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Parte 16

Colin se despertó con un gran dolor de cabeza. Al parecer había bebido de más en su fiesta de aniversario. Intentó recordar todo lo que había pasado, recordar porque había tomado tanto como para emborracharse, y recordar que era aquello que le había dejado la sensación de que había cometido un error. 

Se había peleado con Helén, por eso se había emborrachado. Ella había creído que él estaba celoso de Geoff. ¿Cómo podía pensar eso? ¿Cómo no podía confiar en él? Él amaba a Helén y estaba feliz de festejar sus años de casados. Geoff simplemente le caía mal. Y recordando eso, de hecho recordó lo que lo había dejado mal, había cometido el error de decirle a Jennifer que le caía mal Geoff y ella había reaccionado mal. No entendía porque Jennifer se había enojado, cuando él simplemente había querido ser buen amigo y ser sincero con ella. 

Se levantó de la cama, se dio una ducha, y fue a la cocina para prepararse el desayuno. Pero para su suerte su mujer ya tenía todo en marcha, y lo primero que hizo al verlo fue darle una taza de café. 

- Gracias. - Agradeció él, aceptando la taza. - ¿Estamos bien? - Preguntó después de unos minutos de silencio.

- Eso creo. - Dijo ella, y soltó un pequeño suspiro. - Perdón, no soy buena compartiendo a las personas que amo. - Se disculpó por la escena de la noche anterior.

- Tranquila, no estoy enojado y acepto tus disculpas. - Dijo con sinceridad. - Perdón si cause celos en ti, pero creo que te sientan sexy. - Bromeó. 

- ¡Colin, no todo es un chiste! - Exclamó ella retándolo, pero riendo a la vez.   

- Lo sé, perdón. - Asistió, aliviado al verla reír. - Pero de verdad, yo te amo y debes confiar en mi. - Pidió él. 

- También te amo. - Dijo ella y le dio un beso.

La reconciliación con su mujer resultó sencilla y eso lo hizo sentir en paz, porque no le gustaba pelear con ella. Él la amaba y quería que fueran felices juntos.

Lo que no resultó tan sencillo fue su reconciliación con Jennifer, lo cual le dolía. Estaban ambos en modo de ignorar al otro, y eso le hizo dar cuenta de lo mucho que apreciaba la amistad que tenían y lo difícil que era no hablarse. Él la ignoraba porque estaba ofendido de que ella se haya tomado a mal su sinceridad, y ella lo ignoraba porque seguía enojada por su sinceridad o porque no le gustaba la idea de que a él no le guste su nuevo novio. Él no entendía que había de malo en lo que él le había dicho. Siempre habían tenido una amistad cercana, donde podían expresarse y hablar libremente. Y eso había hecho él. ¿Qué había de malo en eso? Pero como no le gustaba no poder hablar con ella, finalmente decidió que lo mejor era hablar. Pero ella siempre encontraba una excusa para no hacerlo, así que decidió que quizás debía darle más tiempo. Esa mujer si que era complicada.

Estaban en el set grabando la escena que Killian oscuro dormía a Mérida y le decía varias cosas hirientes a Emma. Fue raro grabar esa escena estando peleados, él sintió que de alguna manera la estaba lastimando más a Jennifer que a Emma, y no sabía como eso podía tener sentido. Y Jennifer como siempre, era magnífica en esas escenas, sus lágrimas cayendo perfectamente de sus ojos y haciéndolo sentir un extraño dolor en el pecho.

- Jen, déjame que te maquille bien la mano, así pueden volver a grabar la escena. - Dijo la maquilladora. - 

- Claro. - Asistió Jennifer.

- ¿Qué te pasó? - Preguntó la maquilladora mientras observaba su gran salpullido  colorado.

- La verdad no tengo idea, hace un rato que me salió, debe ser alergia a algo. - Dijo Jennifer pensativamente. 

Al escuchar eso Colin supo exactamente lo que había pasado porque habían almorzado todo el cast juntos. Colin había visto a Jennifer servirse zanahorias, y ahora que lo pensaba las zanahorias estaban mezcladas con los pepinos, y ella era alérgica a los pepinos. Estaría en modo de ignorarse, pero no por eso la iba a dejar preocupada si podía ayudarla. Aparte él no quería que se siguieran ignorando, porque realmente era agotador no poder hablarse como siempre lo hacían.