De camino a casa, Stanley empezó a experimentar los terribles efectos del alcohol, se sentía mareado, además de tener una ligera náusea, sin embargo, estaba feliz, se le había declarado a Lefou con un beso, algo que había anelado con tanta anterioridad y deseo.
Pero a la vez, sentía algo más, estaba avergonzado de igual manera, pues sí, había hecho todo eso que su corazón pedía a gritos hace tiempo, pero lo había hecho ebrio.
Lo que en realidad sentía Stanley en ese momento era algo agridulce, que al llegar a su casa lo atormentó incluso ya en su cama, poco a poco el sentimiento se tornó más y más agrio.
Esa noche Stanley durmió con una gran inquietud, decepción y vergüenza.
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No tiene por que ser así ...
FanfictionUna fría noche de invierno es hoy, el capitán y la bestia se enfrentan a muerte por el amor de la bella, mientras que el fiel compañero del capitán teme lo peor para el final, este le dice que pare, que las cosas no tienen por que ser así, pero el c...
