Waterfall (Yaoi/Gay)

7. É l

Dedicado a: Inner_Fangirl_

Cenil se quedó mirando el rostro somnoliento de Zehila quien no hace mucho le habia contado su historia al humano. Le sorprendió mucho al joven ver llorar al tritón mirando a la nada. Fue muy devastador. Cenil solo podía abrazarlo más fuerte y acariciarlo de manera sutil y reconfortante. No pudo evitar pensar en posibles situaciones tan amargas que ha podido pasar Zehila.

—La historia cuando la cuenta él dan ganas de llorar aún cuando la hubieses escuchado mil veces...—una voz se hizo presente de tras de la pareja y Cenil volteó encontrándose con un joven de unos 25 años, sin camisa y con solo un pantalón algo desgastado.—Yo la viví... Y aun no la puedo superar...—Cenil no dijo nada mirando al castaño.—Soy Spring, un gusto en conocerte Cenil... Zehila ha hablado maravillas de ti—dijo con un toque de sarcasmo oculto que Cenil pudo notar. Se sorprendio un poco. Era el híbrido que Zehila habia dicho. Spring se sentó al lado derecho de Zehila y agarró un mechón de su hermoso pelo mirándolo con nostalgia.—Haz conseguido en 1 día lo que yo no he podido conseguir en 240 años Cenil... Es admirable de tu parte y a la vez triste para mi.

Cenil se quedó mirando al chico qué observaba a Zehila con nostalgia. Se notaba que el híbrido amaba al tritón, no había duda. Pero se confundió al escuchar lo último que dijo.

—¿Conseguido lo que tu no? ¿A qué te refieres?—preguntó tratando de acercar más a Zehila a si mismo con una inquietud de que Spring se acercara.

Spring lo miró pero no respondió, solo se levantó suspirando, con una sonrisa amarga y agarró la mano de Zehila depositando un suave beso en su dorso. Se volteó y empezó a caminar alejándose ante la atenta mirada confundida de Cenil. ¿Que había querido decir?. Zehila se removió apegándose más al cuerpo del humano buscando ese calor que hace mucho no tenía, Cenil reaccionó y siguió abrazando al tritón pensando en varias cosas. En su trabajo por ejemplo, estos días no había podido trabaja bien por tener a la criatura que tenia a su lado nadando en su mente. Al ser el pediatra del pueblo tenia que tener concentración en los niños que atendía, pero el tritón lo desconcentraba al tal punto que casi pone alcohol normal en una herida en vez de bio-alcohol.

Cenil se acomodó un poco y se acostó en la tierra, la cual siempre toda húmeda, sin importarle su ropa. Puso a Zehila recostado sobre su pecho y miró el cielo ya oscuro acariciando los suaves cabellos rojizos del tritón.

— Beso...— pensó Cenil después de un rato.

Miro al tritón otra vez y se fijo en sus labios. Rosa pálido y finos con la mitad de arriba un poco esponjosa. No le había prestado atención a esa parte de su hermoso rostro, tal vez por quedarse embalsado con sus penetrantes ojos o su piel lechosa y delicada.

Cenil sintió un pequeño revoltijo en su estomago y su corazón algo acelerado. Notó lo cerca que estaba del rostro de Zehila sorprendiéndose a si mis y se alejó un poco. Miró el cielo estrellado y dio un respiro cerrando sus ojos. Se sentía bien y eso le preocupaba, pero se sentia bien. Movió su mano al pelo de Zehila y pudo sentir lo sedoso y rizado que era estando medio seco.

Abrió un poco el ojo derecho verificando que la hermosa cola estuviera en el lago y lo cerró sonriendo un poco. Se sentía bien...

➖

Los ojos de tritón se fueron abriendo poco a poco al sentir un poco de luz molestando su párpados. Estaba apenas amaneciendo, pero los rayos anaranjados del sol le daban directamente en la cara.

Se sentía cómodo. Demasiado, y un ligero peso en su cabeza. Movió ligeramente su cabeza y sintió emoción al ver el rostro dormido de Cenil. Apoyó una mano en la tierra y se acomodó sentándose. Miró su piel y notó lo reseca que estaba, tal vez por eso se sentía más cansado de lo usual, no le tomó importancia y volvió su mirada al rostro de Cenil.

Cenil para Zehila era la definición de perfección en todo su esplendor. Sus facciones varoniles, su cabello algo largo azabache y su piel tostada, su ojos de un azul profundo, tan profundo como el centro de océano... Sin duda alguna Zehila había caído por el humano. Acarició su mejilla riendo al ver que el humano movía su cabeza para más contacto.

—Tal vez...—susurró sin dejar de acariciar su rostro con una mirada llena de esperanza. Suspiró acercándose miró los labios de Cenil por un momento, un largo momento, pero se desvío y le dio un beso en la frente. —Cenil...—lo llamó suavemente alejándose.—Hey, Cenil—lo volvió a llamar pellizcando un poco la mejilla derecha. El humano abrió su ojos al sentir la pequeña molestia en su rostro y se encontró con los ojos de Zehila.—Hola, dormilón—sonrió.

Cenil se quedó mirando a Zehila por unos segundos tratando de procesar el momento y tratar de guardarlo. Sin duda desearia despertar todas la mañanas así.

—Hola, pescadito—se rió al ver la mueca del tritón al escuchar el apelativo. Se acomodó sentándose mientras miraba como el sol apena estaba saliendo de los horizontes.— Deben ser un cuarto para las seis.—se sobo la nuca estirandose, el sonido de sus huesos sonar se escuchó sobresaltando al pelirrojo.—Ah.. Si...  Mucho mejor...

—¿Te tienes que ir?—preguntó Zehila apretando sus puños en la tierra. Cenil lo miró atentamente y sonrió.

—Lastimosamente si, mi dulce tritón. Pero voy a hacer todo lo posible par venir en la tarde. ¿Si?—Apartó un mechón de pelo que se colaba lo su rostro.—Si quieres te dejo los libros para que lo leas mientras no estoy.—Cenil se levantó sin apartar la mirada de Zehila.

El tritón al mordió el labio inferior y miró la tierra asintiendo. Cenil se puso de cuclillas y agarró suavemente el mentón de Zehila haciendo que lo mirara.

—Volveré ¿de acuerdo?—le acarició el mentón y Zehila asintió algo hipnotizado por los ojos de Cenil. El humano se acercó suavemente a él causando que su corazón se disparara.  Cenil le dio un beso en la mejilla. Eso bastó para que lo colores se le subieran al rostro. —Te veo más tarde—dijo el humano sonriendo. Se levantó y empezó a caminar perdiéndose entre los árboles.

Zehila se quedó mirando a la nada con el corazón bombeando rápidamente sangre. Cenil era demasiado perfecto y Zehila sabía que su corazón bombeaba de esa manera por él...

🌙

«Perdonen la demora, estos últimos meses no ha sido favorables. Espero que les guste. Lo subí antes del jueves porque me sentía mal al dejarlos esperando más tiempo, gracias por todo :)»