Eras tu

Intentemoslo

Capítulo 12

-Bueno ya me están asfixiando – dijo Fernanda tratando de soltarse del abrazo de sus padres.
-Fer… - le dijo Dionisio en tono de advertencia.
-Mírate mamá estas llorando como una loca, se te corrió todo el maquillaje – le dijo entre risas a Victoria.
-y tú que pensabas, que esto solo era difícil para ti – dijo Victoria limpiándose las lágrimas– pero tienes razón, me tengo que calmar, además tengo que irme tengo que hacer algunas pruebas de los diseños de Pipino – dijo levantándose del sillón.
-Seguimos firmes para la cena de esta noche? – le pregunto Dionisio pues ya habían hablado sobre la invitación.
-No lo se, la verdad es que…
-Hay mamá por dios – le dijo Fernanda – ya es hora de que pienses un poco en ti caray, además si es por mi ni te preocupes, de aquí salgo directo para la casa de mi papá, Camila me dijo que me tenia una sorpresa y que quería pasar la noche conmigo.
-Fernanda, me encantaría creerte pero…
-Llamala si quieres, no voy a salir, además desde que llegamos del viaje aquí el señor tiene dos guaruras que me siguen a todos lados y por mas que yo quiera armar un desmadre se lo van a decir y apenas estamos empezando a llevarnos para comenzar con problemas, no estoy tan loca – dijo Fer tratando de ayudar a su padre.
-Te quedaste sin excusas Victoria – le dijo Dionisio – ve a la casa de modas y pasare por ti a las 6 de la tarde, y no te preocupes por Fer, yo mismo me encargare de que no ponga un pie fuera de mi casa.

Los ojos de Fer no daban crédito a lo que estaba viendo, era la segunda vez en el dia que recibia una sorpresa, la primera fue en la mañana, luego de despedirse de Victoria, Dionisio le pidió que lo acompañara, en una reunión que hizo con todo el personal de sus empresas Dionisio la presento como su hija y como la nueva encargada del área de publicidad de la empresa, además le entrego las llaves de su nuevo despacho, en el que encontro no solo todo lo necesario para trabajar si no también algunos detalles que su padre y su hermana habían elegido para ella.

-No lo puedo creer – dijo recorriendo el cuarto.
-El mismo se encargo de cada detalle – le dijo Camila – si te gusta verdad?
-Mas que eso, me encanta! – grito feliz al ver su nuevo cuarto – en que momento preparo todo esto?.
-Creo que la misma semana que se entero que eras su hija, lleva meses tratando de decifrarte, intentando saber que te gusta y que no, solo quiere hacerte feliz – le dijo Camila.
-Yo me moria de ganas de tener un papá, pero nunca imagine que seria tan…
-Tan extraño? – le pregunto Camila.
-No, tan genial – dijo ella sonriendo – yo conocía al Dionisio de los negocios, arrogante, soberbio, prepotente el que solo quiere hacer su volutad, y tengo que confesar que envidiaba cada vez que ibas a verlo, porque tu lograbas sacar lo mejor de el…
-Fer, mi papá te adora y no te imaginas la sorpresa y el gusto que le dio saber que tu eres su hija.
-Por eso cambio tanto.
-Por eso y porque sabe que en ti puede dejar las responsabilidades de su empresa, a mi trato de insistirme e incluso estoy estudiando lo que el quería, pero mi mundo esta en las pasarelas y en la moda, algún dia voy a llegar a ser igual de buena a tu mamá.
-La admiras mucho verdad? – le pregunto a su hermana.
-Si – contesto Camila sonriendo.
-Tu ya has hecho mucho por mi Cam, déjame a mi hacer algo por ti – le dijo Fernanda.

-Que es todo esto Dionisio? – le pregunto al entrar al reservado que tenia preparado para ella.
-Solo quiero mostrarte que si me lo pides voy a ponerte el mundo entero a tus pies – le dijo abrazándola por la espalda.
-Dionisio, creo que vamos muy rápido – le dijo Victoria tomando el asiento que el mesero le ofrecia.
-Rapido dices? – pregunto desconcertado siguiendo sus pasos – Vicky solo quiero que estes conmigo, que estes a mi lado y que…
-Dionisio, el hecho que seas el padre de Fer y que allas aparecido de nuevo en nuestras vidas no quiere decir que tengamos que formar una familia que no somos – dijo ella dejando ver lo tensa que estaba.
-Victoria, yo no pretendo nada a lo que no tenga derecho – dijo el con seriedad.
-Si hablas de Fer, sabes de sobra que puedes verla y estar con ella el tiempo que quieras, ella estará encantada, pero conmigo las cosas son distintas Dionisio, tu y yo solo somos un par de desconocidos.
-Desconocidos? – le pregunto con ironia – desconocidos luego de hacer el amor como lo hicimos el fin de semana Victoria?
-Dionisio tu lo has dicho hicimos el amor, pero yo no se nada de ti y tu no sabes nada de mi, no he tenido ningún tipo de relación sentimental y no estoy interesada en tenerla, mi única preocupación en esta vida es Fernanda, su felicidad.
-Pero si mi hija ya es feliz, por Dios Victoria, ¿Qué te detiene?
-Dionisio, esto no tiene ningún sentido – dijo levantándose de la silla – es mejor que me vaya.
-No! – grito molesto y sosteniéndola de la mano – no te vas a ir de mi lado hasta que logre entender que demonios es lo que te impide ser feliz conmigo.