Juntos

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Disclaimer: Desde las profundidades siniestras de nuestra mente, hemos vuelto, con esta pasión prohibida, rompiendo con las parejas establecidas y desafiando los estándares de la sociedad mágica. Claro, los personajes le pertenecen a J.K. Rowling.  

"Conmigo ten la libertad de hablar del tema que quieras, háblame de la cicatriz que te hiciste cuando te caíste del columpio a los 10 años, hablemos sobre el universo, háblame de cómo te ves en el futuro, de tu familia, de por qué no le hablas a ciertas personas, de tus amores pasados, de tus miedos... que yo te ayudaré a superarlos."

*º*º*º

Ginny corría por los pasillos, habían hecho otra de las suyas con el Ejercito, ahora los Carrow y Snape se encontraban peinando todo el castillo para hallarlos, pero se habían regado como canicas, sería difícil seguir a todos. Estaba por dar vuelta cuando una mano la rodeó, jalándola, mientras la otra le cubría la boca, acallando su gritó de pánico.

Draco la pegó contra la pared, ella se tranquilizó al reconocerlo.

—¿Qué?

Sígueme...

Ella enarcó sus cejas confundida, pero accedió. No había razón para desconfiar de él, después de todas las veces que los había ayudado.

Anduvieron entre las sombras un largo rato, hasta que llegaron a la Torre de Astronomía.

—¿Por qué estamos aquí? Nos hallaran.

—No lo harán —dijo confiado—. Este lugar ha sido revisado dos veces en lo que va de la noche, no lo será una tercera.

—Bien, esperare un poco y luego me iré —comentó sintiéndose inquieta al estar sola con él. Últimamente había estado teniendo extraños pensamientos sobre él y...

Malfoy no habló sólo se sentó pegado a la pared, con su vista clavada en el exterior. Ginny indecisa, lo observó un buen rato antes de ir a sentarse junto a él dejando un buen espacio entre ellos.

—¿Fui a la primera que te topaste?

—Sí —respondió escueto, sin decir la verdad. Se había topado con otros antes y ninguno había sido candidato para ser llevado ahí.

—¿Por qué lo haces? —preguntó, después de un silencio prolongado.

Él la miró de reojo, sonrió con gran amargura. —¿Y por qué lo haces tú?

Ginevra frunció su ceño, notando su reticencia a responder. —Es lo correcto, hago lo que esta a mi alcance... si pudiera hacer más lo haría.

Sus palabras calaron profundamente a Draco, haciéndole ver nuevamente cuán distintos eran. —¿Por qué piensas que lo hago?

—Para salvarte, porque una parte de ti... aún funciona bien; sabes que esto no es correcto.

—No estoy descompuesto, Weasley.

—Dime tu razón, entonces —respondió con interés.

—No soy un héroe —declaró fúnebre. Se incorporó molesto consigo mismo y avanzó por el lugar, alejándose de ella.

Había sido una tontería llevarla ahí.

*º*º*º

Draco se removió incómodo y con frío, abrió los ojos encontrándose a Ginny frente a él. Se habían quedado dormidos en el sillón, pero ahora comprendía que no había sido muy buena idea, aunque no lo cambiaría por nada, porque al ser estrecho, habían tenido que estar muy juntos con las piernas enredadas. El brazo izquierdo le hormigueaba, pues Ginny tenía su cabeza apoyada en él.

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