Digimon Adventure Online 2.0

Capítulo XI: Cherrymons y Sabotaje - El Reto de la Zona Bosque

     Llegamos a la Zona Bosque casi a la par del equipo de Mirai. Mi corazón dio un vuelco al ver que Katsura y Reiji arrastraban a la convaleciente pequeña, Cutemon tuvo que curar sus heridas mientras Katsura me explicaba que ellos habían tenido que pelear contra un Pegasusmon.

     Una vez que Cutemon terminó con Mirai, se dedicó a curar las heridas de Katsura. En aquél momento me sentí de lo más afortunada por tener un Digimon así en nuestro equipo.

     ¿Qué habría sido de nosotros sin Cutemon?

     La mitad de nosotros no habrían llegado hasta ese punto del juego si él no se encargara de curar las heridas antes de comenzar cada reto.

     Diez minutos después comenzamos a caminar para buscar nuestro siguiente reto. Los pies me dolían y estaba tan cansada que sólo quería tirarme en el suelo y dormir una siesta. Lo habría hecho de no ser porque tarde o temprano todos tendríamos que asesinarnos entre nosotros para que sólo uno llegara de vuelta a la Zona Bosque. Si me quedaba dormida sin que Satanmon nos indicara que podíamos descansar, seguramente alguien me cortaría el cuello o algo semejante.

     No tuve más remedio que continuar.

     Llegamos a una serie de seis túneles de cristal.

     Eran seis, uno para cada uno de nosotros.

     Al fondo, muy al fondo, podía distinguirse la luz proveniente del siguiente portal. Y Satanmon, mirándonos con una sonrisa de satisfacción, ya se encontraba flotando en el cielo.

     — ¡Bienvenidos a la Zona Bosque!  —exclamó—. Aquí está su siguiente reto. Cada uno de ustedes deberá caminar por un túnel para llegar al portal. Estando ahí, tendrán que vencer a un enemigo para poder continuar. Tendrán quince minutos para llegar a la siguiente zona, quien no lo consiga se quedará aquí y morirá. ¡Nos veremos en la Zona Polvo!

     Se esfumó y me pregunté a dónde iba cada vez que desaparecía. No podía evitar imaginármelo sentado en un cómodo sofá, comiendo frituras y viendo cómo luchábamos contra otros Digimons mientras reía a carcajadas.

     Detestaba tanto a ese sujeto…

     Vimos aparecer las barras verdes en nuestras cabezas y el cronómetro holográfico comenzó a contar los quince minutos en cuenta regresiva. Así que corrimos a toda velocidad sin importarnos cuál era el túnel de cada quién.

     Me introduje en el segundo, el que tenía más cercano. Ya que las paredes eran de cristal, bien podía ver a los demás avanzar por sus túneles. Katsura era la más rápida corriendo así que fue ella quien se adelantó. Luego le seguía Kiyoshi y yo estaba en tercer lugar. No hace falta decirlo para adivinar que la última era Mirai.

     Si tuviera que calcular la distancia exacta entre la entrada del túnel y el portal, diría que eran casi cinco kilómetros. Recargué a Sparrowmon para ganar ventaja aunque aquello detonó que los otros también recargaran la sus Digimons más veloces. De esa forma, Mirai se adelantó hasta ser la primera, le seguía yo y Katsura iba en tercer lugar. Kiyoshi se quedó un par de centímetros atrás de Reiji, pronto comencé a imaginar que tarde o temprano el juego se llevaría a cabo entre mujeres únicamente.

     Al llegar casi a la mitad del túnel, la tierra comenzó a temblar y todos nos detuvimos en seco. Del suelo salió el enemigo que teníamos que enfrentar: un Cherrymon para cada uno.

     Me mantuve sobre Sparrowmon mientras mi mente maquinaba una estrategia. Dorulumon ya atacaba a su enemigo con el taladro de su cola y KidTriptonmon había vuelto a aparecer. Hubo una explosión cuando Kyoko recargó a su Keramon y lo hizo evolucionar en Infermon, su Digimon era tan grande que destruyó su túnel.