Amor a primera vista

Capitulo 17

Adrián ya estaba cerca de nosotros  y sabía que tenía que enfrentarlo, pero mi valentía se fue y solo quise correr, irme de aquí

-Liam, me duele la cabeza. ¿Podemos irnos?—dije con un gran apuro y volteándome para ir por el lado opuesto

-yo creo que todo esta bien—dijo mirando a todas partes—pero parece que tu no, ¿te sientes bien?

-si estoy bien—dije con un gran nudo en la garganta—vamos a otra parte—dije jalándolo, pero ya era demasiado tarde

-¿vida?—escuché decir a una voz grave atrás de mí. No quería voltear, pero tenía que hacerlo

-estas pálida—me dijo Liam con una expresión confundida en el rostro, y yo le dediqué una sonrisa, tan falsa que se me vio una mueca decepcionante antes de voltearme y encarar a lo que estaba atrás de mi

-no me llames así—dije apretando los dientes y dirigiendo una mirada de odio a su dirección

-¿lo conoces?—me dijo Liam al oído, pero yo ni volteé. Sé que es muy exagerada mi reacción y sé que es muy estúpido lo mucho que me afecta, pero así soy yo. Soy así de sensible y todo el tema con Adrián me duele en lo más profundo del alma. Sentía que me iba a explotar la cabeza.

-¿podemos hablar?—dijo dedicándome una mirada suplicante, y luego una mirada de desconfianza a Liam

-¡no!—dije con la misma sensación de un nudo en la garganta y tragándome mis lágrimas. No me iba a derrumbar en su cara, no le iba a dar ese gusto.

-amor…

-¡que no me llames así!—dije gritando y muchas personas voltearon a mirarnos, pero me importo una mierda—solo vete

-princesa, ¿Quién es?—dijo Liam con las manos echas puños y la mandíbula tensa

-él es…

-que chucha te importa—respondió Adrián y dirigió su mirada a mí—hace dos meses que te buscó, dos meses que no te veo, dos meses que no escuchó tu voz. Ha sido un infierno para mi, nunca me dejaste explicarte, necesitamos hablar para aclarar todo, te necesito—y su voz se quebró en las dos últimas palabras “te necesito” y yo simplemente no podía aguantar.

-deja de decir mentiras—dije en un susurró y con una lágrima escapando de mis ojos. Maldición! No quería tener esta conversación, ahora ni nunca—Liam vamos—dije jalando su brazo y pasando al lado de Adrián, pero el agarró mi brazo y me volteo

-déjame que te explique, no fue lo que parece

-¿Qué no fue lo que parece?—dije incrédula y solté una pequeña risa de indignación—eres un imbécil

-un imbécil que te ama—y luego de eso, Adrián estaba en el suelo retorciéndose de dolor. Liam lo había golpeado en la barbilla fuertemente y Adrián no se lo podía creer

-eso fue por los dos meses de lágrimas—le dijo con los dientes apretados—y por haber dicho algo que no sientes—dijo Liam jalándome en dirección a mi casa y yo solo sentía que la vista se me nublaba en momentos. La cabeza me iba a explotar y el llanto no paraba. No podía seguir aquí, mirando a quien una vez fue mi gran amor

-dime que no lo has olvidado—gritó Adrián en el suelo con unas lágrimas en el rostro y eso me mató, verlo llorar—dime que no has olvidado nuestra promesa, ese día en el que prometimos amarnos para siempre—y la voz se le quebró, las misma sensación que sentí en mis piernas y en mi corazón, como me rompía a pedazos. Y un gran recuerdo vino a mi mente sin poder evitarlo, haciendo que todas mis defensas fueran inexistentes. Esas dos palabras PARA SIEMPRE, pronunciadas ya hace 7 meses, un 17 de marzo, hicieron que recordara lo que hasta hace dos meses fue el mejor momento de mi vida