(Parece que se ha ido de mi lado, pero parece que también me he ido yo de mi lado, no parece todo tan radiante como lo pensaba, ESPERA... ¿qué es eso? Soy yo... vaya, es más radiante lo de que pensé, es momento de recoger todo este desastre)Que contradicción la mía de salir de mi vacío emocional, que colmo mi corazón tan desconfiando con la manera en cómo se mueven mis pies, como me duelen de ya haber andado tanto, con mi mente frustrada planeo lentamente ir metiendo todas las miradas en mi baúl de promesas, espero tocar nuevamente un sueño en el pozo del miedo, llenarlo de amor y entregar mi tiempo al embellecerlo con un camino del futuro que pueda hacerme sonreír en una forma divina de ser feliz. Sin juzgar mi mente y mi forma de acariciar, sin miedo a perder y a que todo salga mal. No tener miedo a mi forma de amar y pensar, sentir es una grosería cuando dejó el miedo ya expuesto siendo tan relativo, más bien, el miedo no existe
Tratando de analizar mi humanidad, parecía que la estaba perdiendo, pues veía frío y lento como mi parte más calidad, ya era fría, no dejé de sentir, de razonar, de moralizar mis acciones, solo que ahora tomaba libre el camino de ignorarla, jamás había pensando en sentirme dichosa y vacía, feliz y confusa, ya iba comprendiendo a donde me acercaba... era lamentable como no podía tener un sentimiento meramente liviano y simple por ello en si y es que parece maldición como se puede sentir tan bien y tan mal, aunque debo admitir que algo dentro de mi sentía que gritaba, que pedía reaccionar, pero mis recuerdos me llegaban y el perder parecía un plato que ya había comido y que ya no parecía tan imprudente. Y se acumulaba mi veracidad de las cosas, así como cuando algo se acumula en el momento menos preciso, y pasaba tarde, noches, días... en fin, días completos, uno tras otro sacudiendo el polvo, disipando el humo para reanudar mi claridad y ahora ocuparme de lo demás. la solución por supuesto era sencilla, lo sabía, porque siempre fui de ley, pero no comprendía eso ahí, en esos momentos, no puedo ni siquiera comprenderlo en este momento que lo expreso, y bueno, de forma típica ahora no sabía qué hacer, y ahora que lo recuerdo, no era la primera vez, no, no lo era, y es que la edad me había hecho más cobarde, al parecer en el mundo se le llama consciencia, lamentablemente me hallaba tan confundida que no sabía cuál de las dos era o que porción de una era más alta.
pienso y pienso en todo, pero pensar no serviría de nada para algo que se siente y sentir no serviría de nada para algo que no se piensa, que grosería me hacía a mi al mudar mi valentía a otro lado, saber aquel problema en el que me meto y no tener la garra de luchar por mi, pero llega rápida y tendida la que yo supongo es la realidad, cae como un balde de agua, pero cae como la realidad que es, porque no sé qué pensar, no sé qué discernir. No recordaba haberme sentido así, pero si, ahora que lo pienso cada vez iba abandonando mi manera de tolerarme, de tolerar mi humanidad tan desagradable que sabía que podía exponer al mundo, de entregarla hasta a quien más me ha dado, tolerar mi forma de existir en este mundo como lo que soy. Y el paso de los años iban desnudando mi yo, y no sabía si estaba de acuerdo o feliz con esto y era lamentable porque así como me sabía cómo una persona buena, sabía lo malo que me inunda, lo que no suelo mostrar porque lo guardo, pero ahí sigue, ahí vive, era lamentable volverme loca, ya que irónicamente sabía que tenía el absoluto control de mi, mis acciones y todo lo demás , pero aquí estaba, me veía tendida en un gran asiento viendo pasar la película de mi, no quería ser otra persona, pero ahí, en ese momento deseaba estar en otro lugar. No sabía que era más grave, si mentirles o mentirme. Tomaba por hecho lo que era evidente y según yo ignoraba lo sobrante, que en realidad era lo más importante, ¿y como lo hacía? Es que prácticamente se puede engañar a uno mismo, se puede manipular desde adentro el mismo ser hasta quedar convencido de que las cosas son cuando "son"evidentes, creo que empezaba a aceptarme ¿eso era lo más triste que podía hacer por mi? me sonrió al darme cuenta lo expuesta que está mi alma al quejarme de mi y disfrutarlo, de no cambiarlo, de tener incluso miedo a veces de ser yo, o de no serlo, llena de miedo al creer que solo a mí me pasa. Era una lastima, en serio, era una lastima no saber mucho de mi, por qué descubrí que se puede y tener tanto, pero no se puede tener todo, y ambas cosas en combinación, tomadas de la mano, te pueden dejar sin nada.
había una sensación en mi que rondaba desde la cabeza a los pies. Repaso este escrito y me di cuenta que no he dicho nada pero quiere salir... lamento ser yo y tener en mi cabeza miles de cosas para decir de mi, lamento ser yo y que la crítica más amplia y triste que encuentro en mi, sea hacia mi.
Han pasado más de 50 noches a tu salud, a tu recuerdo. No sé con exactitud, sigo despertando en el mismo sillón, no he querido entrar a mi habitación, creo que sería como entrar a un hoyo del que por una noche me perdería.
Amanecí con una muy buena noticia, hoy no soñé contigo, quizá por eso la noche de ayer al despertar pude estar segura que dormías a mi lado, ¿habrá sido el adiós? En la última promesa dije que te seguiría buscando en mis sueños, claro que no sabía que sería así cada día, desde que te haz ido día a día te sueño y puedo decirte todo lo que no pude, ojalá esta haya sido la última noche en la que día con día te sueño, pero ojalá no sea la última, de cualquier modo yo te iría a buscar, te seguiré buscando, no diario, esto para para empezar a olvidarte, pero tampoco nunca, esto para tenerte presente.
Ojalá pudieras verme cada mañana, sentada en la esquina de aquel sillón gris, dejando olvidado mi cuarto... MI CUARTO! Yo tengo una teoría, creo que el cuarto de cada persona muestra cómo está esa persona en su vida, lo he pensado hace mucho y conforme el tiempo me parece cada vez más cierto, al menos en mi vida y en la de otras personas. Hoy por la mañana decidí entrar, no me había percatado de cómo estaba pues solo entraba a hacer lo propio o lo necesario, pero cuando lo abrí lo miré, está tan pero tan desordenado, ropa aquí, Ropa allá, todas las cosas que son importantes están por lo suelos, las necesarias están a la mano y una que otra está olvidada, mis adornos y recuerdos empolvados y unos tirados, mis cosas amadas, mis colores, mi libro de bocetos, mi cámara entre otros están en su lugar, esperando a ser uilizados nuevamente, la cortina tirada, creo que necesita luz. Se ve vacío por encima si mantienes la mirada hacia en frente, pero si miras hacia abajo está lleno de todo lo que es, y si miras debajo de la cama están tus recuerdos en bolsas y cajas... aunque ahora que lo veo, sigue manteniendo su esencia.
En fin, hoy es el día donde acomodare mi habitación, me desharé de las cosas que no sirven, guardaré lo que tenga que guardar, hoy.. HOY SALDRÉ DE AQUÍ.
Camino ah... digamos alguna parte, harta de ti y tu recuerdo, harta de no saber salir, escuchaba una canción, y vino a mí esto;
Y me sumergí en la bella melodía que va en mi cabeza, que se mete aparentemente en mi corazón, como si recorriera mi alma y cada parte de mi, el aire en mis pulmones viaja en ellos y se sienten llenos, tanto que suspiro. La cálida mañana tranquila que promete ser buena, la brisa en mis manos... una luz radia mi vista y siente armonía mi alma, mi ser, mi espacio se encapsula en un silbido, en una letra que intento comprender y se siente bien, cada palabra acompaña una parte de mi vida, cierro los ojos y me concentro, tratando de terminar este escrito como es debido, con la alegría que alberga mi ser al sentirse cerca de la belleza del arte, al colapsar en mi pecho una sensación de belleza, al no sacar de mi cabeza la melodía, al luchar contra los pensamientos distintos que tratan de distraerme y no aportan nada a la belleza de este momento y se disfruta y dejo volar mí mente y mi alma, las palabras se quedan cortas, mi Vocabulario se hace pequeño al querer expresar algo tan grande y repito una y otra vez esa canción que hace el momento mágico. Siento la esencia y quiero bailar y caminar quizá por un pasto humedo. mirar el cielo y sentir que todo está bien nuevamente, volver a sentirme niña, sentir que todo se vale, Todo se puede, borrar de mi mente el miedo, regresar a todo esos lugares, quizá a aquella plaza donde estuve tan cerca de sentirme llena, aquella avenida que sabía que me llevaría a casa, a los brazos de mis padres, a la sonrisa de mi madre, las tardes esperando a mi padre, los juegos con mi hermana, a aquella persona pequeña que vi tengas veces en el espejo y no sabía que pasaría mañana, que no sabía que se asomaba una vida donde le demandaría crecer rápidamente, donde las decisiones se proyectaban en un minuto y otro, aquella pequeña que no sabía que encontraría a el amor de su vida a los 14 años. Y se llena de dicha mi alma al ver cuánto he aprendido en mi vida, cuantas aventuras he vivido y contempló mi vida desde este asiento.
Al cabo de un tiempo no muy largo, que para mí pareció una eternidad, comencé a salir poco a poco, me demandé amarme más de lo que un día te amé, me demandé con coraje seguir y salir de está situación, al cabo de un tiempo siendo yo misma aclaré mi mente para dejar de sentirme culpable, pude ver qué no habían camino distintos, entre irme un día u otro, al cabo de unos días la verdad vino como un balde, me di cuenta de las señales y fue ahí cuando te dejé ir al fin.
ESTÁS LEYENDO
Querido autor;
PoesíaQuizá el mejor amor es aquel que termina antes de ser destruido por siempre, y que la esencia no muera por el día a día, ya que así con el paso de los años, a pesar de que las almas se alejen, cuando se encuentren, si se llegan a encontrar, se volve...