Friends Or love

13. El gran día

El resto de la semana se pasa rápido, el martes el ensayo con Debby fue de lo mas normal, no quiso responder a mis preguntas respecto a su actitud de la noche anterior aunque le insistí demasiado, por lo que me rendí prefiriendo quedar con la duda que seguir arrastrándome tras ella, el almuerzo fue posiblemente el momento mas incomodo de mi vida, incluso mas que el quedarme petrificada frente a Cameron y el no saber como despedirme de el.

Me enteré ese día que ese grupo no tiene secretos, literalmente todos ahí ya sabían que solo me había acostado con mi actual ex novio, que había accedido a irme con Owen a tener un encuentro, incluso que estaba tan confundida que le llamaba Wilson. Por lo que tuve que aguantar las burlas de cada uno, había hablado en privado con Debby y detalladamente le explique las razones por las que quería irme y ella solo se negaba a aceptar que ya no eran burlas de juego, si no un acoso muy molesto el cual no aguante mucho. Dejé mi hamburguesa a medio comer con el dinero de la cuenta sobre la bandeja, me marché sin importarme los llamados de Debby y las otras burlas que las ingeniosas mentes de los amigos de Coly me hacían.

Habíamos planeado practicar en las tardes para reforzar la rutina, aunque ya teníamos la coreografía grabada en los huesos, no sonaba tan descabellado ensayar mas. Pero por obvias razones el martes ya no lo habíamos hecho.

Miércoles y jueves, se van en un soplido. Con el sábado a la vuelta de la esquina había disculpado la falta de Debby y dejado atrás el tema de sus amigos.

El viernes, día libre para descansar lo usamos para despejar la mente de la presión que trae una presentación de tal magnitud, por lo que vamos a la academia donde pocas personas están, colocamos musica latina es decir merengue y salsa para olvidar los nervios de la manera mas divertida, bailando separadas, luego en parejas, inventando pasos de baile y nos grabamos mientras tanto, al final siempre vemos esos vídeos luego de las presentaciones y nos hace feliz. Cuando ya son las siete de la noche, llego a casa mas cansada de lo habitual, ceno una ensalada de fruta y con los audífonos puestos me entrego a morfeo.

El sábado al medio día, me despierto y almuerzo de una vez, saco mi traje para la coreografía y arreglo mis cosas, tras bañarme y colocarme una ropa sencilla salgo en busca de mis padres.

-Es el gran día- dice mamá cuando entra.

-Lo se- le respondo.

-¿Que tienes? No suenas muy emocionada- me toma de los hombros.

-Recuerdas que solo eran tres invitaciones por bailarín- ella asiente- yo compré un puesto adicional para Zack- muerdo mi labio en espera de una respuesta.

-No te pongas así, el destino mismo no quiso que sucediera, ahora piensa que estaré mas cómoda con un puesto para mi cartera- la miro mal y ella sonríe. -No te pongas triste, tienes que estar feliz y segura de que vas a bailar como los dioses y que impresionadas a todos los agentes que se pelearan por llevarte con ellos-

Suspiro y solo le sonrío para verla hacer lo mismo, salimos en el auto de mi padre directo al auditorio, el sitio está lleno de familias y de bailarines unos ya listos otros que corretean a los camerinos, busco a Debby con la mirada y está con sus padres por lo que corro donde ellos y los saludo, cuando nos indican que falta poco, corremos a cambiarnos y maquillarnos mientras nuestros padres van al auditorio. Retoques, gritos de guerra e indicaciones mas tarde, hacen la presentación formal del grupo y es nuestro momento de brillar.

Comienza Shape of you de Ed' Sheeran y hacemos nuestra entrada, trato de ignorar el hecho de que personas importantes para mí como mi familia, y para la industria como los representantes están viendo cada movimiento que realizo, cuando tocan los momentos de solo, y me dejan el centro para mi sola, veo a mamá quien sonríe con emoción, a Clarice y a papá que me mira con orgullo y por cosas del destino mismo, mi mirada cae en el puesto junto a papá que debería estar vacío y esta siendo ocupado por Zack. Trago fuertemente cuando tras verlo por lo que parecen horas confirmo que es el, vestido en un traje de dos piezas que lo hace lucir atractivo y deseable.

Doy inicio a mi solo y entrego lo mejor de mi, siendo masoquista por querer impresionar al chico que esta justo allí en el puesto que le reservé, viéndome con cara de bobo. Mi cuerpo parece tener vida propia y salen fluidos y perfectos en mi opinión cada paso de baile ensayado tantas semanas atrás, incluso cuando me regreso a mi sitio sin poder controlar mi mirada lo veo, está de pie aplaudiendo y con su radiante sonrisa. Siento perder toda concentración, incluso dudo poder decir alguna frase coherente si alguien me llegase a preguntar algo, por que ese chico que amo esta allí, vestido de manera elegante, de pie, el único que se puso de pie y esta aplaudiendo y sonriendo, como si fuera lo mejor del mundo. La realidad regresa a mí cuando aplausos comienzan a sonar indicando que el ultimo sólo terminó, faltando nada mas el cierre y los agradecimientos.