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Omniscientirijillo:

—Demonios, eso estuvo muy cerca. —Tyler jala sus cabellos mientras ambos terminan de empacar sus maletas.

—Debemos decirles. —Suelta entonces Josh. —Es que tiene razón. —Dice doblando una camiseta negra y colocándola en el maletín café. Tyler niega con su cabeza y sus manos.

—Ni creas... Mira...

—No puedo hacer esto. Ni tú deberías, ahora que lo pienso. —Bufa amistoso y sigue en su asunto, mientras el castaño lo observa. —No podemos hacerle esto a Jenna y no vamos a hacerlo.

—Pero no podemos... —Tyler quería decir "no podemos arruinar mi matrimonio ahora" pero sabía que haciendo esto, él mismo lo estaba ya jodiendo. —No ahora, ¿Sí? No cuando tenemos tanto por delante. Mañana vamos a Rusia... Hombre, ¡Rusia! 

—Eso no quita que estemos haciendo mierda todo. —Josh alza la vista y se miran serios por un par de segundos, deteniendo cualquier rastro existente del tiempo, pero luego el tintado niega y vuelve su vista a su ropa. —No quiero dejar las cosas así, y no lo digo por egoísmo, sé que quieres a Jenna, pero, no quiero dejar que esto lo des por alto.

—¡Y no lo voy a hacer!

—¡Eso es exáctamente lo que vas a hacer!

—Dame tiempo. —Rogó.

—Mira, lo que va a pasar es que, como dijo Mark, se van a enterar, ya habremos jodido todo para ese entonces, me vas a dejar por Jenna. —Aquellas palabras dolieron tanto en la garganta de Josh cuando tuvo que arrastrarlas hacia fuera. Y Tyler detuvo sus acciones. Porque tal vez era algo cierto. —Y luego ella dirá que es demasiado tarde... Estamos jodiendo todo, Tyler, todo. —El teñido posa sus manos en sus sienes y luego tira de sus cabellos con fuerza, haciendo una exclamación entre dientes. —No es como joder nuestras vidas y ya, ¿Qué hay de todo?

—¿De todo?

—No es sólo algo de lo que se entere la familia. Medio mundo estará involucrado en lo que sea que pase. Medio mundo sabrá... —Josh paró para hacer respiraciones profundas y calmarse un tanto. No quería más ansiedad. —No quiero que todo termine mal.

—La carrera y la vida personal son cosas distintas.

—No cuando tienes fama, Ty. Nunca.

(FUERA DE MI CASA SE ESCUCHARON DOS BURROS GIMIENDO :0!!!)

—Sólo... Dame un mes para pensar en qué hacer...

—Tyler...

—Un mes, ¿Qué te cuesta darme un maldito mes de tu calendario? 

l-/

—Te amo. —Tyler toma la nuca de su esposa y la acerca para besarse, manteniendo su mano libre en la agarradera de la maleta. —Te veo en una semana. —Tyler guiña, haciendo una caricia por la mejilla de Jenna y se despiden para que el castaño avance en la fila de revisión de su pasaporte.

l-/

—¿Crees que sean muchas las entrevistas? —Murmura Josh, acomodando su cabeza contra el asiento del avión y Tyler se alza de hombros. —Pensaba hacer un día de turismo.

—No es turismo, es trabajo.

—Ni is tirismi, is tribiji.

—No... —Tyler enrolla el folletito con los instructivos de seguridad. —Me arremedes. —Le golpea con éste a Josh en el brazo.

—Basta, ¡Basta! —Se ríe, tomando otro folleto y de igual manera golpeando a Tyler.
Hace mucho no viajaban solos. El Staff suele irse en vuelos distintos y Mark ahora está en un asiento algo separado.

—Quiero beber cerveza Rusa. —Declara el castaño.

—Yo quiero besar chicas rusas.

—¡Josh! —Exclama y le golpea una vez más con el folleto, carcajeándose.

—¿Celos?

—Ya quisieras. —Se indigna, mirando un poco por la ventana.
El teñido piensa en tomar su mano, que está a prácticamente nada de la suya, piensa acariciarle el dorso y sentir sus suaves nudillos, piensa en tocarle la mano como si aquello fuese la acción más erótica pasando por su cabeza.
Lo va a hacer, cuando una adolescente de unos dieciséis años se les aproxima, tiene cabello rubio y acomoda sus lentes azules. Muestra una sincera sonrisa, enseñando sus brackets y saludándoles.

—N-no puedo creer que sean ustedes. —Exclama con júbilo y al instante Josh desenfoca la mano de Tyler para mirarla. 

—Hola. —Sonríe el tintado con cierta calidez característica. —¿Cómo te llamas?

—S-soy J-Julia. —Trata de decir calmada, pero un gritito le sale de entre los labios. —¿Puedo tomarme una foto con ustedes?

—Claro.

—Claro. —Reafirma Josh y la pequeña se acerca a ambos, sosteniendo su celular, intentando no temblar y captura el momento. 

—De verdad, g-gracias. —Tamborilea sus dedos con uñas rosadas contra su celular con funda de igual color. —Su música me ha... Me ha ayudado con mi ansiedad y, y con mi vida en general. S-son realmente mis ídolos. No pensé que hubiera más gente como yo, o que me comprendiera... Muchas gracias por mantenerme en este lugar. —Dice y los dos entienden que se refiere a mantenerse con vida.

—Un placer. —Sonríe amplio Josh y estrecha su sudorosa manita. 

—Eres importante, recuérdalo. —Guiña Tyler confiado y la niña se despide para dejarlos a ambos con una ligera sonrisa en su rostro. —Estas cosas son las que me hacen continuar.

—Ya... Ya lo sé. —Reafirma Josh. —Es maravilloso. —Sonríe y aprieta un poco la rodilla del menor y luego su mano. Una sonrisa mutua les basta, no necesitan besos, no necesitan malgastar palabras, ni argumentos. Ellos se entienden. Y eso es suficiente.

l-/

—¡And I'll be holding onto you! —Exclama Tyler tratando de no desmayarse por tanto esfuerzo. Inclina su cuerpo hacia sus lados y sostiene manos al azar del público. Es un tremendo festival, la puesta del sol está frente a sus ojos y la música es tan fuerte.
Sólo puede rogar con sus palabras que su vida no se esfume, que no sea un sueño y al día siguiente despierte en la cochera de su casa, componiendo sin gente que le preste atención. Sin nada. Pero los coros de todas aquellas personas le hacen desvanecer sus pensamientos, trayéndole otros nuevos. Ruega por encontrar una solución. Tiene un mes para encontrar una solución, para decirle adiós a Josh y olvidar todo lo ocurrido desde esa maldita noche en la que tuvo que ir a casa de Brendon y ponerse ebrio. No, lamentaba desde aquella maldita noche que se puso ebrio en casa de Josh y, fingió no estar consciente de sus actos para evitar incomodidades, en vez de decirle a su amigo "Lo sé, sé que me besaste anoche".
Tyler quería mucho a Josh pero era jodidamente difícil. Y no le quedaba más que cantar.



Behind Øur Reality [#FueledByPremios2017]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora