Tres

92 5 0
                                    

No suelo ser de esas que piden cola en la fila pero como una amiga del colegio estaba en la parte de en frente y la fila del bus estaba demasiado larga, decidí pedirle cola y ella me dejo ponerme detrás de ella ganándome un par de miradas fulminan...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No suelo ser de esas que piden cola en la fila pero como una amiga del colegio estaba en la parte de en frente y la fila del bus estaba demasiado larga, decidí pedirle cola y ella me dejo ponerme detrás de ella ganándome un par de miradas fulminantes por las personas de atrás. ¡Jodanse! Hoy si me importa llegar temprano al colegio así que no me importa si están enojados o no.

Yo sé que usualmente él llega hacia mi amiga del colegio a hacer lo mismo que hice yo hoy. Por lo que me sorprendo realmente al ver que él la ha visto y ha pasado de largo. Mi amiga me ha señalado lo mismo, sorprendida igual que yo. No puedo evitar que una punzada de ira y de dolor llegue a mi cuerpo. Yo me puse aquí sabiendo que él pide cola casi todos los días y hoy ha visto que estoy detrás de mi amiga y ha huido de mí como si yo fuese la peste.

Pues ¿sabes qué? Púdrete. Dije mentalmente. Si él quiere hacer papel de ridículo, pues adelante. La que va a tener que aguantar semejante fila no voy a ser yo. Con ese pensamiento malvado, subo con mi frente en alto y una sonrisa al bus. Para mi satisfacción, el se queda atrás y tiene que esperar a que aparezca el otro bus que está metido en el atasco. Rio malvadamente. Nadie lo mandó a estar de ridículo.

El chico de la parada del autobús ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora