Capítulo 29

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N/A: Aqui un capítulo más. Esto que pasa en este capítulo no lo tenía para nada planeado...No entraba en lo que quería escribir...Pero a veces a medida que vas escribiendo la historia cambia y este ha sido uno de los casos. Espero igualmente, que os guste y que por favor, me lo hagais saber, al igual que si no os gusta (Que en el anterior ya hubo casos) Gracias!

N/E: ⛅⛅⛅⛅⚡⛅🌞🌞🌞🌞🌞😘💙😎
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Sintió una punzada en la sien. La luz blanca le cegó a entreabrir los ojos con bastante esfuerzo. Se removió. No era capaz de enfocar, de comprender donde demonios se encontraba. Todo a su alrededor era silencio.

¿Estaba muerto?

¿Eso era la antesala al paraíso?

Gimió adolorido y comprendió que si estuviera muerto no sentiría dolor. No en su baja espalda. No en todo su cuerpo. Y mucho menos en su corazón. No literalmente, por supuesto.

Abrió los ojos completamente angustiado cuando todas las imágenes se agolparon en su cabeza haciéndole comprender lo que había sucedido. El dolor en su cuerpo se hizo más patente.

-Kate…-susurró casi sin voz. Apenas recordaba. ¿No hubiera sido irónico si hubiera perdido su memoria con el golpe? Pero no. Lamentablemente para él recordaba todo.

Recordaba como Meredith había aparecido.

Y su madre también.

Y recordaba como Caroline también estaba allí humillando a todo ser viviente que estuviera alrededor suyo. Humillándole a él.

Bloqueándole.

Haciéndole quedar mal.

Pareciendo patético.

Ese era el poder que Caroline Harper tenía sobre él.

-Kate…-miró a su alrededor buscándola desesperado.

Hubiera sido magnifico que todo fuera una pesadilla. Que aquello no hubiera ocurrido. Que siguiera durmiendo a ser posible acompañado de su novia.

Hubiera sido perfecto que fuera una pesadilla y despertar en ese momento. Sin el temor a perder a la detective. Sin el dolor en su…

Cerró los ojos sintiendo de nuevo el dolor punzante atravesar su cabeza cuando recordó el coche golpeándole. El cayendo al suelo. Abrir los ojos y encontrarse con Kate preocupada… Kate…

Kate… y él en la ambulancia.

Él medio grogui.

Él en esa camilla.

-¿KATE?-se irguió de nuevo, rápido, de un solo movimiento, brusco. Gritó tanto ante el gesto que su grito debió ser escuchado hasta la otra punta de la ciudad.

De pronto se sintió mareado, pero Kate estaba allí. Se había levantado del sillón que ocupaba a su lado y se había acercado haciéndole recostarse.

-Eh… Estoy aquí-acarició su frente.

Rick se concentró en tratar de no moverse, de paralizar el dolor, se enfocó en esos preciosos ojos que la miraban con una mezcla de alivio y preocupación a la vez que con cariño.

-¿Qué…Que pasado? ¿Qué me he roto? Me duele todo…

Kate hizo una mueca tratando de no reír y acarició su mejilla.

-¿Kate?

-Tranquilízate-murmuró bajito.

-Kate no me puedes dejar… No puedes abandonar-dijo serio-.

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