Inspiro

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Saco la bomba de la cajetilla

colocándolo entre mis labios.

Saco el mechero y le acerco la llama,

encendiendo este arma que mata.


Inspiro.

Siento como el humo acaricia mi garganta,

intoxicando mis pulmones.

Espiro.

El humo sale de mi boca y se mezcla con el aire,

Llevándose consigo mis problemas.


Mi cerebro me dice que no está bien

y mis pulmones se quejan de él,

pero una sensación de calma

se apodera de mi cuerpo,

¿no puedo olvidarme, por un rato,

del mundo que agobia mi alma?


Inspiro. Espiro.

El humo ahoga este dolor.

Inspiro. Espiro.

Siento el mundo que se llena de color.

Inspiro. Espiro.

No me juzgues por favor.

Inspiro. Espiro.

Esta fantasía ya acabó.

Poemas de un alma rotaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora