Vacio.
Un gran vacío inundaba el ser de Taehyung, ese vacío lo envolvía por completo, lo atrapaba.No era un vacío obscuro, temeroso y frío, era brillante y cálido, como un abrazo, un verdadero abrazo.
Despegó sus parpados aturdido por el sonido del silencio, demasiado silencio ocupaba la habitación.
Le molestaba, le molestaba y dolía el hecho de no escuchar el insistente sonido del medidor cardíaco.
Y le dolía, le dolía pensar que en estos momentos su compañero estaba perdiendo la vida, que su hermano perdía la esperanza y que él perdía las ganas de esforzarse cada día para respirar.
Unos pequeños y molestos tubos transparentes, penetraban sus fosas nasales, rozando el dolor, dándole algo que ni siquiera quería.
Observó a su costado, buscando la inerte compañía, no la encontró.
De cierta forma sabía, tenía bastante claro lo que pasaría, el otro chico moriría, dentro de una semana llegaría un paciente distinto a ocupar su camilla y él volvería a la soledad de siempre.
Tal vez su hermano pasara a saludar y el diera su pésame, a pesar de que no serviría de muchi mas que cortesía, pero no, él estaría muy dolido como para volver a pisar es frio piso encerrado en cuatro paredes blancas.
Una pequeña lágrima impactó en la almohada, había dejado un camino en su mejilla derecha, como si dejara el recuerdo del dolor a su paso y lo hacia, porque con ella no bastaba.
Más lágrimas aparecieron, asomándose por sus lineas de agua y desbordandose, deseosas de querer acabar con el dolor, pero sabiendo que solo servirían de desahogo por un instante.
El llanto acabó con el silencio pulcro del ambiente, haciendo que la señora mayor que dormía incómoda en la silla, despertara y se acercase a su hijo.
-Cariño- habló con voz dulce y serena, intentando calmar los llantos de su pequeño.
-Tae ¿qué pasa?- utilizó el mismo tono que el nombrado sentía como calmantes.
-Mamá, es Hobi.. él, él..- y el llanto volvió, como si fuese un bebé no podía controlarlo, simplemente salía.-Tranquilo- habló la mujer con paciencia -Todo va a estar bien- abrazó y acarició a su hijo mientras este se dormía en sus brazos.
Abriendo sus ojos despertó en lo que pensó que era un mundo paralelo, donde las personas estaban igual de congeladas que el tiempo.
Comenzó a buscar a su amigo por todas partes, entre las estatuas congeladas o los autos estáticos.
Un trueno retumbo en el lugar, haciendo que el castaño se estremeciera, pegó un pequeño salto en el lugar y miró al cielo, Un gris obscuro ocupaba el cielo infinito que se cernía impotente sobre el escenario inmóvil.
Jamás había visto un cielo tan denso y un clima tan pesado, parecía que iba a caerse el cielo sobre ellos.
Ellos...
Él
Ahí estaba, de pie frente a él, observando su figura, sin síntomas de movilidad.
-Hobi- susurro e intentó acercarse pero este se alejó los pasos que Tae había avanzado.
El Castaño no entendía absolutamente nada de lo que pasaba, no entendía la extraña actitud de Hoseok.
-Vete- espetó el pelinegro con voz neutral.
-¿Hobi? ¿Que pasa?-
-Solo quiero que te vayas,¡NO! ¡no te acerques!- gritó cuando Taehyung quiso acercarse nuevamente.
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Intermedio. {VHope}
Fanfiction>>Dos pacientes >>Una habitación. >>Una conexión inexplicable. *Advertencia* >>Contenido Homosexual<< Si no te gusta, no lo leas. >> Se tratan temas de enfermedades, temas delicados que son reales, por favor, tene...