El Juego De La Seducción [Luke Hemmings]

Plus 1: Historias de Terror

Miré al pequeño Luke jugar con los carritos que Michael le compró en su viaje de Australia.

—¿Puedo comer una galleta?— pregunta Luke dejando su juguete a un lado.

—Por supuesto que sí mi vida—sonreí y me puse de pie.

Caminé a la cocina y abrí un paquete de galletas con chispas de chocolate, las coloque en un plato y serví dos vasos con leche.

Regresé a la sala y vi a Luke sacando sus colores de la mochila.

—Aquí están— dije coloque las galletas y la leche junto a su cuaderno.

—Galletas para mi bebé.

El pequeño Luke regresó con sus colores a la mesita de centro.

Miré a mi hijo dibujar y de vez en cuando revisaba mi teléfono.

—Iré al baño— dijo Luke poniéndose de pie.

Mi hijo se fue y no pude contener mis ganas de mirar su dibujo. Tomé su cuaderno y ví los garabatos que había hecho.

Mis ojos se abrieron al ver a mi pequeño Luke (eso decía el dibujo) tomado de la mano de alguién que decía "Papá".

Mi hijo regresó y tomó su vaso con leche para darle un sorbo.

—Es mi padre— dijo señalando el dibujo.

—Eso me dice él.

—¿Por qué trae un círculo en la cabeza?— pregunté.

—Porque murió, murió antes de conocerme.

Luke lo decía tan normal, como sí supiera la verdad desde siempre.

—Pero tu papi es Michael— dije nerviosa a su respuesta.

—Pero él es mi papi, Luke— dijo tomando el cuaderno.

—El me cuida de los monstruos que viven bajo mi cama, él duerme conmigo todas las noches.

Sus palabras me dejaron helada, no había ni una sola foto de Luke y  Crystal; y no eran temas que Michael y yo tocaramos desde hace años.

—El nos ama mami— dijo mi pequeño.

—Y dice que tiene un mensaje para ti.

Me siento atrapada en una historia de terror, espero que esto sea un sueño, o más bien una pesadilla.

—¿Un mensaje?— pregunte asustada.

—Sí— asintió con la cabeza

—Dice que el juego no a terminado— Luke me miró fijamente.

—También me dijo que el juego apenas esta iniciando.

Me sentía aterrada, quería tomar a mí hijo e irme a buscar a Michael, pero no importa donde estemos, el pasado siempre regresa.

—Sígue dibujando— le dije a mí pequeño Luke.

—Mami debe llamar a tú papi.

Luke siguió jugando y yo corrí a mi habitación.

Marqué el celular de Michael y rogue porque contestará.