7. Sentimientos

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Nos habíamos dejado llevar por la emoción, ya no estaba segura de si bailaba o hacía el intento, había perdido la cuenta de cuantos tequilas había tomado, a quien había conocido y no podía diferenciar a un gemelo de otro.

—Entonces Wilson, ¿Debby y tu salieron mucho tiempo?—

—Soy Owen, y no. Ella no tenia los mismos intereses que yo— se encoje de hombros.

—¿Entonces?— bebo.

—Solo tuvimos varios encuentros— sonríe.

—Se acuestan y ya, sin compromiso— me lo pienso.

—Exactamente— sonríe.

—¿Como se siente?— le pregunto en un susurro.

—¿Eres virgen?— me mira sorprendido.

—Obvio no, pero solo he estado con quien ahora es mi ex novio— le digo como si fuera obvio.

—¿Te enseño?— me sonríe con malicia.

—De acuerdo— me levanto como puedo del banco en el que no recordaba haberme sentado y con su mano en la cintura vamos camino a la cabaña.

—Espera ahí— dice la voz de Debby desde atrás.

—¿Que ocurre?— le pregunta Wilson.

—¿Que piensas hacer?— me jala hacia su lado— Espero que no hayas ni siquiera considerado el acostarte con mi amiga—

—¿No puedo? ¿Te dan celos?— se burla.

—¿Celos? Por favor. No quiero que te le acerques en ningún plan a mi amiga— le hace señas de que se aleje y este solo gira los ojos y se va.

—¿Y tu que pensabas? ¿Estas loca?— me grita mientras me sacude por los hombros.

—¿Que te pasa?— la detengo— Vinimos a pasarla bien— le respondo de brazos cruzados.

—Y si mal no recuerdo mencione bailar y beber, no hacer quien sabe que tenia en mente Owen. Le dijiste a tu madre que sin sorpresas— me reprende.

—Solo quería probar el "Acostarse sin compromiso"— Le respondo.

—No es correcto, y no es tu forma de ser. Tu solo has estado con Zack y no tienes ni la madurez ni la experiencia para estarlo con Owen—

—¿Que importa Zack? ¿Que le debo a el si el no me debe a mi? ¿Tu si? Tu eres la única capacitada para estar con gente sin compromiso—

-Tienes razón no le debes nada a Zack. ¿Pero que importa el? Lo hago por ti y aunque ahorita estés con cara de querer golpearme, mañana me lo agradecerás. Owen no es la clase de chico con la que quieras estar, ni yo tampoco. Y por eso no seguimos pero tampoco es el caso. El punto está en que la Candace que yo conozco no es así, no se lanza a brazos cualquiera y mientras pueda impedirlo no será así—

—Entonces gracias— le digo aun enojada —¿Ahora que?—

—Ya vámonos a la casa— estira su mano y la tomo.

Caminamos hasta la cabaña, tomamos nuestras cosas y llamamos a Andrew para que nos buscara, y como el siempre esta allí para nosotras pronto llega con ganas de enterarse de lo sucedido paramos en un restaurant de veinticuatro horas a merendar.

—Estoy decepcionado— me dice negando con la cabeza —Es Owen mas allá de que no se quien es, es el ex de tu amiga ¿Que no tienen códigos?— dice el comiendo su dona.

Ya para ese momento luego de dos tazas de café de los fuertes, ya no estaba ni la mitad de ebria que antes por lo que veía todo con mas claridad.

—Claro que si, pero no se que me pasó exactamente. Jamás en mi vida había considerado siquiera besar a un desconocido en ningún concepto, sin contar que hasta ahora sigo creyendo que era Wilson y no Owen— me justifico.

—Lo peor del caso no es eso— dice Debby— se puso tan molesta que me sacó en cara que si solo yo, era la "capacitada" para este tipo de situaciones— se burla.

—No juegues— se burla Andrew— Eso es síndrome pos ruptura seguro, creíste que al  experimentar podrías opacar los sentimientos que te abordan— bebe su café.

—¿Cuales sentimientos?— le pregunto.

—En estos casos siempre hay varios, decepción, tristeza, nostalgia y hasta arrepentimiento—

—Creo que si, la pegaste en cada uno— suspiro.

—Y esa es la razón de por que soy la "capacitada" y te aclaro que no es así, solo soy una chica de diecinueve años que tiene miedo a entregarse por completo a alguien y que esa persona no la sepa valorar, no le corresponda o simplemente se aburra— baja la mirada a su taza de chocolate y pasa su dedo índice por el borde.

Andrew y yo intercambiamos miradas en silencio, y no por lastima. En los siete años que tengo conociendo a Debby nunca había sido tan sincera y abierta respecto a sus sentimientos, antes de llegar a la fiesta había dicho algo que vagamente recordaba pero sabía que era importante y ahora se había abierto con nosotros, estaba sin palabras no se me ocurría que responder.

—No quiero me miren extraño ni nada— deja de jugar con la taza y nos mira, con su típica expresión— sigo siendo la misma insoportable Debby que solo quiere noches de acción sin compromiso. Si, tuvo un pequeño momento de valentía y dijo unas cuantas palabras con sentimientos, pero soy yo—

—De todos modos, siempre es así. El tener esta mezcla de sentimientos nos hace humanos y esta cantidad de temores son los que nos hace unos típicos adolescentes que ya pronto llegan a la edad adulta— dice Andrew y nos miramos entre los tres.

Andrew siempre sabía que aconsejar. Escuchar, regañar todo lo hacia parecer tan fácil, era esa clase de persona que no te juzgan aunque estés hundida, y teníamos la suerte de que fuera nuestro amigo. Eleve mi dona y la deje en el centro de los tres, ambos repitieron mi acción riéndose y aclarándose la garganta Debby dice:

—Por estas conversaciones sinceras, maduras y sentimentales que surgen luego de las fiestas— chocamos las donas en forma de brindis.

Cuando acabamos la merienda, salimos del local con el reloj marcando las cuatro y media, muy tarde o muy temprano para volver a casa decidimos ir al mirador y aunque era el sitio donde siempre iban parejas de noche a hacer quien sabe que con la escusa de mirar las estrellas, nosotros fuimos cuando iba a amanecer con la escusa de ser los primeros en ver el sol siendo en realidad solo queríamos pasar mas tiempo juntos y siendo adolescentes.

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