Capítulo 56

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•DANIEL OVIEDO•
Los días pasan sin cesar. Han pasado tres semanas y aún sigo sin saber de ella. Se habrá marchado definitivamente y es lógico, no la creí, o más bien, no quise creerla.

-¡Eres estúpido Oviedo! ¡Dejaste escapar al amor de tu vida! -grita mi subconsciente

-Soy jodidamente estúpido -murmuro

Tocan la puerta suavemente y entra Jesús con una leve sonrisa.

-¿Perdido en tus pensamientos? -me pregunta

-Estoy intentando buscar una respuesta a lo indefendible -musito ocultando mi rostro

-¿Por qué no salimos esta noche y te despejas un poco? -aconseja

-La noche me recuerda a ella, el océano me recuerda a ella, las playas me recuerdan a ella -me detengo- todo me recuerda a ella, a mi ángel, a mi sirena -musito con un hilo de voz

-Evita recordar, te hace daño -me pide

-No recordarla me hace muchísimo más daño -susurro aturdido

Peino mi tupé lentamente observando el océano desde mi ventana.

«Definitivamente eres inmenso...a saber a dónde te la has llevado».

Escucho pasos a mis espaldas y siento un fuefte abrazo. La colonia Invictus de mi hermano penetra por mis fosas nasales y masajea mis hombros.

-No olvides que me tienes para todo -susurra antes de irse

-Gracias -musito cuando se marcha

Regreso mi mirada al cálido e inmenso océano. Las olas bañan la costa con furia y unas nubes grisáceas abundan el cielo. La tormenta prevista se aproxima.

«Kendall, ¿dónde estás?».

Una lágrima desciende por mi mejilla a velocidad de vértigo. La limpio con la yema de mis dedos y muerdo mi labio evitando formar un mar de lágrimas en mi habitación.

Decido darme una ducha para lidiar las tensiones que recorren mis músculos pero no consigo deshacerme de la imagen de su rostro de mi mente. No desaparece y desespero, desespero cuán yonki sin droga.

«La necesito. Ella se llevó las últimas fuerzas que me quedaban para seguir vivo».

Espejismo. [Daniel Oviedo] #PGP2017 #LDAW2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora