Capitulo 28

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Narra ________:

-Señorita ________ su novio la esta esperando abajo. -dijo Candy.

-Dígale que enseguida bajo.

Peine un poco mas mi cabello frente al espejo y me coloque un poco de brillo labial, cojí mi bolso y salí de mi habitación, ahí estaba Fernando, tan guapo y elegante como siempre.

-Hola cielo. -beso mis labios cortamente. -Estas hermosa.

-Gracias, igual tu cariño.

-Si lo se, ¿ya nos vamos? -yo asentí, entrelazo nuestras manos para dirigirnos hacia afuera donde estaba estacionado su BMW negro, me abrió la puerta como todo un caballero y condujo hacia su propia fiesta.

-No tenias que venir por mi, la fiesta es en tu casa.

-Si pero tengo que presumir a mi linda novia, ¿verdad? -Yo me reí ante su comentario.  -Ademas Konny se esta encargando de todo.

-¿Hay mucha gente?

-No sabes cuanta.

-Felicidades Sr. presidente del consejo estudiantil. -Bese cortamente sus labios mientras el conducía.

Fernando me sonrió y estaciono su auto en la cochera de su mansión, bajamos y si que había mucha gente, bueno teníamos que festejar que había ganado las elecciones, esta seria una buena noche, en tanto no se aparezca el idiota de Casanova.

Cuando entramos de la mano todos felicitaron a Fernando, el Dj ponía muy buena música, había mucho licor y gente bailando por toda la casa.

Bailamos un poco, Emilia no se separaba de Konny ni un instante, el y Fernando eran los mejores amigos y también los chicos mas populares de la academia.

Fernando y yo bailabamos todo el tiempo pero el estaba bebiendo demasiado, debe ser por la emocion de haber ganado.

-Fernando ya basta, suficiente vodka ¿No crees? -dije mientras bailamos.

-¿Que pasa nena? hay que celebrar.

Gire mi cabeza hacia el lado derecho, justo en donde estaba la barra de licores, vi a Agustin junto con Marcos bebiendo felizmente.

Trague saliva cuando el me miro fijamente y levanto su vaso como brindando por mi, luego sorbió de el con amargura.

Fernando me beso de repente.

-Mi amor, ven conmigo, vamos a mi habitación. -estaba ebrio, lo oi en su voz.

-Fernando estas ebrio.

-Shhh, ven preciosa, debo enseñarte algo. -me cojio de la mano y me saco de la pista de baile,

Agustin aun me miraba y yo a el. Fernando me abrazo por la cintura mientras subiamos las escaleras, llagamos a su habitacion.

-¿Que ocurre? - le pregunte, el cerro la puerta detras de el. -¿Por que la cierras?

-Para tener mas privacidad.

De repente me tomo de la cintura y me beso salvajemente, le respondi el beso, era agradable pero no me gusto cuando me recosto en la cama y comenzó a tocar mis muslos.

-Fernando espera. -le dije un poco asustada.

Vi como se puso de pie y saco un condon de su pantalón, lo mire asombrada.

-¿Que... que pretendes? -tartamudee.

-¿Que mas? tener sexo contigo, eres mi novia y ya espere demasiado. -dijo fastidiado.

Me puse de pie rapidamente.

-¡Estas loco! No pienso hacerlo ahora, mucho menos aquí, además estás ebrio. -le dije ofendida.

-________  ya estoy cansado de esperarte.

-Fernando respétame un poco.

-Mi amor. -Se acerco a mi y me callo con un beso.

-No, olvidalo -me aleje de el y camine hacia la puerta pero me detuvo casi al instante cojiendome fuertemente del brazo.

-Ya estoy harto de tus niñerías ________, lo haremos aqui y ahora, te guste o no.

-No, suéltame.

Forcejee con el un rato pero luego supe que era mas fuerte que yo por que de un solo empujon cai sobre la cama como una pluma.

Tuve tanto miedo cuando se subio sobre mi y me empezó a besar el cuello desesperadamente y a desabotonar mi vestido a la fuerza.

Este era el fin, Este era el verdadero Fernando Vázquez.

-¡No Fernando, suéltame! ¡Basta!- dije en medio de mis lagrimas.

El apreto mi trasero en sus manos y enseguida se quito su camiseta.

-Ahora vas a sabes lo divertido que es el sexo mi amor, te gustara. -sonrió cínicamente.

-¡Suéltame! Por lo que más quieras. -le dije sollozando.

El hundio sus dedos en mi cabello y beso mis labios con decesperacion, parecia muy ancioso y yo un trapo sucio a su lado.

Subió mi vestido y sus dedos jugaron sobre mi ropa interior amenazando con entrar.

Entre lagrimas decesperadas y mis gritos nadie podia oírme, mi frutsracion crecía con el paso de los minutos, mi novio quiere abusar de mi.

Escuche que alguien forcegeaba la cerradura de la puerta, olvide que tenia seguro y grite mas fuerte.

De repente como un ángel caído del cielo la puerta se abrio de golpe de una fuerte patada.

-Dijo que la soltaras, hijo de puta. -esa voz la conozco.

Agustin cojio a Fernando a la fuerza y lo quito de encima de mi para darle un buen golpe en la cara, Fernando se tambaleaba en si mismo, estaba muy borracho, apenas podia pelear.

Agustin le estaba dando una buena paliza. Me levante como pude en medio de mis lagrimas, me di cuenta que mi vestido estaba totalmente arruinado.

Agustin me miro fijamente de pies a cabeza y sin dudarlo se saco nuevamente la chaqueta.

-Póntela. -me ordeno y le hice caso. -Y tu imbecil, esto es para que aprendas a respetar a una mujer. -le dio una ultima patada en el abdomen y luego volvio a mirarme. -Vámonos de aquí.

Malas Enseñanzas (Agustin Casanova & Tú) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora