•KENDALL PÁEZ•
Los gritos de mi padre hacen que la ansiedad comience a apoderarse de mí. ¿Por qué no me deja ser feliz? ¿Tanto le cuesta entender que ya tengo 16 años y que no soy ninguna niña?-No lo entenderá, eres su única hija -susurra mi subconsciente
-Estúpida edad -maldigo murmurando
-¿Qué has dicho? -dice mirándome fijamente
-Nada, que voy a estudiar -miento
Bajo la mirada y la dejo fija en el suelo. Doy escasos pasos y su voz ronca me detiene.
-No he terminado -dice bruscamente
Me giro y observo sus ojos inyectados de furia, algo cálidos por el leve descanso de la discusión.
-¿Cuánto llevas con ese chico? -pregunta curioso
-No estamos saliendo, solamente es un amigo
-Un amigo con derecho a roce -aclara y suspiro- no me gusta para ti, parece más mayor, podría ser tu hermano -sugiere
Me da una arcada al escuchar ese comentario y sin venir a cuento, comienzo a reírme sin parar. ¿Qué me pasa?
-Tenga la edad que tenga, me respeta y tú deberías de hacer lo mismo, ¿por qué tienes la manía de juzgar por las apariencias? ¿No te cansas de hacer daño? -digo alzando un poco la voz
-No te reconozco, has cambiado -dice entristecido
-¿Aún no te has dado cuenta verdad? -río irónica- pero qué digo -río- ¿cómo vas a darte cuenta si estás todo el santísimo día ocupado con tu increíble trabajo, tu portátil y tu teléfono de última generación? Nunca tienes tiempo para mí ni para escucharme, ahora entiendo porqué mamá se fue
Las palabras salen de mi boca sin poder pensarlas siquiera y la tapo con mis manos cuando me doy cuenta de que el rostro de mi padre pasa de furia a nostalgia.
-Lo...lo siento papá, no quería... -las lágrimas brotan de mis ojos sin cesar y huyo a mi habitación sin mirar atrás
-¡Eres estúpida Kendall! -grita mi subconsciente
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Espejismo. [Daniel Oviedo] #PGP2017 #LDAW2018
Fiksi PenggemarPara los amantes de la fantasía y el romance. Para aquellos que anhelan la felicidad y sueñan con tenerla en sus manos. ¿Emprenderías este viaje conmigo? ¿Serás capaz de seguir el paso de una historia conmovedora, inigualable y entrañable? Dejémoslo...