- Cabron- le digo mientras me pego a la pared de la ducha ya que me temblaban las piernas.
Luke metre otro dedo y empieza a dar pequeños giros.
- ¿Y tú qué?- me pregunta cerca de mis labios.
- Te lo merecías
Luke da los giros cada vez más pequeños, gimo y agarro de los pelos a Luke.
- ¿Por?- me da un pequeño beso.
- Por el beso con Roxana
Luke para de hacer giros, pero no saca los dedos, se ríe y me mira a los ojos.
- ¿Te pusiste celosa?- me pregunta y levanta una ceja.
¿Por qué me tiene que mirar así? Ag. Besos sus labios desesperadamente.
- No, no me puse celosa- digo dándole pequeños besos.
Luke se ríe y saca sus dedos de mí. El agua sigue cayendo y mojándonos. Pone sus manos en mis mejillas y junta nuestros labios de nuevo.
- No que va.
Separo a Luke de mí, haciendo que choque con la otra pared de la ducha. Voy hacia él de nuevo, meto mis manos bajo su camiseta y toco sus abdominales.
- Y no- le respondo.
Como dos niños chicos, nos picamos. Beso sus dulces labios, blanditos, perfectos.
- Sí que estabas celosa, muy celosa, hasta lloraste.
Ug, no lo tenía que haber dicho, fue como si una espina se clavara en mi corazón. Me separe lentamente de él.
- Yo… no quería decir eso, me he pasado, lo siento.
Suena la sirena, se acabó la clase, ya no había más clase. Aproveche el sonido de la sirena para salir corriendo del cuarto de baños, pero antes me abroche el pantalón. Luke corrió detrás de mí, pero todo el mundo salió de sus clases y me perdí en la multitud.
~~MÁS TARDE~~
Estoy en mi cuarto, secándome el pelo. Todo el mundo se me quedo mirando, normal, no todos los días se ve a una chica mojada por los pasillos. Hace poco vino Wen y me dio los libros que me deje en la clase, le dije que me dejara sola, necesitaba recapacitar.
Termine de secarme el pelo y fui a mi cama, me puse las gafas. Pegaron en la puerta.
- Wen, ya te dije que quería estar sola- digo cuando voy a abrir la puerta.
Pero no es ella, es Roxana.
- Hola- digo sonriendo.
- ___… ¿Puedo pasar?
- Claro.
Le dejo paso, ella pasa y cierro la puerta.
- Si vienes a pedirme perdón o algo por el estilo no lo hagas, no revolvamos más el pasado.
- Si yo fuera tú… no me hablaría en la vida.
- - me rio- Ya, pero yo soy yo- sonrío.
- Y eres la mejor amiga que hay- viene y me abraza.
- ¿Venias a decirme algo más?- le pregunto cuando deja de abrazarme.
- ¡Sí!- dice sonriendo.
- ¿El qué?
- Me han dicho que mañana los chicos han hecho una fiesta y nos han invitado a todas las chicas… Por si quieres venir conmigo.
- Es que no soy muy de fiestas.
- Por favor…- me mira con cara de perrito abandonado.
La última fiesta no estuvo muy bien, pero quizás esta es mejor…
- Bueno, pero no me dejes sola- le advierto.
- Vale- sonríe y me vuelve a abrazar- ¡GRACIAS!
- De nada.