Taetae

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Cuatro días habían pasado y Yoongi de curioso había buscado la caja por todas partes.
Para la suerte de Jimin, no la había encontrado.

Esa misma tarde Taehyung estaba en casa visitando a Jimin, como cada semana. Ambos eran muy buenos amigos con mucha cercanía, muy de piel.
Yoongi sabía la relación de amistad de éstos, pero no podía evitar ponerse celoso cuando el alto lo abrazaba de esa manera, con tanta libertad. Un sentimiento lo consumía por dentro al ver que Jimin sonreía de esa manera y no era hacía él.

Por lo que no los dejaba solos en ningún momento e intentaba todo el tiempo de llamar la atención de éste.

—Jiminie~ por accidente me corté un dedo — Levantó su mano mostrando su dedo y haciendo un leve puchero.

Jimin fue al baño a buscar el botiquín y sacó una curita con diseños de Kumamon para ponerla en el dedo de Yoongi. Taehyung lo miraba y sonreía con gracia. Taehyung podía ser muy torpe, pero no era tonto. Él sabía las intenciones del mayor, por lo que decidió molestarlo un poco.

—Jiminie~~

— Ey, solo yo puedo decirle así a mi novio— Yoongi hizo gestos con su rostro mientras hacía énfasis en el ''mi''.

Jimin miró con confusión a Yoongi para luego dirigirse a su amigo — Dime, Taetae.

—Tengo mucha hambre Jiminie~ — Taehyung ignoró al mayor volviendo a usar el mismo apodo para dirigirse al más bajo — ¿Por qué no cocinamos algo juntos?

— Si, buena idea.

Taehyung sonrió y arrastró del brazo a su amigo hasta la cocina, con Yoongi detrás de ellos.  Luego de unos minutos se decidieron por preparar Lasaña.
El mayor tiró levemente del borde de la camiseta de Jimin para que éste lo mirara.

—Jiminie creo que tengo algo en el ojo y me molesta, ¿Puedes ayudarme?

—Déjame ver, abre bien... —Jimin tomó entre sus manos el rostro del mayor acercándose para lograr ver mejor.

Yoongi sonrió y lo jaló levemente para darle un beso aprovechando la corta distancia.
Taehyung río para sus adentros y prosiguió con su malévolo plan.

—Jiminie~ ¿Está bien así la salsa? —Nuevamente obtuvo la atención del peligris quien se acercaba al mesón para degustar el contenido dentro del bowl.

Yoongi bufó. Se le estaban agotando las ideas, pero no se daría por vencido. Tampoco era tonto y se había percatado del pequeño juego de guerra que estaba jugando el amigo de Jimin. Taehyung tenía esa personalidad melosa y aniñada que lograba captar muy bien la atención del peligris, pero había algo que el rubio no podía hacer. Con una sonrisa triunfante se acercó por la espalda de Jimin rosando sigilosamente su miembro con el trasero de éste, mientras se estiraba hacia el mueble para sacar un plato.
Jimin dio un respingo y se estremeció ante el rose, girando su rostro levemente sonrojado para mirar a Yoongi con cara de "Aquí no. Hay visita presente".

—Oh, lo siento, quería sacar un vaso y... ¿En qué les puedo ayudar? —Con fingida inocencia el pelinegro sonrió ladeando levemente el rostro.

—Bueno, podrías lavar los platos sucios —dijo el menor apuntando hacia el otro lado de la cocina. Entre los tres Jimin tampoco era tonto y se había percatado del jueguito de ambos, pero contrario a molestarle, le parecía gracioso por eso solo les seguía la corriente.

El mayor volvió a bufar y se dirigió hasta el lavaplatos arrastrando los pies. 

—Ésto está listo, ahora solo queda esperar unos minutos — Taehyung metió la lasaña en el horno y sacudió sus manos —Jiminie, ¿Puedo hablar contigo un momento? En privado...

Jimin asintió y ambos se dirigieron al dormitorio.

Apenas Yoongi escuchó eso comenzó a lavar los platos a la velocidad de la luz. Luego de unos minutos terminó y se dirigía a la habitación donde estaban ambos. No iba a entrar, sólo escucharía la conversación a través de la puerta. Cuando iba a mitad de la escalera un sonido raro, pero muy familiar llegó a sus oídos, el sonido se repetía a cada segundo y salía de la boca de Jimin.
A su mente le sonaba como a gemidos.
Un escalofrío recorrió el cuerpo del pelinegro y una imagen para nada agradable pasó por su cabeza.

Corrió escaleras arriba abriendo la puerta de golpe y encontrándose con Taehuyng arriba de Jimin, sobre la cama y sus manos recorriendo su espalda.

--¡¿QUÉ...?! ¿qué es lo que hacen?

--Mira Yoongi hyung, Taetae hace unos días fue con Minjae, un amigo de él, a un spa y ahora quiere practicar conmigo para luego hacerlo a Hoseok, en unas semanas cumplirán cuatro años de relación.

Yoongi apartó a Taehyung de Jimin y se sentó tras éste para rodearle con sus brazos y piernas en un abrazo de oso.

—Jiminie~ me siento mal, muy mal, creo que me voy a enfermar, tengo mucho frío...

El peligris reprimió una risa y se levantó para acostarle sobre la almohada, fue por unas mantas al armario frente a ellos y buscó en los cajones de más abajo dejando al pelinegro con una clara vista de sus glúteos cubiertos por unos jeans ajustados.

"Padre nuestro que estás en cielo..." rezaba Yoongi intentando calmarse para no hacer nada indebido, esperando ansioso a que Taehyung se fuera para poder tener un momento de privacidad con su novio.

—Hoy hay una fiesta en casa de unos amigos, yo iré con Hobi. Tu irás también, ¿Verdad Jimin?.

—No lo sé... Hace tiempo no voy a una...

—Por favoooor... -- dijo el alto dejándose caer sobre sus rodillas en el suelo alfombrado y abrazando al menor por la cintura, mirándole desde abajo como un niño con cara de perrito mojado.

Jimin ladeó la boca y lo pensó por un minuto —Está bien, está bien, iré. Supongo que no estaría mal, después de todo hace tiempo tengo ganas de bailar...

—Yei~ — el castaño levantaba ambos brazos celebrando con su peculiar sonrisa.

—Yo también voy.

—Tu no puedes, estás enfermo. Tienes que quedarte haciendo reposo.

—Dije que yo igual iré. — sentenció el pelinegro — Solo voy a tomar un poco de medicina, dormiré unas horas y estaré mejor — seguía fingiendo.

Taehyung ya satisfecho y a gusto, se detuvo en molestar al mayor, dejándolo por fin en paz —Está bien, ¡Entonces iremos todos! 

Little Cat | YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora