Pasado el suceso de Raccoon city alice decide salir de la ciudad en busca de sobrevivientes en las ciudades de los alrededores, viajando así durante días hasta encontrar alguno.
Era cerca de medio día, había un sol intenso, Alice montaba su motocicleta en dirección al norte, cruzaba una densa tormenta de arena, cuando de pronto cayo de ella rodando varias veces debido a la velocidad que iba, golpeando su rostro en el pavimento y quedando inconsciente...
***
-¿Estará bien? -susurraban
-Si, el golpe fue fuerte pero estará bien
Alice escuchaba los susurros mientras recobraba el sentido poco a poco sobresaltando de la camilla donde estaba, con una ceja y labio roto.
-¿¡Quienes son!? -decía esto mientras sacaba el arma de su cinturón, asustada y alerta, apuntando en dirección de una chica...
-Ya desper... -Claire interrumpio su frase al entrar al pequeño cuarto y ver como la mujer a la que acababan de salvar apuntaba a una joven que venia con ellos y que formaba parte de los sobrevivientes -¡Baja el arma! -decía mientras apuntaba a Alice justo en la cabeza
-¿Quienes son ustedes y que hago aquí? -preguntó algo molesta por no saber que había sucedido
-Somos un grupo de refugiados y acabamos de salvar tu vida, asi que sera mejor bajar el arma -Claire estaba comenzando a enfadarse porque aquella mujer no le quitaba el arma de encima de aquella chica
La amenazante Alice tomó un respiro y observó atenta, se dio cuenta que aquellas personas eran inofensivas, y en señal de rendición alzo ambas manos lentamente y guardo su arma a la misma velocidad
-Yo solo... Creí estar en peligro, eso es todo... -se disculpaba
-Bien, porque no queremos tener problemas -Claire tenia un tono y semblante serio ante aquella mujer
-Fue mi culpa, lo siento, me llamo Alice
-Claire. Ellos son K-mart y Otto
-Hola -dijo asintiendo con la cabeza, miraba la habitación preguntandose cómo había llegado hasta ahí, pues aun no le habían dado respuesta a ello
-Caíste de tu motocicleta -comenzó diciendo Claire -y te golpeaste contra el pavimento, supongo que no veías nada en la tormenta, chochaste contra un cuerpo que estaba a mitad del camino
-¿Ustedes eran parte de umbrella? - preguntó curiosa
-Nooo, nunca podríamos ser como esos hijos de perra -mencionó K-mart con desprecio...
Después de esta pequeña conversación y estando mas tranquilos salieron de la habitación para enseñarle el lugar donde estaban, Alice tenia un aire misterioso que robaba las miradas de todos. Los susurros no eran de esperarse ¿quién es?¿cómo pudo sobrevivir sola?¿Es parte de umbrella? Mientras, Alice prestaba toda su atención a cada palabra que salia de la boca de Claire, pues además de ser la líder del convoy era muy atractiva, de ojos azules, piel bronceada, ligeramente delgada por la escasez de alimento y cabello color caoba, a decir verdad había algo en esa chica que le resultaba intrigante.
Se encontraban descansando en un motel vacío que estaba en medio de la nada, como de costumbre alguien debía estar alerta toda la noche, hoy era el turno de ella así que estaba preparada para pasar la noche viendo las estrellas desde el techo del motel, algo que hace mucho no hacía
-Es mi turno - dijo la pelirroja
-Descansa, ire yo. Ayer hiciste demasiado por todos nosotros -él se refería a que horas antes habían sido rescatados de una trampa de la corporación, una trampa que pudo haberles costado al menos 5 hombres.
-Esta bien, pero de igual forma estaré alerta por cualquier cosa - dio la vuelta para dirigirse a una habitación y descansar, como eran un número considerable de refugiados, a algunos les gustaba compartir habitación por aquellos buenos tiempos. Ella siempre dormía sola, era algo que le agradaba, así tenia tiempo de pensar y planear todo para el día siguiente.
-Dormiras conmigo -dijo cruzando a un costado de Alice pero sin dejar de caminar, ésta la siguió sin decir nada. Para la buena fortuna de todos el motel aún contaba con agua fresca, y muchas cosas seguían en su lugar, toallas, jabones, batas, sábanas, etc. Ese lugar era realmente el paraíso actualmente en comparación con otros sitios dónde habían pasado la noche, muchos de ellos tenían restos de peleas sangrientas que las criaturas habían provocado o resguardaban a una que otra.
-Aquí tienes, puedes tomar un baño si gustas -extendiendole una toalla -aunque no creo que haya agua caliente -ambas rieron ante la broma de la pelirroja. Ya había pasado mucho tiempo desde que alguna de ellas tomó un baño con agua fresca, y es que no siempre podían darse ese lujo debido a la escasa lluvia, era una prioridad cuidar el agua.
-Ve tu primero, es lo justo. Yo puedo esperar-dijo Alice
-¿Estás segura?, no tengo problema en esperar -Alice le movió la cabeza en señal de afirmación extendiendo la mano en dirección al baño -no te preocupes, no tardaré -tomó otra toalla y entró a la ducha.
Alice recorrío la habitación y miraba la oscuridad que podía verse desde la ventana, no podía creer que ahora la vida fuera así. Se alejó para mover la vela a algún lugar donde fuera más útil, poniéndola en la mesita de noche. Cuando levantó la mirada en dirección al baño pudo ver a Claire quitándose las botas y la chaqueta, dejando ver así su figura enmarcada en su camiseta ajustada, no podía alejar sus ojos mientras se sacaba los jeans empolvados y la camisa, Alice podía ver a la pelirroja desvestirse sin ningún problema, aquella se saco la ropa interior dejando así su piel al descubierto, era perfecta.
Alice sentía como algo dentro de sus pantalones iba poniéndose cada vez mas duro, y comenzaba a hacerse notorio, así que desvío bruscamente sus ojos y posó las manos cubriendo su zona excitada, era claro que aquella mujer en la ducha la ponía mal. Claire salió ya sin polvo en la cara, y secando su cabello con la toalla -Listo, la ducha es toda tuya.
Alice se encargo de cerrar la puerta por completo, no quería que la pelirroja supiera de su condición en absoluto, se ducho lo mas rápido posible. Había pasado algo de tiempo, sentada al borde de la cama, la pelirroja escucho el sonido de la puerta del baño abrirse, y posó sus ojos sobre los de Alice; quitando la tierra y el polvo de su rostro se dio cuenta de los hermosos ojos azules y piel pálida que poseía, era todo un ángel pero sin perder ese aire misterioso que ocultaba.
ESTÁS LEYENDO
Claire y Alice
FanfictionDespués de varios años de infección habitando una tierra donde el ser humano pisa el fondo de la cadena alimenticia, Claire y Alice se conocen, comenzando una carrera en contra de la Corporación Umbrella para rescatar el secreto más valioso de Isaac...