Capítulo 8

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Narra Alessia

Me quedo parada en seco. A los pocos segundos reacciono y no me sale hacer otra cosa que no sea correr y esconderme detrás de una planta. Ashley viene detrás mía.

-¿Qué pasa? - me susurra -

-Nada, nada. Espera. - le digo. -

¿Lo que acababa de ver es real?
¿Zayn y Tiffany juntos?
Estaban en la cola de una cafetería. Ella no paraba de reírse y él sonreía bastante. Se nota que él es mucho más serio.
De repente, veo que Tiffany coge a Zayn de la barbilla. Me tenso. Me tenso bastante. ¿Enserio va a darle un beso? No puede ser. Pero entonces veo como ese beso acaba su trayecto en la mejilla de Zayn. Una parte de mí respira. Mi amiga toma la palabra.

-Alessia, ¿Qué pasa? ¿Es que conoces a Zayn?

Yo asiento. Me doy cuenta de que no le he contado nada a la rubia que está a mi lado. Vuelvo la mirada hacia la pareja y veo que siguen en la cola. Zayn está jugueteando con una niña pequeña, ¿sería su hermana? hay momentos en los que la coge en brazos, y otros en los que se limita a dejarla en el suelo y a darle la mano. Pero luego la pequeña se cambia de sitio y le da la mano a Tiffany.

-Estoy flipando. - es lo único que consigo decir en voz alta -

-¿Por qué no vamos a algún sitio, te relajas y me cuentas lo que está pasando? - dice Ashley riéndose un poco. Es normal que no entendiera nada de lo que estaba pasando. -

Finalmente asiento, y sigo a mi amiga que me lleva afuera del centro comercial. Se para y me mira.

-¿Quieres que vayamos a mi casa o prefieres quedarte aquí?

-Vamos a tu casa.

-Está bien.

Nos metemos en el coche y mi amiga conduce hasta su casa. No entendía nada. ¿Qué relación tenía Zayn con Tiffany?, y ¿Quién era la niña pequeña?, y ¿por qué me había cabreado tanto esa situación? Debería de ser me indiferente.
Paso todo el trayecto de vuelta a casa de Ashley en silencio, y ella tampoco dice nada. Cuando llegamos, bajo del coche y entro detrás de ella a su apartamento.

-Vamos a la cocina, así podemos hablar mientras preparo algo de merienda, ¿quieres?
Asiento mientras la sigo a través de su casa. Era bastante grande y estaba muy bien decorada. Me fijo en que es un apartamento de varias plantas, ya que hay escaleras que conectan a la primera planta en forma de espiral. Las paredes estaban vestidas de un tono color crema y había muchos cuadros colgados. Podía diferenciar hasta seis personas en cada marco. Parece que Ashley pertenecía a una familia numerosa y aún así, la casa esta tarde era para nosotras.
Llegamos a la cocina y me siento en la barra mientras la rubia empieza a rebuscar en los cajones altos.

-¿Me puedes explicar qué ha pasado hace diez minutos? - dice mi amiga riendo -

-No lo sé. No lo sé ni yo. Ha sido girar la cabeza y me he encontrado a Zayn con la pija de Tiffany. - digo en un tono donde se podía apreciar el asco -

-Pero Alessia - mi amiga se gira, mirándome ahora fijamente - Tiffany lo sé, pero ¿de qué conoces a Zayn? Parece que en un solo día has conocido a mucha gente, eh.

Río leve por las palabras de Ashley y rebobino para poder contárselo todo desde el principio. Suspiro.
-Se me había olvidado contártelo. Cuando salí de latín, me tocaba gimnasia. El profesor dijo de hacer un partido de voley y jugué, y para qué queremos más. - ruedo los ojos - Le tocaba sacar a Tiffany y yo no estaba pendiente del balón, y me dio en la cara, en la nariz. Por eso tengo este mini moratón. - digo señalando mi nariz y haciendo una mueca. La ojiazul hace un inciso -

-Qué mal me cae, de verdad. ¡Haberle pateado la cabeza! - las dos reímos - Y... ¿Qué tiene que ver eso con Zayn? Sigue, sigue. - dice mientras saca una sartén de un mueble. Veo como saca tortitas congeladas del frigorífico y sirope de chocolate de otro lado de la cocina. La verdad es que tenía muy buena pinta. -

-El profesor me mandó a la enfermería y me perdí. Entonces me encontré con él y me dijo que si quería que me acompañara, y le dije que no.

-¿¡Le has dicho que no a Zayn Malik!?   - Ashley empieza a reírse a carcajadas y yo continúo la historia -

-Sí, le dije que no, pero como es muy cabezón al final me acompañó. - ruedo los ojos - Creo que llegó tarde a algún sitio por mi culpa. Y eso es todo. Ah, y cuando iba a irme a mi casa, pasé por el gimnasio para darle mi justificación al de gimnasia y me lo volví a encontrar, y se ofreció a llevarme a casa. La verdad es que vivimos muy cerca. - digo terminando y suelto un ligero suspiro - Y eso es todo.

Ashley está mirándome con la boca abierta y riéndose.
-No puede ser. Y se ofrece a acompañarte. - mi amiga ríe más -

-¿Y qué pasa? - alzo una ceja - ¿No puede?

Mi amiga asiente rápidamente.
-Claro que puede, pero no es normal en él. Alessia, Zayn es el capitán del equipo de Rugby. Y medio instituto está colado por él.

Me encojo de hombros.
-No me extraña, es bastante guapo.  - le sonrío -

-¿Y por qué te ha molestado tanto verlos juntos? ¿Es que te gusta? - dice echándome la sonrisa más picarona que ha puesto en la vida -

-¡¿A mí?! ¡¿Zayn?! ¡No!? - digo negando muchas veces con la cabeza -

-Ya ya... - mi amiga ríe juguetona - Mañana por la noche lo verás. Lo veremos. Porque el también va a la fiesta.

-Lo sé. - asiento - Y no quiero. No después de lo que he visto hace un rato.

-No te preocupes - dice Ashley quitándole hierro al asunto - Zayn y Tiffany no pueden llegar a ser nada. Ella lleva intentándolo toda su vida y es patético. - ríe -

*****

Sábado, 8 de la tarde.

Estoy enfrente del espejo viéndome con el vestido que compré ayer. La verdad es que me queda bastante bien. He decidido acompañarlo con unos tacones que tengo dorados y un bolso a juego, recogiendo mi pelo en un moño desordenado, pero elegante a la vez.
Noto mi móvil vibrar encima de la cama. Es Ashley, ya está afuera para irnos juntas a la fiesta. Mi madre no está, como siempre. Así que opto por dejarle una nota encima de la mesa.

Mamá, estoy fuera con una amiga. No me esperes despierta, llegaré tarde. Nos vemos.

Me pongo una chaqueta negra corta para no pasar frío mientras llegamos, y salgo de casa cerrando la puerta con llave y andando hacia el coche de mi amiga.
Algo me dice que esta noche va a ser un poco movida.


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