Capítulo 1

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Capítulo 1: El inicio del odio.

Ambos clanes enemigos estaban luchando en aquel valle. Había muchas bajas, así como los cadáveres llenaban el lugar. Pero los Senju tomaban la delantera, provocando gran tensión a ambos líderes Uchiha, el mayor peleaba con el jefe del clan enemigo, mientras su hermano entablaba una lucha contra el albino. Era una pelea muy balanceada.

Izuna miraba a Tobirama con su espada en mano, jadeando leve por la intensidad de la pelea. Corrió a atacarlo, mientras el albino con su espada desvió aquel ataque. El azabache activó inmediatamente su Sharingan viendo directamente al Senju a los ojos, éste cerró los ojos, sintiendo el golpe así como la patada que le propinó aquel, lo mandó a volar lejos.

—  Elemento Fuego: Jutsu Bola de Fuego —Dijo el mayor, mientras lanzaba en dirección a Tobirama, llamas que salían de su boca. Al verlo, el albino se asustó un poco haciendo unos sellos de manos.

— Elemento Agua: Jutsu Dragón de Agua —El mayor pronunció para contratacar, ambos ataques al chocar provocaron una cortina de humo que aprovecho el menor para lanzar varios kunai en dirección al Uchiha. Con ayuda de su Dojutsu los esquivo con suma facilidad.

— “Atacas a ciegas, ¿eh? Es una desgracia no tener un Sharingan…” —Detuvo su platicar al notar rápidamente un Tobirama parpadeando frente a él. Se vieron unos segundos a los ojos.

— ¡Corte de Trueno Volador! —Exclamó el albino. Atravesó con su espada el costado del pelinegro mientras este abría los ojos sorprendido, unos segundos después tosió sangre amenazando con caerse.

— ¡Izuna! —Una segunda voz apareció en escena, cargando al herido—. Aguanta, te salvaré —Tobirama volteó a ver en dirección a ambos líderes, sentía cierta pena por su rival, pero negó con la cabeza, jadeando un poco. Su clan era primero. El castaño apareció en frente de Madara, levantó la espada mientras el cuervo mayor lo miraba amenazante—. Hashirama.

— Madara, no puedes ganarme —Le dijo decidido mientras todos estaban expectantes, en eso, el Senju mayor levantó su mano y clavó la espada en la tierra, sorprendiendo a todos—. Terminemos ya, si los ninjas más poderosos, Uchiha y Senju se unen, los otros países no podrán encontrar clan que se enfrente a nosotros. En todo caso, la lucha habrá terminado. Vamos —Le extendió la mano, en señal de Alianza, el líder del Clan se sorprendió, por la propuesta del mayor. Se puso a pensar en la propuesta que él le hacía, evitando sonrojarse. Pero se debatía si debía aceptar o no. Recordó todas aquellas imágenes de su infancia, dando un paso hacia Hashirama, pero el pelinegro apoyo fuertemente sus pies en el suelo.

— No lo hagas, hermano —Dijo Izuna viendo débilmente al Senju.

— ¡Izuna! —Exclamó preocupado Madara viendo preocupado al chico.

— No te dejes engañar —Le pidió para seguido toser un poco de sangre.

— Izuna… —Detuvo su hablar, con un tono de voz preocupado para darle espacio al menor.

— ¿No lo olvidaste? ¿A todos los Uchiha que mataron? —Trataba de hacerlo entrar en razón, para que no hiciera ningún acuerdo con el Senju. Madara miraba a su alrededor dudoso, viendo cientos de cadáveres pertenecientes a su Clan. Pero el estado de su hermano era grave, así que suspiró.

— Acepto la Alianza, si curas a Izuna —El Senju asintió con la cabeza, mientras el mencionado y el albino miraban sorprendidos a ambos Shinobi. El cuervo menor estaba furioso pero no le quedaba más que acatar.

Hashirama se acercó a Izuna, mientras Madara lo dejó recostado en el suelo. El castaño empezó a curar al joven, el cual tenía un estado crítico. Tobirama se limitaba a ver, con cierto deje de culpabilidad, él había al fin herido de gravedad a su eterno rival, pero por una razón no se sentía satisfecho, se sentía mal por haberlo lastimado, ¿qué le pasaba en su cabeza? Era hilarante que se preocupara por el pelinegro, era demasiado absurdo, siempre habían sido enemigos, pero en cierta parte, le atraía el espíritu del Uchiha. Lo sentía de una forma rebelde, pero se limitó a decir nada y ver cómo era curado por su hermano mayor.

Al finalizar, el azabache se levantó lentamente con una mirada de odio puro. Se sentía derrotado, su orgullo destruido y su hermano haber sido engañado por aquel líder del rival clan. Lo peor de todo: Sentía su honor decaído al haber sido herido gravemente por el albino. Si hubiera sido más inteligente y ágil, su hermano jamás habría aceptado ese trato absurdo a su criterio, su odio especialmente iba dirigido hacia aquel chico de cabello blanco, le fastidiaba en gran medida.

Madara y Hashirama estaban conversando acerca del tratado de paz, el cese a la guerra entre ambos clanes, Tobirama trató de acercarse a Izuna, pero él al verlo cerca, se alejó inmediatamente con una mirada de desprecio. El Senju se limitó a ver como el chico se alejaba de él. Se sentó en el suelo, esperando por su hermano, esto iba a ser complicado.

-DÍAS DESPUÉS-

Ambos clanes se regocijaban por el cese a la guerra entre ellos y la firma del tratado de paz, agradecían a ambos líderes mientras las casas celebraban a lo grande, todo menos cierto Uchiha que desde aquel día, su semblante era más frío. Para como lo criaron, esto era muy humillante, así como estúpido. Su hermano mayor lo había tratado de convencer que mostrara una actitud menos despectiva respecto a los Senju, pero la testarudez del menor era grande. Madara se sentía agradecido con Hashirama por haber salvado a su hermano menor, todo el Clan aprobaba la Alianza.

Izuna caminaba por un acantilado, sintiéndose mal por varias circunstancias. No le agradaba la idea de convivir con gente que mató buena parte de su familia, así como mermar su Clan en buenas cantidades. Consideraba todo muy desesperado por su hermano, si él hubiera muerto, hubiera salvado a su hermano de los efectos del Mangekyou Sharingan. No temía para nada la idea de morir, la recibía con brazos abiertos, más en este momento que había sufrido tal humillación.

Sumido en sus pensamientos, no notaba cierto albino que lo vigilaba a una distancia prudente, la actitud de su viejo enemigo se había tornado más oscura, y en cierta parte le daba miedo que este intentara algo para dañar a los demás. Pero no estaba exactamente espiando al mayor por miedo, lo estaba espiando para encontrar una forma de obtener su perdón. Por alguna razón extraña, sentía una opresión en su pecho, cómo si necesitara saber más acerca de su archirrival, a veces, sentía que era obra del remordimiento de casi haberlo matado. Si no fuera por Hashirama, lo más seguro es que hubiera muerto.

Pero la actitud que mostró este aquel día, era como si prefería mil veces haber caído muerto sin importarle el impacto psicológico que hubiera sufrido el mayor de los Uchiha. Al creer que había vigilado lo suficiente se mueve de regreso al Clan Senju,  ahí la gente seguía fiesta, pero a él no le importaba nada de eso, era como si fuera una cosa sin mucho motivo para hacer alguna revuelta.

Sólo era el inicio, el inicio de su camino hacia la locura.

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Algo corto pero aquí dejo el primer capítulo 7u7 espero les guste

Das Sie Blau Werden [IzuTobi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora