Me despierto sola…. Cosa muy rara ¿y la alarma? Me levanto me froto los ojos y voy al baño a lavarme la cara. Salgo del baño y me pongo las gafas. ¡Hoy es sábado! Por eso no sonó la alarma, no tenemos clase ¿qué hora es? Miro el reloj que tengo en la pared… ¡LAS UNA Y MEDIA! ¿QUÉ? ¿Me he quedado dormida tanto tiempo? Bueno, ayer por la noche empecé a pensar…. Y me acosté tarde. Voy a ponerme algo sencillo, luego me cambiaria para esta tarde. Si, al final voy, aunque luego me arrepienta toda mi vida… pero al final voy. Voy a abrir la puerta pero antes de abrirla me encuentro con un papel en el suelo, lo cojo.
Te voy a matar, yo que me quería despedir de ti y no nos abres la puerta. Pues vamos a ir a desayunar sin ti– Rox
Que chica… por un segundo pensé que sería otra carta de Luke diciéndome que no iría, que era una broma… o que ya se le paso la fiebre y ya no quiere salir conmigo. Pues porque vamos, para salir conmigo hay que estar muy enfermo y encima Luke… el chico malo.
Dejo el papel en la mesita de noche y salgo de la habitación, me encuentro a Wen.
- Ahora mismo iba a pegar… aunque no sabía si hacerlo o no… no quería despertarte- dice Wen.
- Me acabo de despertad… Ya os dije que tenía sueño- sonreí.
- ¿Vamos a comer?
- Si, vamos.
Vamos a la cafetería y cogemos las bandejas y pasamos delante de las mujeres para que nos pongan nuestra comida.
- ¿Y tú que vas a hacer hoy?- me dice Wen cando nos sentamos.
- Pues voy a estar con… mis amigas que van a venir- me rasco la frente y me subo las gafas, se me notaba que mentía.
- ¿Segura?- me noto que mentía.
- Claro… ¿Y tú que vas a hacer?- pregunto.
- Pues nada… estaré por aquí.
- Espero que te encuentres con tu amado- rio.
- No tiene gracia- se empezó a poner algo roja.
Me rio y al final ella acaba riendo.
- Buenos días chicas… Oh por fin te has despertado __- escucho la voz de David.
- Ya os dije que tenía sueño, yo con el sueño no bromeo- sonrío.
Se sienta enfrente de nosotras y empezamos a comer. Notaba que me temblaban las piernas y las manos… No estaba muy puesta en la conversación de Wen y David… estaba muy nerviosa y no tenía apenas hambre. Jugué con la comida hasta que Wen y David empezaron a levantarse.
- ¿___? Parece como si estuvieras en otro mundo- dice David.
- Es que si me levanto tan tarde estoy unas horas un poco ida- digo.
Me levanto y vamos a dejar las bandejas.
- ¿A qué hora te vienen a recoger tus amigas?- me pregunta David.
- Pues a las 6 tengo que ir a la estación.
- Son las 2 y media… ¿Tienes tiempo para una partida de billar?- me pregunta David.
- Claro que tengo tiempo- sonrío.
- Pues vamos- dice David y me coge de la mano... me quedo un poco exhausta al notar su tacto, pero vuelvo a la realidad cuando el tira de mi mano para ir a la sala en la que hay 3 mesas de billar. Empezamos a jugar, él rompe el triángulo y empieza la partida.
- David…- digo cuando me toca tirar a mí.
- ¿Qué pasa?- me pregunta apoyada en la mesa.
- No se jugar al billar- digo algo avergonzada.