Friends Or love

10. Decisiones

Creo que la diferencia entre los niños, los adolescentes y los adultos mas allá de la edad, acciones, pensamientos y demás cosas obvias se diferencian por el tamaño de sus decisiones. Ya no solo es si te gusta mas el color rojo o rosa para colorear la flor, o si el vestido negro o blanco para ir a la fiesta, es si lo que crees necesitar ahorita lo seguirás necesitando, o si por lo que vale la pena luchar ahorita seguirá valiendo la pena después.
Me pasé todo el camino a la academia pensando en ello, en si el amor que tengo hacia Zack me va a durar hasta viejita o si solo es un capricho, una atracción momentánea o un episodio de mi vida que mas adelante superare y del que me acordaré muy vagamente.

¿Si fuera así? Y pierdo el tiempo que podría disfrutar en compañía de otra persona esperando el regreso de Zack con la misma intensidad en sus palabras y el mismo brillo en sus ojos cuando me mira.

Y si quizá fuera una prueba del destino, para comprobar que tan enamorados estamos y que tanta confianza hay como para separarnos y volver cuando se pueda.

Llego al sitio y me dirijo a mi casillero, dejo las cosas que no usaré y comienzo mi calentamiento.

¿Que pasará si donde el se muda, le gusta alguien mas? ¿Si comienza a salir con alguien? ¿Por que yo no podría? Si fuera una relación a distancia tendríamos la certeza de que aunque estemos separados estamos juntos, y que nada irrumpiría en nuestra relación. Pero el término tiempo, no se si abarca en todos pero en este caso por lo que entiendo, es separarnos aún haciéndonos daño, aún sin querer por razones apremiantes que son desconocidas por mí, pero que consiguen quitarme el sueño.

Comienza Dominic a dar indicaciones y nosotros a seguirle, aún no llega Debby y en parte lo agradezco, he tenido un momento de reflexión demasiado extenso y el cual ella fuera interrumpido sin culpa alguna. Damos inicio al ensayo como tal, mientras repasamos los pasos para la presentación de este sábado próximo, donde vendrán diferentes representantes de varias industrias en busca de bailarines para sus cantantes, y debería ser eso lo que ocupe mi mente a millón, el entregar todo de mí y garantizar un buen futuro, pero como la vida no es una fábrica de pedir deseo lo único que reiteradamente se repite en mi cabeza es Zack.

Cuando termino la práctica ya he tomado mi decisión. Ya estoy totalmente segura de que lo correcto es lo que dicta mi corazón y el no para de decir que confíe en las palabras de quien amo, como siempre lo he hecho.

De regreso a casa en mi bicicleta, paso por la caza de Debby. Debe existir una razón muy desafiante para que mi amiga falte a un ensayo, estamos igual de perdidas por el baile.  Llego y dejo la bicicleta con el vigilante y subo al piso dos al departamento 2.b toco la puerta tres veces para que sepa que soy yo y me abre su madre.

—Hola Candace, Debby está en su cuarto— me da espacio para que entre.

—Hola Sra, Lucia. Gracias— camino el corto pasillo hasta el cuarto de la puerta blanca con estrellas y toco tres veces.

—Adelante— dice y entro.

Encuentro a Debby en una postura muy incomoda de yoga y desde allí me sonríe.

—¿Faltaste a un ensayo por yoga?— me siento en un lado de su cama.

—Estoy hecha una bola de nervios, se que la presentación es el sábado y aún falta— cambia de posición — pero me da estrés—

—Y ¿faltando a las practicas finales conseguirás quitar el estrés?—

—No— se estira y se pone de pie— Se que no hago nada faltando, pero solo fue hoy— me besa la mejilla y se sienta a mi lado. —¿Algo nuevo que reportar?—

—Nada— me encojo de hombros —Un Dominic intenso y una hora mas de práctica por algunos errores cometidos—

—¿Te fue bien?—

—No escuché quejas— me encojo de hombros. 

—Entonces estuviste bien— sonríe —¿Salimos?—

—Mejor veamos televisión—

—En ese caso escoge algo mientras me ducho. ¿Helado o torta?—

—Torta— ella asiente y sale del cuarto, mientras yo tomo el control remoto y comienzo a buscar que ver.

Horas mas tarde cuando ya comimos suficiente torta acabamos una película muy incomoda y un programa de cupcakes, me voy a mi casa.

Cuando llego está todo en silencio, mamá salió a dejar a Clarice en casa de su amiga según dice la nota en el perchero y papá está trabajando, por lo que voy a la cocina tomo un enorme vaso de agua y cuando me voy a lanzar en el sofá a ver mas televisión suena el timbre, con mucha pereza y descalza abro la puerta y un sonriente Andrew me saluda con la mano.

—Adelante— le dejo entrar— ¿Me estas vigilando?—

—No llego a ese nivel ¿Por que?— pregunta cuando ya estamos sentados en el sofá.

—Acabo de llegar, me había lanzado en el sofá e iba a ver algo—

—Solo estaba aburrido en mi casa, recordé que no tengo amigos hombres y que tu podrías estar aquí— se encoje de hombros.

—Quieres contarme algo—

—Quiero hablar sobre algo, francamente se lo podría haber dicho hasta a mi vecino de ser el un poco mas amable y si no pusiera mala cara cuando me viera— nos reímos— Creo que me gusta alguien, no seas chismosa no te diré quien. Y hoy me levanté con las ganas de decirle, hacer frente a esto, pero luego recordé que es un creo. No estoy cien por ciento seguro de que sea así y no quiero o crear falsas ilusiones o recibir una patada y volver a casa con las tablas en la cabeza— recuesta su cabeza en mis piernas y acaricio su cabello.

—Creo, que no debes actuar sin estar cien por cien de seguro, si dicen que el que no arriesga no gana, pero hay que pensar en que se pierde—

—Eso era justo lo que necesitaba, alguien con cosas clara— me sonríe— ¿Que hay de ti? ¿Que sucede en tu cabeza?—

—Siendo franca, hasta esta mañana había duda, temor y quien sabe que mas, pero tomé toda la mañana para pensar, y no puedo, no consigo que mi corazón olvide a Zack, entonces decidí que aunque el destino es incierto, esperare este tiempo a ver que sucede. Me explico, no buscaré consuelo en mas nadie, ni en el alcohol, esperare a que el destino me indique que va a pasar, y si este tiempo es el suficiente para que el solucione sus asuntos y vuelva como dice, aquí estaré siendo fiel a lo que siento y confiando en sus palabras—

—Estoy totalmente de acuerdo—me guiña el ojo.