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Me acomodo en la silla de la cafetería esperando pacientemente que Gemma ordene su comida. La observo detenidamente, su cabello es rubio, la parte de la raíz es castaña provocando un degradado que me gusta demasiado a ella se le ve bien, sus ojos son como los de Harry pero mas oscuros. Es una chica realmente hermosa.

Cuando el camarero se marcha posa sin perder tiempo sus ojos en mi. Me siento incomoda o intimidada, nunca pensé conocer a la familia de Harry tan rápido menos en estas circunstancias pero me pone ansiosa toda esta situación. 

Sus ojos están, sin embargo, tristes y apagados. 

—¿Eran cercanos?—me atrevo a preguntar luego del silencio.

—Si. Bueno desde que me fui a Canadá no supe mucho de él, a veces trataba de llamarlo pero simplemente me ignoraba, desde que termino su carrera se puso distante y cerrado hasta que se mudo hasta acá, mamá quedo devastada porque ni siquiera dijo adiós—dice melancólica. Alzo las cejas ante lo que acaba de decir. Parece darse cuenta de mi reacción—. Ya veo Harry no te ha dicho eso... ¿te ha dicho algo de su vida en realidad, Aledis?

Me encojo de hombros avergonzada. El chico llega con nuestros pedidos y ella empieza a comer.

—Es muy reservado, demasiado para ser joven. Nuestro padre nos abandono se fue con otra mujer y no sabemos su paradero hasta el día de hoy, con ello se llevo al Harry alegre, en todo caso Aledis ¿como te puede gustar Harry?

—Oh no...

—No me mientas, cariño—se suaviza—También he estado enamorada, y soy una chica. Me pareces muy buena no te has separado de él ninguna vez, eso debo darte las gracias estoy segura que Harry estaría agradecido.

—Harry es extraño, con sus sentimientos y emociones... Aun así lo quiero —mi voz se apaga, entonces unas inmensas ganas de llorar me atacan. Me las aguanto—¿Qué estudió Harry?

Cambio de tema. Ella sonríe—: Psicología.

—¿Psicología?... ¿porqué se dedica al boxeo?

—Ni yo lo sé. Mi hermano es una caja de sorpresas. 

—Él es maravilloso dibujando Gemma—digo recordando sus dibujos. Entrecierra sus ojos hacia mi y sonríe.

—Eres muy especial para que él te haya dejado ver sus amados dibujos.

—Bueno la situación no fue muy así...—respondo recordando que su cuaderno de le cayo—Pero me regalo uno.

Asiente sonriente. Charlamos un poco mas para descubrir que le encanta la moda, estudia diseño, hizo un curso en mercantiles en moda y piensa tomar periodismo. Es una chica bastante inteligente y astuta, tiene grandes planes para su futuro. En el amor no le ha ido lo suficientemente bien; pero me dijo que su ex es nada menos que Liam y verlo nuevamente luego de tantos años le provoco una leve alegría.

Entonces el interrogatorio empieza hacia mi.

—¿Qué estudias?

—En un mes más entro a estudiar obstetricia.

—¡Oh! es algo muy lindo esa carrera—sonrió. Me emociona mucho estudiar algo que me encanta—¿Vives con tus padres?

—Solo con mi madre, mi padre desapareció.

—Ah... ¿se fue al saber que venias en camino o...?

—No. Desapareció, de verdad desapareció—un nudo me amarra la garganta al tocar el tema—Él era militar, desapareció en Irak hace cuatro años. Ya sabemos lo que significa todas las esperanzas desparecieron a estas alturas...

—¡Lo siento, lo siento, lo siento!—exclama al verme. Me abraza con fuerza y esta vez si lloro. Este es un tema muy delicado para mi. 

En una hora mas nos vamos de la cafetería ya que la hora de visita en el hospital sera en quince minutos y ahí estaremos para ver a Harry, la caja de sorpresas: Harry Styles. 

Ese, el del bus |H.S|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora