómo puedo llegar a romperla? La verdad no lo se, de hecho no se muchas cosas, pero si tengo claro, quiero que estés a mi lado, yo quiero estar a tu lado, para... siempre.

-Bien, señora, creo que... son suficientes. ¡DE VERDAD MUCHAS GRACIAS!

Me despedí rapidamente de ella y me dispuse a caminar por esas calles vacías y solitarias de estos barrios.
Con la mano derecha sostenía algunas flores, pero sentía que algo dolía, y era una sensación tan...

-AUCH. Ah, ah, ah, duele

Y en ese momento fue en donde me di cuenta de que mis manos tenían muchos rasguños y heridas, la pregunta es ¿Por qué no lastimaban cuando estaba quitando las del jardín? ¿Será porque... estaba pensando en ti?. Ardía, pero no importa, vale la pena, lo sé. Dolía, pero será pasajero, en algún momento el dolor de ira y estaré bien. Sabía que en algún momento ese líquido carmesí iba a brotar de esas heridas, pero es de poca importancia, sanará, y se que estaré bien.