Friends Or love

8. Cara a Cara

Cuando amaneció y vimos el brillante sol, nos metimos al auto de Andrew y esperamos durmiendo que dieran las ocho de la mañana aproximadamente, pero por causa del trasnocho nos despertamos a las once, Andrew se dio la tarea de dejar a Debby en su departamento y esperar que yo fuera por mis cosas para dejarme en mi casa antes de ir a la de el.

Cuando llegué mamá y papá estaban en la sala viendo la televisión, les deje un beso a cada uno y la promesa de que luego les contaría como me fue. Antes de irme a mi cuarto pase por el baño a lavarme la cara, los dientes, hacerme un chongo despeinado e ir a dormir un rato mas en la comodidad de mi cama.

Me desperté cuando ya no tenía mas sueño, me bañe, me vestí deportiva y desayune- almorcé mientras mis padres merendaban y escuchaban mis anécdotas, que fueron totalmente editados para ser entendidos por ellos, en resumen solo les di a entender que la fiesta no fue tan genial, nos retiramos temprano, comimos donas y terminamos viendo el amanecer en nuestro sitio favorito desde que nos conocimos.

Cuando el reloj dio las seis de la tarde, mi hermana me había convencido de llevarla por un helado y para darle mas azúcar a mi organismo accedí. Caminamos cantando las canciones de su caricatura favorita, la heladería no quedaba tan lejos pero de tener un auto de seguro ya habríamos vuelto o incluso habríamos evitado el encontrarnos cara a cara con mi ex.

Desconociendo el tema de los ex novios, el como se actúa después de una ruptura quise hacerme la loca y evitar que mi mirada se posara sobre quien había sido mi primer novio formal y quien había pedido darnos un tiempo. Pero como solo soy buena en el baile y no se me da la actuación, mi mirada que pretendía ser de indiferencia cayó sobre el y la suya sin ningún temor ni disimulo sobre mí, haciendo que esas mariposas que siempre hacían acto de presencia cuando el estaba, reaparecieran con mas intensidad de lo que recordaba y como soy una novata me quedé petrificada ante su cara de incomprensión.

—Hola Zack— fueron las palabras que soltó mi hermana y que me sacaron de ese estado en el que los nervios me habían sumergido.

—¿Como te va Clarice?— le pregunta.

—Excelente— le sonríe.

—¿Como estas Candace?— pregunta y el escuchar mi nombre de su boca se sintió como morir.

Mi boca estaba seca su que no importaba mucho ya que no sabia que decir, comencemos con el hecho de que no me llamaba Candace desde que comenzamos a conocernos, luego de novios era "Candy". Bueno ahora que recuerdo, me había dicho Candace cuando me dejó, pero volverlo a escuchar abre otro agujero en mi aún roto corazón. ¿Como estas? Era lo que mas temía que preguntara, si decía un "Bien" iba a parecer que ya había superado dos años de relación en un fin de semana, si se le puede llamar así al sábado que transcurrió entre nuestra ruptura el viernes y hoy domingo. Si contestaba un "Mal" dejaría en evidencia el que aún sigo amándolo y esperando por ese "tiempo" que nos dimos, y también entra la posibilidad de que haya visto mi foto con Debby #Party y lo mas probable aún que recuerde que mi hermana le dijo el día anterior que yo dormía por volver muy tarde de una fiesta.

Según yo y mi vano conocimiento en estos temas opté por la opción mas acertada.

—Clarice, ve pidiendo tu helado y esperame en las mesas— le digo y ella lo hace.

Un problema resuelto, aunque no considere a mi hermana un problema, no veo correcto debatir los términos de mi relación o de mi no relación frente a mi hermana.

—La verdad no se— le respondo a su pregunta con total seguridad.

Y no miento, no sabría decir si estoy bien, mal, llevándola, superándola, haciendo lo correcto.

—Me encontré ayer a Clarice en el parque— me dice pasando su mano por el cuello.

—Algo me comentó— le respondo viendo mis converse color vino.

—Te dijo que... ¿Pregunte por ti?— se muerde el labio y adiós concentración ¿Que es hablar?.

—Si— mi voz sale en un susurro pero el parece escucharlo porque asiente.

—Seré sincero contigo como lo he sido siempre, no sabes cuanto me arrepiento de lo que hice, no te estoy engañando ni lo he hecho, no me aburrí de ti no lo veo siquiera posible. Pero vine a pedir unas cajas porque estoy en proceso de mudanza y las necesito—

Mi corazón se rompió un poco mas y de a poco perdió la fuerza con la que supuestamente se estaba recuperando.

—No me debes explicaciones, a final de cuentas no das las que debes— le digo y no se si soné molesta o dolida y siendo sincera no me importa.

—Se que estas enojada por esto, se que soy quien menos querías ver y que quizá esto no solucione nada, pero sigues siendo lo que mas amo, y que aunque llevemos dos días separados y haya sido por mi decisión no significa que te vaya a olvidar, porque no lo haré. Te pedí un tiempo, con la intención de que cuando solucione lo que me esta agobiando, costando mi tranquilidad y nuestra estabilidad como pareja tenga la oportunidad de volver a eso tan maravilloso que teníamos—

Trago el enorme nudo de mi garganta y muerdo mi labio para no ponerme a llorar como una bebe delante de el y de los transeúntes que quieren ir por helado.

—El destino es incierto— le respondo.

—Siempre lo has dicho, pero si el mismo nos juntó y me obliga a separarnos, espero que entre sus planes esté volver a juntarnos. Y si te puedo confesar algo me estoy muriendo de ganas de besarte—

Y no eres el único, las palabras de Zack me conmovieron mas de lo que quiero admitir y mi masoquista corazón quiere que de los pocos pasos que nos separan y lo bese como siempre he amado, pero mi lado racional me impide que lo haga por que al final quien termina sufriendo de nuevo soy yo.