Friends Or love

14. Emociones a flor de piel

Fuera del escenario solo hay euforia y abrazos de unos con otros, felicitaciones entre nosotros y los gritos de Debby y mios por la emoción del momento.

Abrazadas saltamos en nuestro sitio sin decir palabras, aunque sean distintas las razones ambas estamos emocionadas y aunque nos sepamos todas las palabras del diccionario encontraríamos la indicada para describir como se siente.

—Chicos, chicos se que es un momento especial y fue estupendo, pero sus padres están esperándolos— dice Dominic— están en el área múltiple pueden ir con ellos-

Debby se me adelanta mientras yo busco un broche que deje caer en algún momento entre los abrazos y los saltos, lo consigo en el piso y tras tomarlo salgo por el pasillo donde mis compañeros se acaban de ir cuando la silueta de Zack en medio de la oscuridad me sonríe.

—Estuviste grandiosa, se que hay miles de cosas en las que eres buena, pero en esta eres espectacular, no podía esperar menos— me entrega un peluche de una foca.

Mi corazón late mas rápido de lo habitual, mis manos sudan y me sonrojo evidentemente tomando la foca entre mis manos.

—Gracias, por venir, por tus palabras, por la foca— le digo con una timidez nada propia de mi estando ante el.

—No podía faltar, desde que me dijiste la primera vez te prometí que aquí estaría apoyándote, así no hubiera puesto estaría parado a centímetros del escenario de ser posible, pero no me perdería esto por nada— toma mis dos manos y las besa.

—Lo se— le respondo— Significa mucho que hayas cumplido tu promesa—

—No se si es el momento, pero estoy por terminar los asuntos que me incomodan, te prometo que en menos de una semana estaremos de nuevo juntos— me da un beso en la mejilla.

—¿No te habías mudado?— gracias al cielo mi voz logra salir con normalidad, ese beso a pesar de ser tan básico movió cosas en mí.

—No es tan lejos, no podría apartarme de ti a tal punto— me sonrojo por segunda vez.

—Hay, hay una reunión para padres y representantes en el área múltiple, eres bienvenido— me suelta y tras asentir lo dejo en el pasillo con miles de emociones a flor de piel.

Observo mi foca sonriente, se puede decir que ellas son las culpables de mi estado emocional ahora, Zack y yo nos conocimos en un paseo de varios institutos al zoológico, en el entre todos los animales solo había una foca y yo comencé a hablarle para que no se "sintiera" sola, lo que le causó gracia e interés sobre mí, sacando de allí nuestro primer tema de conversación y resulta que después de todo eso cuando comenzamos a salir, al señor romántico (en ese entonces) le pareció lindo obsequiarme una foca de peluche y por ello tengo unas seis sin contar esta otra. Y en serio es impresionante los tipos de peluche de focas que puedes encontrar.

Camino por el salón hasta que diviso a mis padres, me reciben de brazos abiertos y apenas consigo ver a Clarice que solo ataca los dulces de la mesa y me medio sonríe.

—Eres grandiosa cielo, la mejor— son las palabras de mi conmovida madre mientras me abraza junto a mi padre.

—No hay palabras que describan lo orgulloso que estoy de ti — me dice ahora el y solo susurro "gracias". Aunque quisiera decirles lo agradecida que estoy por haberme llevado desde pequeña a baile y por apoyarme a seguir mis sueños el lugar esta lleno de gritos, llantos, y es mas complicado hablar.

—Vi que un chico, estaba sentado en un puesto que según parece era para el— me dice mamá refiriéndose a Zack y asiento sin darle tanta importancia, para no dejar en evidencia mi emoción.

—Lo vi— le muestro la foca y ella sonríe — Había jurado de hace tiempo que nada le impediría acompañarme en este día, y lo cumplió —

—Eso dice mucho de el como persona. Y sus mirada, sus acciones, todo grita que aún te quiere—  sonrió por inercia cuando mamá dice lo ultimo. Observo tras de mi como su figura desde la puerta se despide con la mano al aire.

Mi mirada fija en ese pasillo donde hablamos hace poco, donde muchas emociones volvieron a hacer acto de presencia se enfoca en una señora rubia, alta y de facciones serias que camina hacia mi con un caminar lleno de seguridad.

—Candace Tate— me dice situada al frente y asiento— seria tan amable de regalarme unos minuto— la acompaño a donde me indica bajo la mirada de mis padres, nos alejamos un poco del gentío y concentro mi atención en ella.

—¿En que puedo ayudarle?— tomo mejor la foca en mi mano y ella ignora mi acción.

—Soy Regina Grifin, representante y caza talentos de StepRecord— mi cara se ilumina mientras tomo la mano que me tiende— Estaríamos muy felices de que usted perteneciera a nuestro equipo, aquí le dejo nuestra tarjeta— me la entrega— llame en esta semana sin esta interesada—

—¡Muchas gracias!— la tomo— en verdad estoy muy agradecida y emocionada— miro la tarjeta en mis manos que con letra corrida dice StepRecord "Bailemos el sueño"

—Esperaremos su llamada— me da la mano y se va.

Corro donde mis padres a contarles la noticia cuando Debby se me atraviesa en el medio y me abraza.

—Me escogió StepRecord— me susurra— acabo de hablar con Samir Connor— sonríe ampliamente y tiembla levemente.

Sonrío emocionada y de igual manera le susurro —Me escogió StepRecord, Me habló Regina Grifin — se separa de mi un momento y asiento muchas veces. Ella me vuelve a abrazar con euforia y saltamos juntas en nuestro sitio.

—Estoy muy orgullosa de ti— me dice.

—Yo también lo estoy de ti—

—Te amo amiga— me dice y me abraza mas fuerte.

—Te amo amiga— una lágrima se desliza por mi mejilla.

—¿Y ese peluche?— me pregunta cuando nota la presencia del peluche entre las dos.

—Un regalo— me encojo de hombros mientras le sonrío inocente.

Caminamos abrazadas hasta que mi madre me llama con una seña, le dejo un beso en la mejilla a mi amiga quien igual se dirige a sus padres y cuando estoy frente a quienes me dieron la vida, con voz calmada, como si no fuera lo mas emocionante de mi vida digo.

—StepRecord— su cara se ilumina —Me quieren en su equipo— digo lo último con la sonrisa mas amplia del mundo, los brazos de mis padres me rodean con demasiada fuerza y me río por que se siente bien, luego de una semana donde la tristeza, depresión y esa clase de emociones no me han dado descanso la felicidad, la emoción y el orgullo prevalecen y me recuerdan que de eso esta compuesta la vida. Muy parecida a una montaña rusa.