Pasillos.

386 19 6
                                    

Estoy boquiabierta. ¡¿Cómo que inmortalidad vampírica?! Madre mía ahora todo cuadra, llevo desde que me he despertado hoy con ganas de algo pero no sabía que. Pensaba que era por todo lo nuevo pero no. Soy un vampiro.

Si hubiera sido humana me hubiera quedado pálida. Mas de lo que ya era.

-¿Co...cómo que vampírica?-Me tiembla la voz del miedo.

-Por el amor se Dios Xerzinn, ¡cállate!-Le grita Sathrag a la dulce chica.

-Lo... Lo siento Sathrag.-Habla ella con un tono dulce como siempre, pero esta vez no es alegre sino un tono se arrepentimiento. Me pregunto si cuando se enfada le saldrá esa voz tan dulce.

-Jackie, te lo íbamos a decir esta noche con más tacto. Si no bebías algo de sangre serías capaz de matar a alguien. Tuvieron que convertirte para salvarte no podemos esperar otros 16 años, ahora somos todas jóvenes y podemos recobrar lo que perdimos, nuestra raza.

-Pero si los vampiros nos asesinaron, ¿que hacemos con ellos?-Pregunto yo intentando no pensar mucho en lo se ser vampiro, aún estoy asimilando lo de ser sirena y me dicen esto.

-Es una larga historia-Confiesa Sathrag. Mi ira asciende por todo el cuerpo hasta que no puedo controlarla.

-¡ESTOY HARTA DE NO SABER NADA! TODO ESTO ES NUEVO PARA MI Y NADIE ME QUIERE CONTAR NADA, MEREZCO SABERLO, TODO SE ME A OCULTADO SIN SABER CUAL ES MI NATURALEZA. ¡QUIERO SABERLO TODO!

-Está bien cálmate Jackie,-Dice suavemente Sathrag acercandose a mi, te lo contaré, pero antes bebete esto; te hará relajarte esto.

Sin pensármelo dos veces tomo la copa color cobre con adornos que podrían ser tranquilamente piedras preciosas y bebo su contenido. Un líquido azul intenso pasa por mi garganta.

Lo último que recuerdo es la voz de Sathrag:

-No tenemos opción; no se tiene que enterar de toda la verdad hasta que no llegue el momento.

- - - - - - - -
Me despierto en la cama del castillo con James a mi lado; no recuerdo nada de anoche desde que bajé a cenar, ni siquiera el principio de esta.

Vuelvo a mirar a mi pecho y acaricio el collar de Rose, ojalá no la haya pasado nada malo; debería volver a mi casa, e intentar buscarla. Pero se que aunque lo intentara tampoco llegaría muy lejos, no se ni cómo salir de este estúpido castillo.

Giro mi cabeza para poder observar con detenimiento a James. Tiene su precioso pelo apoyado en las sábanas que recubren la almohada. Bajo mis ojos y pude apreciar que está desnudo de cintura para arriba. Fijándome un poco más puedo observar unas líneas permanentes pintadas sobre su piel en la zona del costillar derecho las cuales forman un dibujo que no puedo observar muy bien.

Para mi asombro antes de que pueda averiguar qué tatuaje era, James se despierta y se lanza a mis brazos.

-Buenos días pequeña.-dice esbozando una sonrisa.

-Hola. Te va a sonar raro, pero no recuerdo nada de lo que pasó anoche.

Se le cambia la cara, como si hubiera visto a un fantasma una oscura noche de invierno.

-Verás... Te pasaste con la bebida. Con un simple trago ya no sabías ni tu nombre; es una cosa normal, a todos la primera vez nos pasa ha que los alcoholes que preparan las sirenas son demasiado fuertes.

-Oh... vaya, lo siento...

-No te preocupes.-Hace una pausa mientras acaricia mis marcados pómulos.-¿Te apetece una clase de cómo ser una sirena?-Dice entre risas.

-Genial.-Sonrío.

- - - - - - - - -
Termino de prepararme antes que James y esto me ofrece tiempo libre para dar una vuelta por los jardines del castillo.

Se puede sentir el aroma a hierba recién cortada; cómo cada partícula de aire fresco se mete dentro de mis orificios nasales y me hace percibir la pureza de este.

De pronto una risa de niño pequeño se mete en mi cabeza, es como si la estuviera oyendo en ese mismo instante. Un sonido agradable e inocente; pero me preocupa ya que no se la procedencia de este.

Me giro en todas las direcciones en busca de algo que me lo pueda explicar, pero nada, ahí sólo están las personas que viven en el castillo.

En mi camino de vuelta subo y bajo peldaños de piedra. Acabo perdiéndome, nunca se me ha dado bien la orientación. Voy atravesando pasillos cubiertos con alfombras que desprenden cierto olor a viejo y a polvo. Las paredes están recubiertas de cuadros de personas que devieron vivir aquí hace muchos años.

Me paro a mirar uno en concreto; aparece un hombre rodeado de varias mujeres, el cual lleva atado a su cuello un colgante con forma de una estrella de siete puntas hecho de alguna gema preciosa de color verde. Es igual que el de Rose.

Oí hablar a mi mejor amiga de que ese collar se había transmitido de generación en generación por su familia, pero nunca hubiera llegado a imaginar que fuera tan antiguo; y mucho menos que apareciera plasmado en ese cuadro.

En cuanto a los que aparecen en el cuadro; llevan ropas del siglo XV y por lo que parece todos sabían leer ya que tienen un libro o varios en sus manos.

Me fijo más concretamente en el chico; me recuerda a alguien pero no se exactamente a quien. Pero la que en verdad me preocupa es la mujer que está más próxima a él ya que se parece a mi.

Cuando me doy la vuelta me encuentro con Xerzinn; esa adorable niña de precioso pelo.

-Jackie, ¿qué haces aquí?-Me pregunta con voz dulce esbozando una sonrisa.

-Nada, me había perdido; menos mal que me has encontrado, pequeña.

-Sathrag me ha pedido que te busque porque James está preocupado por ti.-Hace una pausa.-Llevas horas desaparecida, Jackie.

-Oh, lo siento, es que pierdo la noción del tiempo.

- - - - - - - - - -
-Las sirenas somos criaturas mágicas, inteligentes y con una voz armoniosa. Somos capaces de leer los pensamientos de los mortales y de hacer magia; claro que, no de la misma manera de las brujas, sino que más limitada y de otra manera.-Sathrag prosigue con su clase de "sirenismo".

-Siento interrumpir esto; y se que es interesante, pero podrías explicarme qué tiene que ver Rose con todo esto? ¿Y su novio?-Hago una pausa ya que me mira como di me estuviera preguntando a que me refiero.-Quiero decir, que por qué él se ha comportado de una manera tan extraña conmigo y ella ja desaparecido supuestamente a manos de él.

-Oh, eso es muy sencillo:Max es un demonio y Rose una humana que posee una cosa importante para este.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 06, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Entre Sirenas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora