Little Cat | Yoonmin

Hospital

Siendo una decisión clínica, debido a la perdida de sangre y a la gravedad de la situación, los médicos llevaron a cabo una transfusión de concentrados de glóbulos rojos al paciente recientemente ingresado durante la madrugada. Luego de una hora en la cual se le realizaron múltiples exámenes, éste fue trasladado aún en estado inconsciente a una sala más calma en donde pudiera descansar y continuar con el tratamiento por unas horas más. 

Pasadas las 8:15 horas de la mañana, Jimin logró abrir sus ojos, viéndose rodeado de 4 paredes blancas y en una camilla junto a una aguja insertada en una de sus manos. Un poco confundido intentó tomar asiento pero un repentino e intenso dolor en su espalda baja, hicieron que volviera a su posición inicial, junto a una mueca de dolor y un quejido proveniente de su boca.

En un intento por recordar como había llegado hasta ahí cerró los ojos tratando de pensar con claridad, pero entonces colores negros y rojos invadieron su mente para luego dar paso a la clara imagen de Jungkook sobre el. El impacto del recuerdo reciente y de lo que ahora se encontraba escrito como parte de su vida lo hizo soltar un sollozo inmediato, comenzando a llorar en la calma de aquella habitación de hospital.

Sintió impotencia.

Se sintió débil y vulnerable.

No solo habían abusado de su cuerpo, sino que también le habían causado un daño tanto psicológico como emocional. Ahora tendría que cargar con el dolor de ese hecho por el resto de su vida. Y eso era mucho tiempo, Jimin era aún apenas un chico en sus veintidós años.

Entre sus dientes su labios eran aprisionados, intentando acallar su llanto desconsolado.  Comenzó a tocar sus manos y a recorrer su propia piel lánguidamente, sintiéndose sucio.

Con su llanto ya más apaciguado dirigió su mirada a un reloj colgado de la pared frente a él, viendo que apenas eran las nueve de la mañana cuando la puerta fue abierta llamando la atención del chico. Una enfermera había entrado al cuarto para verificar su estado. La chica al ver que había despertado al fin, le dio una cálida sonrisa mientras escribía en una hoja el avance del tratamiento.

—¿Te sientes bien? —ante el silencio prosiguió hablando — Daré aviso de que ya estás despierto —dio media vuelta y se retiró del lugar en silencio. 

Jimin tenía un montón de dudas y no sabía a quien preguntarle exactamente por respuestas.

Unos minutos después la puerta fue abierta nuevamente de forma lenta. Jin se asomó a la habitación y se dirigió a tomar asiento junto a la camilla con una débil sonrisa.

Jimin bajó su mirada hacia sus manos sobre su torso, haciéndose un silencio en la blanca habitación durante casi un minuto. Aún sin mirar a Jin inhaló suavemente —¿Qué fue... qué fue lo que sucedió?—su voz salió apagada y casi en un susurro.

El pelirosa estiró una de sus manos posando ésta sobre las pequeñas manos de Jimin, inhalando profundamente mientras cerraba los ojos por un momento. Dio un leve apretón y dirigió sus ojos a la perdida vista del menor —Verás pequeño...

Flashback  

Jungkook escucho el estruendo de la ventana rota en la primera planta, se alejó de Jimin y tomó una navaja que se encontraba en la mesa de noche junto a la cama. Salió del cuarto con sus pantalones puestos y apenas lo hizo un puñetazo directo llegó a su rostro, soltando la navaja y llevando ambas manos a su cara. Namjoon pateó el arma blanca alejándola de éste, para luego comenzar a golpearlo seguidamente lanzando a Jungkook al suelo y sin detenerse, seguía moliéndolo a golpes.