Prólogo: Una Fría Noche De Invierno En Junio

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Gastón estaba listo para jalar el gatillo, sabía que un disparo más y la bestia estaría muerta, y así el podría ser feliz con Bella por siempre y para siempre, nadie ni nadie podría impedirlo, pero en el último segundo escuchó una voz a unos cuantos metros detrás de él.

—¡Gastón no lo hagas!— gritó angustiado —¿Lefou?— susurró para si mismo, seguidamente volteó para confirmar que era él —por favor no lo hagas— dijo Lefou mientras se acercaba a Gastón. Lefou fue acercándose a Gastón, mientras esté lo miraba fijo.

—Alejaté Lefou, tengo que hacer esto, si no lo hago perderé a la única persona que he amado— advirtió con seriedad

—¡Crees que sí matas a la bestia Bella mágicamente te va a querer, despierta Gastón, las cosas no son así, así no funciona el amor!— respondió con enojo —¡ja!, y dime...— hizo una pausa —¿tú qué sabes sobre el amor?—

—Más de lo que piensas— contestó, se acercó a Gastón y lo miro a directo a los ojos — Gastón... por favor, no tiene por que ser así— dijo despacio y con dulzura.

Por un breve momento ambos se miraron fijo a la cara, sin embargo Gastón estaba cegado por la ira, así que empujó a Lefou lo suficiente para dejarlo fuera del puente. Se giro y con rapidez dio un último disparo a la bestia justo en la espalda y vio como está caía rendida —¡no!-— dijo Bella al borde del llanto

Gastón no entendía lo que estaba viendo, se suponía que Bella debía quererlo a él, no a la bestia, ¿quién podría amar a una bestia?

El suelo se quebraba cada vez más y mas, hasta que ya no aguantó más.

—¡Gastón!— la cara de Lefou le hizo sentir como sí alguien le hubiera golpeado en el pecho con fuerza, y su voz gritando su nombre fue lo último que escucho antes de caer.

No tiene por que ser así ...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora