Evidentemente, Emma no tuvo noticias de Ruby. Ciertamente se imaginaba a su amiga en los brazos de su bella asiática aún...
Cuando Emma se levantó, echó una mirada a su reloj: tenía aún unos buenos 20 minutos antes de encontrarse con su comandante en el gimnasio. Se dio una ducha rápida y se vistió con unos short vaqueros y un top rosa fosforescente, y se hizo una cola de caballo. Se puso sus cómodos tenis y marchó hacia el gimnasio, cuyo camino era el que ahora ya se conocía mejor.
Cuando llegó a la sala, evidentemente no había nadie a esa hora tan temprana, ni siquiera Regina. Entonces suspiró antes de subirse a una bicicleta y comenzar a pedalear. Al cabo de cinco minutos, la puerta se abrió y el corazón de Emma se detuvo ante la aparición que vieron sus ojos: Regina acababa de entrar, llevando unos leggins gris antracita y un top deportivo negro, dejando a la vista un vientre y unos abdominales ligeramente esculpidos.
«Oh, mierda...» resopló Emma, totalmente obnubilada por su figura.
«Miss Swan, ¿llego tarde? ¿Miss Swan?»
Emma tuvo dificultades para apartar su mirada de las ventajosas curvas de la joven.
«Hm, euh...no...en fin, no sé...»
Al ver la turbación en la bella rubia, Regina no supo si debía sentirse halagada o incómoda. Desvió el rostro para sentarse también en la bicicleta al lado de la de Emma. Y juntas comenzaron a pedalear.
«¿Hacemos 12 kilómetros?»
«Ok» respondió Emma, amante de los desafíos
Y al cabo de unos diez minutos, Emma entabló la conversación
«Entonces, es usted deportista, euh...»
«Bastante. Tengo que mantener mi forma. No hay ocasión de moverse de aquí. El gimnasio es el único sitio donde puedo ejercitarme»
Emma tenía una pequeña idea sobre qué otra manera ejercitarse fuera de ahí, pero se quedó callada, con una ligera sonrisa en los labios.
«¿Y usted? ¿Gran deportista?»
«Tengo que serlo con mi trabajo. Ya se piensa que una mujer no debería ser poli, así que si no estoy en forma físicamente hablando...»
«Tenemos eso en común: prejuicios sobre nuestro trabajo. A veces, es muy duro probar que valemos»
«Es una pena que tengamos que demostrar a los hombres que valemos tanto como ellos...Creo que es la razón por la cual me he inclinado hacia las mujeres, pienso...» ironizó ella
Regina entonces sonrió y asintió
«Ciertamente nuestras elecciones de vida tiene que ver con nuestras percepciones de ella. Creo que yo elegí vivir en las aguas porque la vida en la ciudad me desilusionó...»
«¿Por qué?»
«Perdí a mi padre cuando era joven. Estaba muy apegada a él. Fue él quien me hizo descubrir los barcos. Pasábamos horas en el lago cerca de donde vivíamos. Después, durante las vacaciones de verano, nos íbamos en familia al mar, era mis vacaciones preferidas»
«Me lo imagino...¿Tiene hermanos o hermanas?»
«Una hermana mayor. Estamos distanciadas desde que comencé con los cruceros. Realmente, solo los veo por las grandes ocasiones como Navidad o Acción de Gracias...»
«¿No es duro?»
«Uno se hace a ello, como con muchas cosas»
Emma notó la mirada y la sonrisa triste de la joven: pues aunque afirmara estar feliz con esa vida, sentía un pesado fardo sobre sus hombros y una apremiante nostalgia.
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Love Boat
FanfictionTraducción del fic francés Love Boat, de Sedgie. AU. Regina Mills es la comandante del barco Love Boat, especializado en cruceros para solteros. Emma Swan es una soltera que ama su vida neoyprkina, sus pizzas y a su perro. Pero, ¿qué ocurrirá si sus...