Deep Love

COLORS

Llegamos a la casa y vaya sorpresa la que nos llevamos todos.

-Hyung?!- Pregunto sorprendido Kook al verlo en la sala.

Se encontraba parado en medio del pasillo. Giró al notar nuestra presencia.

-Hoseok.- Susurre con temor.

-Donde te habías metido?- Pregunto preocupado.

Se acercó a mi pero se detuvo al bajar su vista hasta mi mano. La cual estaba aún unida a la de Kook.
La solté inmediatamente y pude notar como a Kook le sorprendió aquello.

-La hemos llevado a conocer la ciudad.- Contestó Jin por mi.
Podía jurar que su voz escondía algo que yo no conocía. Sonaba más a un reclamo.

-Me asustaste cuando no te encontré en la casa. Estaba a punto de llamar a la policía.- Continuo su camino junto al mio.

Me rodeó con sus brazos pero no pude corresponderle. Su abrazo se sentía diferente. Falso.

- Gracias chicos.- Sonrió Hoseok.

Por que agradecía? No lo se.

- No lo hicimos por ti.- Volvió a hablar Jin. Aún más serio que la anterior.

La sonrisa de Hoseok desapareció.

Hoseok me situó a su lado. Y fue ahí donde me cruce con la mirada de Kook. Estaba molesto igual que los demás.

-Vámonos.- Habló.

Quise detenerle pero Hoseok se adelantó.

-Tengan cuidado en el camino.-

No era la respuesta que yo esperaba.

-Adios.- Se despidieron los chicos de mi. Todos menos Kook, él cual fue el primero en salir.

La puerta se cerró y sólo quedábamos Hoseok y yo.

Me arme de valor y me atreví a hablar.

-A que has vendió?- Mi voz no sonó a como yo la quería. Sonó débil, como siempre.

- Es mi casa.- Sonrió. -Aparte Kookie tenía razón, hace mucho que no venía a mi casa.- Camino y le seguí.

- Ya has cenado?- Pregunto internándose en la cocina.

No respondí.
Y así nos mantuvimos. En silencio hasta que nos sentamos a comer.

- Te quedarás esta noche?- Pregunté dudosa. Temiendo por su respuesta.

-Si.-

Esa respuesta debió ser la mejor para mi pero ya no era lo mismo. Ya no era la misma.

Era la hora de dormir y ya nos encontrábamos en nuestra habitación. Era la primera vez que la pisaba después de muchos meses sin hacerlo.

Hoseok ya se encontraba acostado. Me recoste a su lado  guardando la distancia. Pero él la redujo. Rodeó mi cintura con su brazo. Me sentía incómoda, ya no lo quería cerca de mi, pero no dije nada.

-Buenas noches.- Susurro.