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Una cita doble y algo más.

Heather: Necesito tu ayuda.

Michelle: ¿Qué sucede?

Heather: La noticia buena es que saldrás con un chico atractivo y con empleo. La noticia mala es que... no hay nada malo. Supongo.

Michelle: Ese "supongo" no me convence, cuéntame todo... con detalles😏

Heather: Es mejor que lo sepas luego porque tal vez ni lo recuerdes.

Michelle: ¿?
Michelle: Explícate

Heather: Juro que lo explicaré luego.
Heather: Pero esto es de vida o muerte. Ayúdame por favor.
Heather: Será como una cita doble...

Michelle: Haberlo dicho antes, mujer. Pásame la dirección, ahora mismo me subo al auto.

Heather: Por eso te amo. Deja te la envío desde el GPS.
Heather: *dirección enviada*

Michelle: Estoy ahí en 10;)

***

—¿Qué diablos, Heather? —habla en voz alta.

—Shh baja la voz, te escucharán. Además, estás llamando la atención.

—¡Pues que me escuchen! –grita esta vez haciéndome agachar la cabeza cuando un señor nos mira furioso—. ¿Por qué no me dijiste que uno de esos idiotas es el que empezó una pelea en el bar?

—Oye, tú viniste aceptando mi falta de explicaciones.

—Pudiste haber mencionado ese importante detalle, ¿no lo crees? —Noto un tic bastante gracioso en el ojo derecho de mi amiga que nunca había visto, realmente está furiosa.

Comienzo a reírme, lo que la hace enfurecer más.

—¿De que te ri...

—Chicas, ¿todo bien? —pregunta Aarón, quien apareció a nuestro lado inesperadamente.

—¡No! ¡Todo mal! ¡Todo está terriblemente mal! —Ok, eso ya es demasiado.

—Michelle —Tomo aire intentando tener paciencia—. Contrólate, ¿quieres? No es para tanto. Le gustaste a dos chicos que, casualmente estando en un bar –digo irónica– estaban pasados de copas y que querían bailar contigo, y a pesar de tu rechazo, el alcohol provocó la adrenalina que los hizo comenzar una pelea. Peeroo, así es amiga, hay un pero. Deberías sentirte alagada después de todo, pues debes admitir que este chico no está nada mal, y le gustaste tanto que me ha estado colmando la paciencia tratando de saber todo acerca de ti. Incluso aunque suene como un intenso acosador.

Mi amiga solo me mira, se ve pensativa, ¿será que lo está considerando? Si es así, le doy gracias a Dios. No hice enojar a un señor mayor por nada, junto con todos los demás presentes, incluyendo a Aarón. El cual aún espera por nosotros paciente.

Enamorarte Otra Vez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora