Capítulo 15

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-¡Por favor!
Suplicó Chloe, de rodillas sobre la alfombra malva. Estaba sacando su lado más infantil, cosa que no ocurría todos los días y a Grace le dio un poco de pena, pero no pensaba ceder tan fácilmente. Luke empezó a cantar el estribillo y ella miró hacia arriba, para encontrarse esos preciosos ojos azules observándola. Llevaban días teniendo roces constantes, y ahí estaban. Un día más, en el sótano del chalet blanco de lujo del grupo australiano de moda. Desde que Sophie y Michael estaban oficialmente juntos, se pasaban allí día y noche. A Grace no le importaba, claro, ella y Ashton eran amigos. Hablaban de temas banales e incluso comieron juntos (sólos) en una ocasión. Decidieron que tenía que haber reglas. La primera era nada de tocarse innecesariamente, ya que sólo causaría problemas. La segunda era que si pasaba algo que les hiciera sentirse incómodos o raros: tendrían que admitirlo lo antes posible, decirlo abiertamente, resolverlo y desactivarlo, como una bomba. Las amigas de Grace seguían pensando que estaban loca, por supuesto. Y lo cierto es, que era extraño. Ashton y ella habían logrado lo imposible: ser amigos. Ahora ella se pasaba la vida viéndolo ensayar, fijándose en cada mínimo detalle como las pecas de su brazo, la pelusilla rubia o los colores de sus ceñidas bandanas. Aquella misma tarde, justo al dejarse caer sobre el sofá de cuero rojo que solían ocupar al estar con ellos, Chloe había empezado lo que se estaba convirtiendo en una pesadilla.
-Tengo in candidato -le soltó mientras 5 Seconds Of Summer se lanzaban con Heartache On The Big Screen para empezar el ensayo.
-¿Candidato?
-Universitario -asintió ella
-Hmm -dijo Grace en toda respuesta dando un sorbo a su Java Boom
-Se llama Tom y está en segundo. Quiere ser médico.
-No sé, hace demasiado calor para salir
-Lo sabía -afirmó Chloe meneando la cabeza -¡Lo sabía, maldita sea!
-¿Qué?
-Que ya no eres una de las nuestras
-¿Y eso que quiere decir?
Chloe cruzó las piernas sobre los tobillos y se echó hacia atrás, apoyándose en las manos, sentada en el suelo junto a la mesita de café marrón.
-Dices que estas soltera y libre de sentimientos. Lista para salir de nuevo.
-Chloe -suspiró Grace -lo estoy
-Pero, cada vez que intento presentarte a alguien o organizarte una cita, te niegas
-Solo una vez -protestó- y es que los futbolistas no son lo mío.
-Fueron dos veces -la corrigió- y el segundo era guapo y alto, como a ti te gustan. Así que no me pongas excusas. Las dos sabemos cuál es el problema.
-¿Ah, sí?
Chloe volvió la cabeza hacia delante e hizo un gesto hacia Ashton, que aporreaba la batería con expresión de concentración.
-Tu "amigo" ese
-Déjalo -replicó con una mueca - es ridículo
-Todavía lo ves -insistió ella levantando un dedo para empezar a contar
-Nuestros mejores amigos salen, Chloe
-Todavía hablas con él -continuó, levantando otro dedo -. Apuesto a que, como Clarke, has pasado delante de su casa en coche cuando no te pillaba de camino
Grace resopló, inclinándose para dejar su vaso de plástico vacío sobre la mesa. Aquello ni siquiera iba a dignarse a contestarlo. Se quedaron un par de minutos en silencio mientras 5 Seconds Of Summer acababan la canción y continuaban con la mítica Try Hard.
-Bueno, venga -la animó Grace -cuéntame
Ella ladeó la cabeza con desconfianza
-No lo hagas por hacerme un favor. Si aún no estás lista, se te va a notar. Aún sientes algo por él. Las dos lo sabemos.
-Tú dime
-Vale. Pues son estudiantes de segundo y...
Siguió hablando mientras Grace miraba hacia delante, para observar a los chicos. En aquel momento, apareció Sophie por las escaleras de caracol del sótano y se acercó a Michael, dándole un leve pico que lo hizo sonreír como un niño pequeño, aunque siguió tocando, sin interrumpir la canción. A continuación se dejó caer al lado de sus amigas, saludándolas con una inclinación desinteresada de cabeza para volver a fijar su mirada en su novio. Chloe seguía parloteando animadamente.
-Por cierto, ¿he mencionado que tiene novia?
-¿Qué?
Exclamó Grace, indignada. Chloe sabía que ella tenía una regla muy clara sobre no salir con chicos comprometidos. Su amiga parecía no acordarse de la paliza mortal que recibieron las dos por ser descubiertas por las novias de aquellos gemelos deportistas con los que salieron hace 3 veranos.
-Oh, venga, no pasa nada. Su novia está pasando las navidades en Canadá. Nunca se enterará.
Dijo Chloe con la voz aguda, tratando de restarle hierro al asunto. Y así llevaban casi 15 minutos. Al parecer a Chloe le gustaba aquel chico. Mucho. Y sus súplicas se estaban volviendo casi patéticas.
-¡Vamos! Hazlo por mi. ¡Incluso Clarke ha aceptado venir!
Grace soltó un gruñido
-Está bien -aceptó -contad conmigo.
-¡Gracias! ¡Eres la mejor!
-Eso es verdad
Convino Grace dándose méritos. Los chicos ya no tocaban. Sólo charlaban agrupados en una esquina mientras Michael rasgaba unas notas al azar en su guitarra. Calum tenía una botella de agua en una mano y gesticulaba, explicándole algo a los demás que lo escuchaban con atención. Continuaron así un rato más mientras Chloe le contaba a Clarke alguna historia sobre su adorado universitario. Grace cerró los ojos, suspirando, exhausta. ¿Era realmente buena idea salir con aquellos chicos? La verdad era que las cosas sobre Ashton iban sobre ruedas y tenía la oportunidad perfecta para salir por ahí ¿Por qué no aprovecharla? Lo malo de tener grandes planes era que a veces se te olvidaba que podían estropearse por el más mínimo detalle. Como que tu madre estuviera de vacaciones en Cancún por su luna de miel y tu hermano necesitara la casa para organizar una cena romántica con su irritante novia. Exacto, su hermano también tenía planes. Planes en los que ella no encajaba.
-¡Vamos, Grace! Puedes dormir en casa de Sophie o de Clarke
Había refunfuñado Chris aquella tarde. Grace lo miró impasible. Fría como el hielo. ¿Podía quedarse? No. No aquella noche precisamente. Sophie probablemente dormiría en casa de los chicos, como siempre y en cuanto a Clarke, bueno, su madre la adoraba y era como de la familia pero eran 5 hermanos y su casa no era precisamente espaciosa. Si las cosas le iban bien a Chloe probablemente hubiera un huésped aquella noche en su casa. ¿Qué se suponía que iba a hacer? Se tumbó en la cama boca arriba y se quedó unos largos minutos mirando el techo blanco con estrellitas que brillaban en la oscuridad pegadas, como si allí se hallara la solución a todos sus problemas. Aunque decidiera no ir a la cita, seguía sin tener dónde dormir, así que cancelar su asistencia no solucionaría nada. Y desde luego no iba a dormir en casa del chico-al-que-no-conocía-y-con-novia. Se frotó las sienes y cerró los ojos, angustiada. Sabía que aún le quedaba una opción, y bastante buena, aunque no quisiera admitirla. A fin de cuentas, todos eran sus amigos en el chalet blanco, y no había padres ni adultos responsables allí. Además podía apañarselas fácilmente para dormir con Sophie y enviar a Michael con cualquiera de los otros. Resignada, cogió las llaves de Tobias y salió por la puerta en dirección a su mayor pesadilla.

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Bueno, sé que es corto el capítulo pero es que últimamente me han ido mal las cosas y no estoy ni física ni psicológicamente en condiciones de escribir. Tenía esto escrito desde hace tiempo así que lo subo para no haceros esperar más. Intentaré subir lo antes que pueda, y en el próximo capítulo pasarán cosas importantes. Comentad y votad si os ha gustado, gracias😘

La Química del Amor Jóven (5SOS Fanfic.  Ashton & tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora