No te enamores de mi (Camren Fic)

Capitulo 6

Capítulo 6: Desprecio

Camila caminaba por los pasillos de la escuela, aún con el recuerdo del encuentro que había tenido, hacía dos noches, con Jauregui. Sonrió para sus adentros, sin entender muy bien el motivo.

"Te llevo a casa" – le había dicho Lauren, aparentando indiferencia

"Me puedo ir caminando"

"¿Caminando? Camila, no debes de arriesgarte tanto...

"¿Jauregui está preocupada por mí?"

"Eh... no... solo... solo quería ser amable"

Volvió a sonreír y negó ligeramente con la cabeza, reprendiéndose mentalmente. No debería de permitirse el pensar tanto en ella. Continuó caminando y vio, a lo lejos, como Lauren se encontraba en el pasillo, en medio de sus amigos. Le dedicó una sonrisa de lejos, pero ésta volvió el rostro hacia otro lado, ignorándola.

Seguramente no me vio, pensó y continuó caminando hasta llegar hacia el pequeño y popular grupito de chicos y chicas adolescentes. Ignoró todas las miradas despectivas que le dedicaron y las risitas que se levantaron en cuanto llegó hacia ellos.

"Hola, Lauren, ¿Nos vemos hoy después de clases?" – recordó, de manera amable, a la chica de ojos color verde que la miró detenidamente por un momento.

No supo descifrar qué significado tenía aquel brillo que destelló de sus verdes esmeraldas... y antes de poder pensar en algo más...

"Si... en tus sueños" – contesto Lauren y su gesto amable se endureció.

Esperó por un momento, muy pequeño, con la esperanza de que Lauren se retractara de su actitud tan insolente, pero, como era de esperarse, no lo hizo. Suspiró profundamente y el aire llegó de manera dolorosa a su pecho, más no lo hizo notorio. Invisiblemente, se cubrió los oídos y trató de no escuchar toda la burla que se levantó por parte de quienes habían presenciado todo. Dio media vuelta y se fue.

Lauren miró como la muchacha se iba y, por un instante, un pequeñísimo instante, quiso ir detrás de ella y decirle "Espera, discúlpame"... sin embargo, las cadenas invisibles de sus amigos, quienes aún seguían partiéndose de la risa, la impidieron mover sus pies. Buscó con la mirada a Nicolás, quien era el único que, aparte de ella, no se reía y éste le dedicó una mirada reprobatoria.

Si, lo sabía, esta vez, había sobrepasado los niveles de la idiotez...

"Muy buena esa broma, Lauren" – le felicitó Mike, mientras la movía para ir al salón de clases

Lauren entró en el aula y lo primero que buscó fue el rostro de Camila. Lo buscó con una desesperación que se le hizo molesta y, cuando lo encontró, notó como la chica hacía todo lo posible por no mirarla.

"Vaya forma de agradecer los favores" – reprendió Nicolás, hablando con un murmullo – "No debiste hablarle así, no se lo merecía"

"Lo sé" – admitió Lauren, a regañadientes.

Las clases terminaron y Lauren se apresuró a guardar sus cosas en la mochila y salir, casi corriendo, detrás de Camila. No la alcanzó. Su delicada figura se había perdido en medio de todo el montón de alumnos que se arremolinaba en los pasillos. Suspiró frustradamente y se armó de valor para ir a su casa.