Lazos de Sangre

El Demonio, amigo de todos

Narra Sam:

Fuimos a Syltois, un lugar lleno de humanos. Donde deberíamos disimular nuestra verdadera naturaleza. Cogió un paraguas negro, se cubrió con una chaqueta y se puso unas gafas de sol, para pasear durante el día, y yo me puse una camiseta para no llamar tanto la atención.Realmente no sé lo que quiere hacer Elisabetht en este pueblo, yo solo la seguía, como los últimos 200 años. Prácticamente viajamos por todo el mundo y hemos visto demasiadas cosas, de las cueles ojalá pudiera olvidar. Epidemias, guerras, más muertos... Ser casi inmortal tiene su lado malo, como todo.

Fuimos hasta un instituto, y cuando entramos ella cerró el paraguas y se quitó las gafas.

-¿Qué hacemos aquí?

-Hay alguien aquí al que quiero ver. -Notaba que me miraban y cuando me giré vi a todas las chicas del pasillo mirándome y hablando muy bien de mí.

Giramos la esquina y de repente algo se chocó contra mí y me caí al suelo.Cuando abrí los ojos vi a un chico rubio encima de mí, y cuando noté su olor me sobresalté al ver que no era un humano, sino un...

-¡Quítate de encima de mí, maldito gato!

-¿Eh?Que daño... -Cuando él abrió los ojos y me miró dio un salto hacia atrás. -¡Un perro! -Salió corriendo y yo gruñí enfadado.

-Síguelo Sam.

-¿Qué?No pienso seguir a un odioso felino.

-He dicho que lo sigas, ¿o estás contradiciendo las órdenes de tu ama?

-Tsk...está bien. -Corrí detrás de él, aunque no tenía ganas de buscara un gato. ¿Y qué rayos hacía aquí un gato?

Narra Rudy:

¿Porqué hay aquí un perro? Ahh...¡William dónde estás! Me fui de allí enseguida y cuando llegué a otro pasillo, de repente alguien me agarró de la camiseta y al mirar hacia atrás vi a ese chico de cabello negro que había visto esta mañana.

-¿Adónde vas tan deprisa gatito?

-¿Quién eres? No hueles como los demás...¿Y cómo sabes que yo...?

-Simplemente lo sé, ¿y bien, me vas a decir de qué estabas huyendo, o tengo que hacerte hablar? -Dijo con una sonrisa bastante siniestra.

-De un perro...

-¿Un perro? -De repente él apareció allí, muy enfadado.

-Por fin te encuentro.

Narra Demian:

-¡Ahh,ayuda! -Se puso detrás de mí muy asustado y ese tipo se acercó.

-Prefiero los gatos a un perro como tú. ¿También quieres que te ayude a buscar a tu dueño o qué?

-Apártate de en medio.

-El gato está conmigo, y amigo...no me gusta que me hagan enfadar. -Mis dientes se volvieron afilados y mis rojos se tiñeron del mismo color que la sangre.

-¿Qué eres tú?

-Tu peor pesadilla si no te alejas de él. -De repente alguien me golpeó el brazo y cuando miré a mi derecha vi a Clarise muy enfadada a mi lado.

-Idiota,tenemos clase de Historia y vamos a llegar tarde como sigas perdiendo tiempo. ¿Eh y tú quién eres? -Dijo con tono de pocos amigos.

-Preciosa,no deberías meterte en medio.

-¿A quién llamas preciosa, idiota descerebrado? -Sam se sorprendió al escucharla. -¿El rubio también es amigo tuyo?

-¡Rudy!-Apareció William allí también y agarró a Rudy. -¿Por qué sales corriendo como si nada? ¿Primero lo del gimnasio y ahora esto? Hoy ya he tenido suficiente contigo.