Miau, Miau...Hola

23. Destrucción Total

Hasel sin más ni menos salió disparada de su asiento y se dirigió a mi con una cachetada. Realmente si me dolió, aunque me dolió más el anillo que llevaba puesto.

—Hasel ¡Yo te lo puedo explicar! —dijo Antonio intentando calmar la fiesta pues esto ya parecía circo.
—Estamos a meses de casarnos Antonio y...no quiero que me sigas engañando cuando estemos casados—Respondió con una vacío en su corazón.
—Pero...—El intentó abrasarla pero ella completamente se negó.
En eso Hasel se saca el anillo y se lo deja en manos de su prometido o querré decir ex-prometido.
—Esto se acabo, gracias por hacerme feliz.

Eso fue lo último que dijo antes de marcharse de la fiesta con su hija.
Al momento de que se iban a ir Hasel y su hija, Antonio fue tras ellas y hablaron un buen tiempo y la niña se regresó a donde estaba que creo que eran los juegos.

Y simplemente yo me decía a mí misma...
"Rompiste el corazón de aquella chica solo por tus celos"
"Si hice sentir mal a ella, como le pasara a mi Orlando"
"Eres una ladrona embustera"
"Banana se decepcionaría de ti"

No sabía qué hacer, si alegrarme de que por fin está disponible o llorar por la persona asquerosa que soy.
Estoy engañando a mi marido.
Y en ese pensamiento me llegó un mensaje de texto...

Orlando
¡Hola! ❤️ ya llegué a la fiesta, disculpa la tardanza pero... en donde estás.
Te tengo una sorpresa.✨🙈

¡POR QUÉ A MÍ! Dios mío, si quería verlo para decirle que también que lo nuestro acabo, pero ahora no puedo decírselo y menos en la fiesta de Banana. Realmente si soy una gata.

Entonces decidí ir hacia Orlando pasando por todos los invitados y la área de juegos hasta que lo encontré y traía en la mano un papel...
—Es tuyo, ¡ábrelo!
Así que los abrí y vi que eran boletos para un viaje hacia Europa. Me emocioné tanto que lo abrace y lo besé hasta que noté que Antonio nos veía junto a su familia.
De repente vino hacia mí Hasel y me dio un papelito y se fue junto a su hija de la fiesta.

Por favor, estás tonta.
Antonio me dejó por ti y mira tú lo qué haces por el enfrente de su cara.
¡No tienes vergüenza!
Hasta nunca. ~Hasel 😊.

Ella tenía razón, yo solo estaba engañando a los dos.
Solo quería hacer sentir un poco mal a Antonio, pero no quería destruir a su familia ni la mía.