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Un pequeño pitido sonaba en toda la habitación, pero fue aumentando a medida que Megan iba reaccionando. Abrió sus ojos y miro el techo, su pecho empezó a subir y bajar con frenesí, sus ojos se llenaron de lagrimas y empezó a moverse.
Mason estaba en un sofá al frente de ella, estaba en un pequeño ensoñamiento pensando en el diagnostico que le habia dado el medico, Megan esta deshidratada, habia perdido 3 kilos de peso y se veia palida, el bebé aparentemente estaba bien, el disparo le habia impactado en su hombro izquierdo pero no le habia hecho tanto daño ya que el impacto habia perdido fuerza con Kris. Megan y su hijo estaban a salvo, sintió que su vida se iba cuando la vio en el suelo con sangre, no se dio cuenta del estado de su madre ni que su desaparecido hermano Zasha estaba ahí, solo le importo ella.
El creciente pitido llamó su atencion, miro a Megan que se movia cada vez más, llegó a ella, empezó a retorcerse lastimando su hombro.
-Megan, estás bien. --Puso sus manos en la cabeza de Megan. --Princesa, calmate.
-¡¡Dejame!! ¡¡Dejame!! --Megan se seguia retorciendo provocando que su hombro sangrara.
Mason gritó llamando al medico, le dolió ver a su esposa asi, no queriendo que él la tocara y lo queria lejos. El medico Bennet llegó haciendo salir a Mason a la fuerza con ayuda de Ethan de la habitacion.
-¡Dios mio! Mi mujer y mi hijo. --susurro agarrandose la cabeza.
-Descuida, Mason, solo fue el primer impulso. --Ethan le tocó el hombro.
-No quiso que la tocara, debe pensar que esto le paso por estar conmigo, me odia. --hablo sin mostrar su cara.
-Señor Mason. --el medico le habló. --Su esposa ya esta mejor, la tuvimos que sedar y cambiarle la venda, puede entrar a verla, dentro de unos minutos se dormira. --el medico dio media vuelta y se fue.
Mason se paro, limpio la lagrima que habia derramado y avanzó hasta la puerta, a traves del espejo la vio mirando a los lados, estaba mas calmada, abrio la puerta llamando la atencion de ella, la miro prevenido pero al ver que Megan solo lo miraba avanzo.
-Cariño. --
-Mason. --
Avanzó hasta llegar a ella, le besó la frente y le acaricio su mejilla.
-Tienes los ojos rojos. --Megan habló, le tocó la mejillas a Mason, sintió la barba que tenía. --¿Hueles eso? --Megan olfateo el aire. --Canela.
Se levanto de la cama apartando a Mason, bajó de la cama y corrió al baño, por suerte no tenía nada cometido ya; abrió el retrete y vomitó, casi no tenía nada en su estómago pero aún así siguió. Bajo la tapa del retrete y miro a la puerta, Mason fue a ella y le acarició la espalda.
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Los Hermanos Kozlov. ||Terminada|| SIN EDITAR ||
Novela JuvenilLa vida de las tres amigas: Megan, Isabella y Lissa cambia por completo cuando en una de las tantas subastas, en la academia que han sido educadas, son compradas por tres hombres ancianos. Al despertar, se dan cuenta que han sido compradas por los h...