32. Reseteando

2.3K 274 124
                                    

Sentí que iba colapsar... No, espera... Colapsé después de ese momento. ¿Por que? Osea, no podía haber un maldito momento peor para un beso... Mis neuronas están totalmente muertas después de eso y se supone que debía consolarlo... Si, estaba yo bien para pensar...

Puré de Patatas... Karaage (gracias abuela sakura)... Onigiris... Salchichas con forma de pulpo...

Trato de concentrarme en el trabajo laborioso que implicaba poner las cosas en la mesa, un trabajo que requería toda mi concentración, un esfuerzo titánico donde los hubiera

-Yuu...

Si esto fuera un dibujo animado mi cuerpo hubiera sido impulsado hacia el sol y hubiera muerto calcinado a los 500° de este por el maldito susto que ese gigante me había dado, pero como esto no eran dibujos animados, solo solté el grito mas indigno que tenia en mi registro y un pequeño saltito acompañando este a la denigración mas absoluta

-Perdón, no quería asustarte

-No pasa nada, estaba distraído poniendo la mesa, no me acordaba para nada de que estabas aquí jeje-mientes muy mal Nishinoya..  Empieza a asumirlo...-¿comemos?

-Si, claro... No me había dado cuenta de cuanta hambre tenía-se sentó al otro lado de la mesa con su sonrisa suave de siempre y tomo los palillos- Itadakimasu

-----+++++-----

No pasamos mucho mas rato en el cementerio, quizá sonara a tontería ero sentía como si contar todo lo que había pasado hiciera que lo que sentía fuera menos pesado, seguía sintiéndome mal por todo lo que había sucedido antes de que mi padre muriera, pero eso no cambiaría Jamas, jamas  me libraría de ese sentimiento, la diferencia estaba en que por primera vez le había dicho a alguien como me sentía, le había contado a alguien lo que llevaba todo ese tiempo guardando y lo que parecía que no pesaba y que solo era un adorno mas de mi, en realidad pesaba mil kilos y me estaba hundiendo mas que cualquier otra cosa.

Pero ahora estaba libre de parte de esa carga, por primera vez sentía que a pesar de toso mi comportamiento no es tan deleznable Como podría creer en un principio y dios... Que bien se sentía el pensar que oye, eres medio normal.

A pesar de las negativas de Yuu acabamos yendo a su casa, quería que su cuarto volviera a ser como era al principio, no, quería que la habitación fuera mejor. Si yo era incapaz de borrar de mi mente la imagen que había visto en ese cuarto unos meses atrás no quería ni imaginar lo que seria ser yo el que estuvo encerrado ahí y aun encima tener que volver y dormir cada noche en el lugar donde tanto había sufrido durante semanas.

Así que si, vamos a coger y a crear la habitación perfecta para Nishinoya Yuu.

------------++++++++----------

Y eso hicimos

  Antes de irnos a mi casa habíamos parado en una tienda de decoración y en una de fotos para comprar cosas que hicieran desaparecer el horror que mi madre había pintado en las blancas paredes de mi pequeño refugio personal. Compramos una galaxia para sustituir ese horror y sustituimos con fotos los malos recuerdos.  

Pasaron horas y horas y el tiempo quedo pintado del color de nuestras risas mientras el aire quedaba teñido de galaxias de mil colores. La habitación a cada segundo quedaba pintada de alegría, de momentos de felicidad a su lado.  Cada segundo tiño ese día triste de un nuevo color tan radiante y melodioso que sería incapaz de describir con simples palabras ni intentandolo con todas mis ganas.

El cuarto empezó a tomar forma poco a poco.

Y el tiempo desapareció, sin saber como nos habíamos dormido, sin mas, riendonos, agotados de todo el trabajo de decoración que habíamos tenido en ese día. Nos dormimos en un cuarto con olor a pintura y felicidad. Nos dormidos cansados, felices y olvidando todo lo que a lo largo de ese día y de los anteriores no había preocupado creando de nuevo el refugio. 

¡Yo te cubro! *AsaNoya*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora