– Y sí, ese hombre se atrevió a dejarme después de todo lo que le dí, ¿puedes creerlo, Lei? Hey, ¿estás aquí?
– S-sí, ¿pasa algo?
– ¿En qué planeta estabas, Leila? Llevo hablándote desde hace media hora y tú no haces más que mirar la ventana.
– Perdón, Sheila. Sólo que...
– ¿En quién piensas?
– En nadie, ¿por qué lo pre...?
– Te conozco, Leila. Tan sólo espero no se trate sobre James esta vez.
Tengo que admitir que sólo ella me conoce tan bien. James Adams fue mi primer novio – si es que acaso puede llamarse así a tener a un "novio" tan joven – y ya habían pasado casi dos años desde que nos habíamos separado. Intenté seguir adelante, y en el camino conocí a un chico llamado Ethan Thompson – típico norteamericano de ojos verdes y cabellos rubios – el cual, a pesar de ser tan maravilloso y atento, no pude soportar el hecho de no sentir tanto como él; por lo que opté por acabar con aquella mentira antes de crear una falsa esperanza que terminara por destruirlo.
– No, pensaba en lo que me dijo Gale sobre Allan esta mañana.
– ¡Sí! ¿No crees que su relación es tóxica? Algún día terminarán por dejarse...
– Probablemente. ¿Nos vamos?
– Esta bien.
...
– Por fin, ¿iremos al cine esta semana?
Meghan estaba apoyada sobre el marco de la puerta de entrada de su habitación, mirándonos a todos – esperando por una respuesta –.
– Tenemos muchas cosas por hacer, Meghan – respondí –.
– La vida es corta, querida – dijo Rachell –.
Rachell siempre ha sido la motivadora del grupo; generalmente, es ella que da las ideas para los mejores planes.
– Entonces, ¿vamos? – pregunta Georgia –.
– Por mi no hay problema – contesta Evan –.
– Tengan por seguro que yo iré – agrega Austin –.
– Vamos, Leila – suplica Sophie -.
Justamente cuando estaba a punto de replicarle a Sophie, suena mi teléfono. Era un número desconocido.
– Hola, ¿con quién desea hablar?
– Con Leila Paxton, por favor.
– Habla ella, ¿quién eres?
– Gaston Shepard. Y antes de que me cuelgues, Santiago me dio tu número de teléfono.
Me había leído la mente – o al menos, la intención en sí – por lo que quedé realmente intrigada.
– ¿Puedo verte esta tarde?
– ¿Qué te hace pensar que diré que sí?
– Al menos lo intenté.
– Esta bien, tan sólo por esta vez.
– ¿Bassinger's es perfecto para ti?
– Sí.
– Entonces te veo allá a las 2.
Cuando colgó, sentí una punzada – y me pregunté en mi interior – ¿quién es este hombre?
– Claro, a nosotros nos das excusas y a él le dices que sí, ¿quién eres y que hiciste con Leila Paxton? – dice Sophie –.
– Ni siquiera sé por qué acepté, realmente.
– Te encanta fastidiarte la existencia, Leila – agrega Rachell –.
– La vida es corta, querida – le replico burlonamente –.
– ¡Oye! – responde Rachell –.
Mientras todos nos reíamos de aquella broma, tomé mi teléfono y salí rumbo hacia mi casa, pensando en el motivo que habría provocado que aquél chico me invitara a salir.
...
Eran pasadas las 2 de la tarde, cuando estaba sentada en una mesa hacia el fondo de la derecha – bastante cerca de la entrada – en la Cafetería Bassinger's.
– ¿Cuándo será que va a venir? Ni que tuviera la vida entera para esperarlo – susurré para mis adentros -.
– Disculpa la tardanza, Leila; se me presentó un inconveniente.
Y me encuentro con un chico alto de cabellos oscuros que me mira fijamente – haciéndome intimidar –.
– No hay ningún problema, Gaston.
– ¿Qué quieres ordenar?
– Tan sólo un café, gracias.
– Esta bien, ya regreso.
Mientras miro como se aleja lentamente hacia el mostrador, me pregunto nuevamente: ¿Quién eres tú, Gaston?
YOU ARE READING
La vida aparentemente ordinaria de Leila Paxton
Fiksi UmumLeila Ann Paxton es una joven de 21 años recién graduada de Ingeniería Civil en la Universidad de Cooper en Mississippi, Estados Unidos. Es la hija menor de dos hermanos, siendo el mayor autista. Sus padres, Macy Vincent y Louis Paxton, la han prepa...