"No puedo"
Jai
*Continuación del mini Flashback*
No podía permitir más esto, -no era el mayor de mis hermanos, de hecho era el mas pequeño pero eso no me detuvo. Me armé de valor y me separé del lazo de brazos que yo y mis hermanos habíamos creado y me dirijí a donde mis padres.
Agarré lo primero que mis ojos pensaron que sería una buena arma -un florero-. Sin pensarlo dos veces lo estrellé contra la cabeza del hijo de p**a . Rápidamente sus ojos se posaron en mis manos. Los sollozos se acabaron, ahora reinaba el silencio.
- Tú. . .-en sus ojos se podía ver toda la furia acumulada, - Niño, tu no acabas de hacer eso, nosabes lo que te espera-. Su voz era gruesa y seria.
Tragué gorde y conteniendome dije: - Oh sí, yo. . . -no pude terminar. Su mano, sin previo aviso ya había dejado marca en mi mejilla.
- A tu padre. . .
- ¡No, tú no tienes derecho de llamarte mi padre! Perdiste ese título hace años-grité al borde del llanto.
¿De dónde había salido tanto valor?
- ¡A mí me respetas! Eh niño, tú... Tú nunca debiste de haber nacido para empezar, fuiste un error -dijo seguido de un puñetazo en mi abdomen. Después otro, y otro. Parecía su saco de box. Yo no eh hecho nada malo; solo tengo 7 años y mi vida ya parece telenovela.
- DÉJALO, POR EL AMOR DE DIOS PETER -gritó la madre de Jai, -Ginna. Su voz salió de sus labios como un mar de lágrimas, combinado con desesperación y dolor, mucho dolor.
- ¿ Y tú que? PERRA, no te bastaron esos golpes. ¡No aprendiste que, a tú hombre se le respeta! -dijo Peter. Caminó lentamente hacia Ginna. En cada paso que daba, se podía notar la furia con la que, dirigiéndose a mi madre, miraba con ojos de superioridad. Sus manos rápidamente se convirtieron en puños y sus nudillos, a blancos.
- Sabes, fue un error casarme con una perra. Fue el más grande error que...- su mirada estaba perdida en el suelo. No lo dejo terminar. Mi madre le había dejado marcado, muy fuerte su mejilla.
Su rostro se volvió hacía la derecha, hizo una mueca molestoy le gritó: - ¡AHORA VERÁS, ERES UNA BUENA PARA NADA, OFRECIDA SUCIA! -dijo Peter enojado, perdiendo los estribos. Aunque hace mucho sé que el Peter golpéa a mi madre, nunca lo había lo había visto tan enfurecido, escupía las palabras con sangre, como si le causára placer golpear y hacer sentir mal a las personas.
Ginna respiró varias veces pesadamente, no era fácil no discutir y calamrte teniendo enfrente a este borracho asqueroso,- Sabes, te eh tenido miedo por mas de 13 años pero sabes que, ya no más, eres un poco hombre. . . Me das ASCO, no tienes derecho de gritare así ¡NO SE TE OCURRA VOLVER A PONERLE UN DEDO ENCIMA A MIS HIJOS PORQUÉ, TE JURO PETER; TE JURO QUE AQUÍ DONDE DIOS MISMO ME ESTABA VIENDO Y ESCUCHANDO, TE PROMÉTO QUE TE MATO -. Era la primera vez que veía a mi madre tan decida en algo. Estoy orgulloso de ella, no cualquiera le habla así a Peter, mucho menos, nadie le había puesto en su lugar.
- Ya no más -sonrío. Sus ojos seguían llorosos pero aún así, se veían fuerte-. Así que, haznos un favor a mi y a tus supuestos hijos pero, principalmente, hazlo por ti. . . Quiero que te largues de mi vida y no te atrevas- pauso. Su voz se acabo y se convirtió en un sollozo, - No te atrevas a volver, porque cumpliré lo que dije.
Ella señalo la puerta principal con su dedo índice.
- No te atrevas a llevarte algo porqué, todo lo que tienes es...-su voz se entrecorto-, es gracias a mi.