Amor Por Casualidad

Capítulo 26

Me agarra los labios con los dientes y lloro como un perrito chiquito, les destapo los ojos y me agarra de la cintura y me suelta el labio. Auch digo tratando de verme el labio con ayuda de mis manos. Cuando me doy cuenta esta la canilla abierta paso una mano por el agua y se la repaso otra vez, no me tientes que vamos a terminar mal –sonríe-. ¿Terminal mal? No tenés ropa, ¿ves bien? Estoy vestida -sonrío-. Se me acerca y me mira fijo al igual que yo a él, miro al costado y estaba llenando un vaso. (Que inteligente que es) salgo corriendo antes de que termine de llenarlo y siento toda la espalda mojada, me quedo quieta mirando el piso que gotea, me doy vuelta y voy hacia él, agarro el mismo vaso lo cargo y se lo tiro desde la cabeza, estamos a mano digo. Voy a buscar para limpiar dice, cargo agua rápido y se la tiro por la espalda para que sienta lo mismo que sentí yo, se da vuelta me mira y yo le sonrío, ahora si estamos a mano. Se me acerca me atrapa con las manos, me sube a su cintura y me besa. (¿A dónde vamos?) -Me pregunto- siento toda la espalda fria, miro para los costados y entramos al baño, me separo de él ¿Me vas a secar? ¡Qué amor! No me baja en el piso, si no en la bañadera ¿Qué vas a hacer? Me traicionaste y eso es paga con sangre. Abre toda una canilla y siento como todo mi cuerpo se cubre de agua, me agarra la mano y me da una vuelta ¿Querías jugar? Junto las manos acumulo agua, se la tiro y sonrío. Estabas seco ahí, me muestra una media sonrisa, te dejo bañarte, ahí te traigo ropa. Cierro la canilla fría y abro la caliente. Salgo del baño y escucho a Tifón hablando, ¿cuándo viene? ¿Qué? Y ¿Por qué? Trabajo, no me puedo ocupar de ella mucho, ¿hola? Se da vuelta, ¿te llevo? ¿Todo bien? Si, en la pieza está tu vestido seco, bueno gracias, son las 3 dice, agarro mi celular, me pongo los tacos y me voy hacia el living.

Bueno, gracias espero que lo hayas pasado bien, le doy un beso y me bajo del auto. ¡Llegue! Grito. Subo las escaleras y llego a mi pieza, había un sobre, me cambio de ropa y me siento en la cama, lo abro y había una carta el otro lo tengo yo, papá. Bajo las escaleras. ¡PAPÁ! Grito, nadie contesta, acá estoy escucho, ¿cómo la pasaste hija? Bien, más que bien, me alegro mucho, ¿viste el sobre? Si, vení ¿Qué? Saca unas llaves ¿Me tenés? No me acuerdo donde lo puse, abre los cajones, los bolsillos, ah afuera en el auto de Joaquín veni acompañame. Salimos afuera ¡Feliz cumpleaños! ¿Para mí? El auto no, la bicicleta, si para vos hija tu propio auto. ¡Wow! (me quedo con sorprendida con las  manos en la boca) ¡Gracias! Lo abrazo, ¿y? ¿No la vas a abrir? con este se abre el auto, con este otro botón se abre el baúl, ¡me encanta papá! le digo volviendo a casa, gracias otra vez. Subo a mi pieza, eso sí ¡No traigas a ningún novio! Escucho.